Tres años después
Abel y yo decidimos darnos una oportunidad. Ya llevábamos un año de relación estable. Hoy celebraremos el cumpleaños número cinco de Aarón y el sexto de Amaїa, por "suerte" ambos cumplen el mismo mes.
[WhatsApp de Abel]
¿Ya esta todo listo? No dejan de molestar que ya quieren ir a casa...
Dame unos cinco minutos
No, no... Tal vez unos 20, faltan varias cosas por hacer.
Ya mismo me caen encima, les aburre estar con la abuela.
Jaja pobrecito, pero te hablo luego para terminar rápido.
Va.
Le haciamos una fiesta sorpresa, todos corríamos en la casa, de un lado a otro. Era todo un caos. ¿Cómo demonios íbamos a terminar si ninguno nos poniamos de acuerdo para hacer las cosas?
-Acaba de llamar el payaso, dice que llegará un poco tarde.
-¿Qué? Esto no puede ir peor.
~Ni lo digas mucho, que todo se arruina~
Shh...
***
Al final todo salió perfectamente bien, el payaso no llego tan tarde y a los niños les encantó la sorpresa.
Al llegar la noche Amaїa volvió con su madre y Aaron se quedó con mi madre.
Abel y yo salimos a caminar, era algo muy de nosotros salir a caminar así porque sí.
-La sonrisa de los niños hoy no tenían precio, estaban muy felices, aunque el hijo de Nicole le tenía miedo al payaso, yo también lo tendría... No se como a ellos les gustaba, yo les tengo un miedito a los payasos, putas películas de terror sobre payasos.
-Si, si que estaban felices. Si, note como le huías al payaso y tomabas al niño como excusa para no acercarte a él.
-Vale, pero nadie más se dio cuenta de eso.
-Todos nos dimos cuenta amor.
-Jaja, que vergüenza. Casi 30 años y huyendole a un payaso.
-Te veías muy linda huyendole.
-Si, sobre todo.
Me di la vuelta y comencé a ver el cielo oscuro lleno de estrellas, millones de estrellas brillantes. Hermosas estrellas que solo vemos en la oscuridad de la noche. Abel me abrazo por la espalda...
-Abel era como una estrella, una estrella que brillaba mucho más que las demás, esa estrella que apareció en mi vida cuando solo había oscuridad.
Nunca pensé que el amor llegaría a través de unos WhatsApp.

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Era un día común y corriente. Estaba en la cafetería de siempre cuando de repente recibí un WhatsApp. [WhatsApp de +34 123 456 789] -Hola preciosa. -¿Se puede saber quién eres y cómo tienes mi WhatsApp? -Lo que tienes que saber es que te conozco per...