Género: Fanfic.
Categoría: Nostálgico (De nuevo :V )
Advertencias: Ninguna.
Dato Extra: En realidad la cancion puede interpretarse de distintas formas, pero me ha parecido adecuada para esta situación, opinen ustedes.
Pd: Si el anterior era conmovedor, esto te deja en trance. A mi parecer, esta canción da ganas de llorar :P pero con un bonito sentimiento.
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Charlie dejó su teléfono reposando en la mesa, viendo sentado hacia la ventanilla, la lluvia arraigaba un paisaje gris y tranquilo en el externo páramo del lugar.No tenía ganas de nada, echaba la cabeza hacia atrás desde su lugar, recordando.
Fue por poco tiempo en que se conocieron, aunque los momentos que compartieron eran especiales... A su lado, entendió lo especial que era ser admirado y querido por alguien ajeno, una persona que paso a ser simple y desconocida a algo más querido para él, escuchándole y sabiendo que decir, una verdadera amistad.
Siempre le sonreía y sacaba lo mejor de él, sienpre animada y juguetona.
El solo recuerdo de su mirada le hizo dar un suspiro bajo.. Le extrañaba.
No entendía como de un día de verle, tan viva y radiante, ya ésta desaparecía de su vista, de su vida.. Para siempre.
Contuvo la respiración un momento, si seguía imaginándose esos tenues recuerdos, aquellos momentos.. Iba a romper a llorar, por lo que se agarró del pecho con fuerza, y esperó.
Esperó un largo rato hasta calmarse, respirando de a poco hasta al fin estabilizar su autocontrol emocional. Odiaba la lluvia ahora, más precisamente que ésta pareciera quererle recordar todas esas memorias perdidas.
Vio de nuevo al sillón, esperando ver algún cambio, y estaba exactamente igual que antes.
Leo seguía acostado en su sitio, con un cojín sobre la cabeza y todavía inmóvil desde hace rato, Charlie le comprendía, hoy era un día pesado para él.
En un domingo como ese, un mes antes todavía hablaban con ella, podían verla sonreír y escuchar su risa chillona animándoles a seguir, a reír, y un sin fin más de emociones que ella les sacaba.
Para Charlie era especial, la mejor amiga que alguna vez tuvo, le encantaba meterse con su estatura, y no dejaba de reír cuando ella protestaba tan infantilmente.
Se sintió mal al respecto, ya que sabía por mucho que ahogara su sufrimiento, tragándose el llanto.. que Leo era el que peor la estaba pasando.
Leondre Devries había perdido la vida en sus ojos, le costaba sonreír y bromear ya no era tan natural en su persona, apenas escuchaba cuando los demás le hablaban o pasaba algo en su entorno.
Charlie siguió observándolo en silencio, desde que hubieron vuelto de aquel lejano lugar, donde su amiga descansaba ahora, no se habían dirigido palabra alguna. Leo cabizbajo solo se dejó caer en aquel sofá, quedando inerte y en un aparente estado de depresión extrema, sin dar al menos la idea de querer moverse o sollozar algo.
Leondre se preguntaba, como de unos segundos en que la tuvo entre sus brazos, luego escuchaba que ya no podría volver a escucharla, verla o al menos sentir su calor de nuevo.
La había visto por última vez antes de comenzar el tour, ella se despedía con ánimo y euforia, animándole y apoyandoles, diciendo que estaría viéndoles en internet, y esperaría cuando regresaran para celebrarles con una gran bienvenida.
Nunca volvió a ver su sonrisa, o su pelo moviéndose ni a escuchar su voz dulce... Ella se había ido.
Y hoy, a pesar de que fue a visitarla de nuevo, no pudo sentir nada más que el peso de su ausencia.
No podía creer que la persona que tanto le llenaba de felicidad y momentos de inolvidable alegría, yaciera ahora sepultada bajo un cielo gris en una tierra fértil.. A metros de sus brazos, y de sus labios.
Con el cojín sobre la cabeza no veía nada, no quería ver ninguna luz, no tenía razones para moverse ni esperaba que algo sucediera a cambio.
¿Qué habría de nuevo si ya no la tenía con él?
-Leo-
Volvió a inhalar aire, despacio, viendo las gotas de lluvia golpear y resbalar en el vidrio, empezaba a hacer frío, pero ninguno de los dos pareció hacer caso de eso, nada interrumpía aquella calma, con el único sonido del agua cayendo, en ese ambiente gris y muerto.
-Oye.. Leo- volvió a llamar Lenehan, pero Devries no pareció escucharle.
No pudo más con ello, Charlie se levantó de su sitio, caminando muy lento, divagando y tomando asiento en el sillón, junto a la figura acostada e inmóvil del único amigo que le entendía ahora.
Leo se removió un poco, dándole espacio para sentarse, apenas recordando que Charlie estaba en la misma sala que él, pocos segundos pasaron antes de que sintiera como le quitaban el cojín de encima.
Charlie quedó a vista suya, tenia la expresión decaída y un ánimo por los suelos, Leo en cambio no aparentaba nada, ni felicidad o tristeza, solo un vacío en sus ojos, con aquellas ojeras acompañándole en la frágil apariencia que daba un muchacho roto de quince años.
Charlie le levantó de su sitio, para que quedara apoyado a su lado, Leo no tenía ni fuerza para querer apoyarse por si solo, por lo que Charlie pasó el brazo por su hombro, atrayéndole en un abrazo. Quedaron los dos viendo al suelo, sin nada en particular a que prestarle atención.
-No puedo creer que ya no esté- murmuró Leondre al cabo de un rato.
Charlie se mantuvo a su lado, sujetándole para que no decayera -Ni yo-
Leo no reaccionaba a nada, seguía impávido, hablaba y era como si su mente y alma estuvieran lejos de su sitio -No dejo de extrañarla-
Lenehan quedó en su sitio, respirando profundamente -Yo tampoco-
Quedaron así otro rato, escuchando la lluvía golpear con fuerza el vidrio, hasta que uno volvió a romper el silencio -Leo, ella era mi amiga.. No tienes que pasar por esto solo-
Leo no respondió, pero perdió el peso de su cuerpo, y hubiera deseado haberse estampado contra el suelo, pero Charlie le sujeto de su hombro y le apegó con fuerza.
Leo empezó a sollozar en silencio, su cuerpo poco a poco pasó a temblar en lo que sus ojos se aguaban en llanto -Yo la quería.. Y nunca se lo dije-
-Lo sé- susurró Charlie tranquilo, sin nada de ánimo -Estoy seguro que lo sabía ¿Sabes? Ella siempre parecía sonreír de otro modo cuando te veía-
-Pero Leo, ella se ha ido.. No puedes estar así para siempre, hay que superarlo- le abrazó con suavidad, a modo de darle calor y confianza -Esté donde esté ahora, a ella no le gustaría que estuvieras así-
Y Leo se dejó caer a pedazos, rompiendo a llorar sin callarse nada, dejando soltar todo su dolor y tristeza en el amigo que lo apoyaba y tenía ahora.
Iba a ser difícil, iba a extrañarla, le haría mucha falta, cada recuerdo le atormentaría.. Pero debía seguir adelante, no estaba solo en eso, iba a tratar de superarlo.
Pero nunca iba a olvidarla.
.-.- End -.-.
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Historias de Bars And Melody
Fiksi PenggemarSolo unas cuantas (Y futuramente muchas) tonterías e historias sobre este dúo que poco a poco dominará al mundo (?) -Historias, mini series, drables y demás tipos de shots, algunos datos, curiosidades y mas cosas en lo que se pueda.