Dos años transcurrieron, todo iba muy bien. Aarón es un niño fuerte y muy sano. Tiene los mismos ojos de su padre. Ver a Aarón es como ver a Marcos. Y la sonrisa, esa sonrisa que solo Marcos sabía darme, Aarón de igual manera e incluso sonreía más pícaro que Marcos. Este niño será todo un Don Juan cuando sea mayor.
Aarón llena mi vida de alegría, verlo reír me hace la madre más feliz del mundo.
***
Estaba en el café esperando a que Nicole llegará con Aarón. Hace semanas me había pedido tanto y tanto que quería quedarse con él y como decirle que no. A ver si así ella practica para cuando le toque, que seguramente será muy pronto.
Saqué el móvil del bolso para marcarle a Nicole, la verdad me desespera mucho que siempre llegue tarde. Esa mujer nunca será puntual, ni quiero imaginar el día de su boda. Todo novia se tarda en llegar, pero creo que ella hará récord.
-¿Disculpe? Se le ha caído esto.
Un señor se me acercó a entregarme un papel que se me había caído del bolso. Le di las gracias, guarde el papel y llame a Nicole.
-¿Dónde demonios estás?
-Bajando del coche, me das un momento, que tu niño es muy inquieto.
Sonreí.
-Nadie te manda a querer quedarte con él.
-No he dicho que no me guste. Ya voy por ahí, adiós.
Pude reconocer aquel grito en cualquier lado. Además de ser muy inquieto siempre estaba gritando y diciendo muchas cosas.
-Mira quién está ahí Aarón, mamá-le dijo Nicole.
-Mamá.
-Si mamá, llámala. Di mamá.
-Mamá. Mamá-lo repetía y lo repetía una y otra vez.
-Mira niño-le dije cuando estuvo lo bastante cerca-deja de gritar.
-Titi.
-Si titi está ahí. ¿Te portaste bien?
-Si.
-¿Sí? Que bueno mi amor. ¿De verdad se ha portado bien?-dije mirando a Nicole, no creo que se haya portado del todo bien.
-Claro, él te lo dijo.
Le di un juguete a Aarón para que se tranquilizara un poco y dejara el escándalo.
Iba a comenzar a entablar una conversación con Nicole, pero su celular sonó.
-Hola amor.
-No estoy en casa.
-Eeh dame un momento.
Se me acercó y tapo la bocina del móvil.
-¿Tienes un papel y un lápiz o bolígrafo?-asentí. Saque de mi cartera el papel que se me había caído y un bolígrafo.
-Ahora dime-volvió a su conversación.
Nicole abrió el papel que estaba doblado a la mitad y me lo enseñó con cara de "¿qué es esto?"
Era un número telefónico.
Me encogí de hombros.
Ella le dio la vuelta al papel y escribió algo.
-Este bien amor, yo iré.
-Si, te amo.
-¿De quién es el número?-preguntó cuando finalizó la llamada.
-No lo sé.
-Ooh.
-Ese... Ese papel creo me lo entregó un hombre, dijo que se me había caído.
-¿Estaís de coña? No seas gilipolla Alicia, es la técnica más vieja de dar un número. "Se te ha caído este papel" y ahí apuntan su número para que tu lo llames.
-¿De verdad?
-Claro, como no pudiste ver lo que él trataba de decir. ¿Lo has visto? ¿Es lindo?
-No lo sé, estaba más enfocada en llamarte que en cualquier otra cosa.
-Tan despistada como siempre. No pierdas el tiempo, háblale.
-No, estas loca. ¿Y si es uno de esas personas locas que secuestran gente? Uy no
-Eh vamos.
-Ni de coña.
~Alicia cariño, has memoria. Solo recuerda ese momento en el que alzaste la vista para darle las gracias y tomar el papel. Lo viste, solo intenta recordar~
¿Tú también?
~Intenta recordar~
-Bueno si mis recuerdos no me fallan, no se veía mal, tenía buena pinta. Se veía decente, pero puede ser un loco de igual forma.
-Oh Dios Alicia, solo hablale. Te puedo comprar un móvil prepagado y le hablas de ahí no tienes que utilizar tu número.
-Bien bien, lo haré esta noche.
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Era un día común y corriente. Estaba en la cafetería de siempre cuando de repente recibí un WhatsApp. [WhatsApp de +34 123 456 789] -Hola preciosa. -¿Se puede saber quién eres y cómo tienes mi WhatsApp? -Lo que tienes que saber es que te conozco per...