Capítulo Veintidos

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Harry caminaba sólo por los pasillos de la escuela. Todas las miradas se dirigían a él, unas con burla y otras pocas con lástima. El vídeo que uno de los tontos amigos de su ex grabó el día del incidente circulaba dentro de toda la escuela.

La mirada del rizado cayó al piso, sus mejillas estaban levemente sonrojadas por la vergüenza que estaba pasando en sólo el trayecto de ir hacia su clase de cálculo.

Una gruesa e incómoda venda ajustada en su pecho, sobre sus costillas, lo obligaba a caminar erguido, sin darle la posibilidad de encorvarse para esconderse en sí mismo.

-Hey, precioso, ¿te gustaría una noche conmigo? Oí que cobras barato -una voz se oyó tras él y Harry sólo pudo morder fuerte su labio.

-¿Por qué no le haces un favor a tu madre y la contratas a ella? La pobre debe estar desesperada por una buena follada -la voz de Niall hizo aparecer una pequeña sonrisa en los carnosos labios del rizado la cual creció cuando sintió un brazo reconfortante pasar por sus hombros. -Hey, ricitos.

-Hola, rubio. -Harry lo miró, sus ojitos verdes luciendo cristalizados. Niall arrugó su nariz, sintiéndose mal por su amigo.

-¿Quieres hablar sobre todo esto? -preguntó el ojiazul, sonriéndole con cariño.

-Preferiría no hacerlo -negó el rizado, bajando la mirada.

-Está bien, amigo. Vamos a clase -los dos chicos siguieron caminando.

****

Todos los alumnos de tercer año entraban a la sala de conferencias, se notaba el nerviosismo de todos, al fin había llegado el día. Conocerían a sus niños hoy.

Zayn y Liam se sentaron juntos en silencio, compartiendo miradas cómplices de ves en cuando por el besuqueo de hace unos minutos en un salón vacío.

El castaño miró hacia al frente, notando a Elizabeth hablar con un par de señoras con lo que parecía un uniforme con el logotipo del orfanato del que venían.

No se veían niños por ahí, así que supuso que estarían en el salón conectado a la sala.

-¡Bienvenidos, chicos! Apuesto a que están tan emocionados como yo. Primero que nada, quiero que sean conscientes de que el niño que está a punto de ser asignado a ustedes es real. Tiene sentimientos y necesidades. Estos niños no conocen el amor de un padre, así que me encantaría que ustedes les enseñaran lo que es. -habló Elizabeth, mirando a los chicos con seriedad.

-Creo que es bastante cruel adoptarlos por sólo un par de meses y luego volverlos a dejar -suspiró Zayn, cruzándose de brazos. Liam lo miró sonriendo, le encantaba cuando el morocho se mostraba así.

-Bueno, esto será rápido. Pareja por pareja pasará al frente y se les entregará al miño junto con una carpeta con documentos y una lista de alergías o cualquier tipo de enfermedad que el niño padezca. -explicó Elizabeth, con una nueva sonrisa en el rostro.

Una a una las parejas fueron pasando, era lento, ya que mujeres tenían que ir de aquí para allá para buscar a los niños.

-Maldita sea, Payne, ¿no pudiste apellidarte Ainsworth? -se quejó Zayn, cansado de esperar y ansioso por conocer a su niño.

-¿Y ser un asqueroso nerd como Dean Ainsworth? -Liam señaló al chico de gafas gruesas sentado en la primera fila junto su pareja, la cual cargaba a una bebé con cara de fastidio -Miralo, seguro no se ha ido porque espera que Elizabeth le de otras palabras inspiradoras

Parental Proyect (L.S-Z.P)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora