Capítulo Catorce

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Mil gracias 69_Ely_69 por leer esta fic :') Espero que te guste el capítulo. xx

***

Un par de semanas después, Zayn estaba en casa, con el ojo amoratado escuchando a su padre subir al auto e irse. Yaser siempre se iba "de viaje de negocios" en la madrugada, cuando todos dormían. Como si Zayn no supiera que iría a maltratar a su otra familia. Su ojo aún dolía, pues más temprano en la noche, su padre se había asegurado de que no lo olvidaría durante su viaje. 

Estaba a punto de caer dormido, cuando, una fuerte vibración le recorrió el abdomen. Abrió los ojos de golpe, incorporándose de un salto. Miró desorientado a todas partes, adormilado y adolorido cuando otra ola de vibraciones le recorrió, cada vez más fuerte. Chilló, encogiéndose en su cama y poniendo ambas manos sobre el vientre falso, notando al fin que de ahí era de dónde venía. Ya que la habitación estaba a oscuras, pudo notar una luz roja parpadear detrás de él. En definitiva era la alarma del vientre.

¡Estaba en pleno parto!

—¡Mam...! —cerró la boca en cuanto notó lo ridículo de la situación. No despertaría a su madre por un parto falso, mierda. Desesperado por las fuertes vibraciones, intentó quitarse la panza, pero le era imposible. 

Sonrojado y con el rostro arrugado por la incomodidad que las vibraciones causaban, tomó su móvil, marcando el número que sabía era el adecuado para esto.

—¿Si? —la voz adormilada de Liam le hubiera provocado un par de escalofríos si no estuviera demasiado ocupado lidiando con las vibraciones. 

—L-liam...

—¿Zayn? ¿Estás bien? —sonaba preocupado, lo cual hizo sonreír internamente al morocho.

—No, bueno sí, pero no. Ven por mi, necesitamos ir a la escu... ¡ah! escuela —Zayn gimió adolorido y Liam realmente no debería haber sentido ese tirón en la entrepierna. 

—¿Escuela? Zayn, aún son las tres de la mañana ¿estás ebrio o drogado? 

—¡Mierda, Payne! Estoy en puto parto y tu haciendo preguntas estúpidas, solo ven que quiero que me quiten esta jodida mierda de encima —gritó, colgando luego. Como pudo, se puso un pantalón de pijama holgado y se dejó la sudadera de Liam puesta. Luego de su gran esfuerzo por ponerse los zapatos, esperó a Liam recargado en la puerta de entrada. 

Vio la camioneta de la madre de Liam estacionar frente a él y de ella salió el castaño con mirada preocupada y vistiendo lo mismo que él. 

—¿Zayn? —se acercó, tocando su vientre y sintiendo así las fuertes vibraciones. —Ven, vamos —tomó su mano y lo guió a la puerta del copiloto, asegurando su cinturón cuando el chico ya estaba sentado ahí.  

Ambos chicos partieron hacia la escuela, notando al llegar que su auto no era el único en el estacionamiento. Zayn, al bajar, pudo ver la motocicleta de Louis a lo lejos, estacionada casi en la entrada y se sintió mal por Harry.

Caminaron hacia el auditorio, Zayn aferrado al brazo del castaño. Elizabeth dijo que no sería tan malo, pero esto le estaba jodiendo más que un puto tatuaje. 

Al entrar al auditorio, Liam vio a Elizabeth y el director parados frente a todas las parejas que ahí habían. 

—Dios, Zayn, parece que estuvieras en un parto real —se burló Ashley, caminando hacia él. Ella también tenía su vientre con la alarma encendida pero no parecía muy afectada más que algunas muecas. 

—¿Cómo estás tan bien? —preguntó Harry, una mueca en su rostro mientras que Louis se acercaba a ellos con el rizado acurrucado en sus brazos. 

—Oh cariño, deberías sentir los cólicos en algún momento, eso si es el mismo infierno —respondió, haciendo reír a Sasha, la pareja de Niall que se encontraba con el rubio a pocos metros de ella.

—Uf, recuerda me no volver a molestarte cuando estés en tus días —murmuró Zayn, recargando su frente en el hombro de Liam y cerrando los ojos. Elizabeth pasó al frente y, tras carraspear la garganta, apagó la alarma de los vientres, haciendo suspirar de alivio a más de uno.

—¡Buenas noches, jovencitos! Lamento mucho que la alarma sonara a esta hora, pero era necesario. ¿Cómo les parecieron las vibraciones? —preguntó, sonriendo. Varios chicos sólo la fulminaron con la mirada. —Bueno, ahora pasaremos a la siguiente etapa. Esta sólo durará dos semanas y consta de llevar consigo a este bebé a toda hora. Son electrónicos, así que llorarán cuando tengan hambre, frío, sueño, etc. Cuatro chicos, por favor pasen y ayúdenme con esto —pidió la mujer, señalando las cajas dónde había bebés plásticos dentro. 

Mientras pasaban a repartir a los bebés, Elizabeth ordenó que ayudaran a sus parejas a por fin quitarse los vientres. Liam no pudo evitar el rozar sus dedos sobre la piel desnuda de la espalda del morocho al momento de desabrochar el vientre, admirando el cómo su sudadera caía por el delgado cuerpo de Zayn luego. 

Un chico les entregó un bebé vestido de amarillo enredado en una manta verde. Liam lo tomó en brazos, viéndolo con curiosidad mientras que Zayn sentía su corazón estrujarse con tan emotiva vista.

—Pueden irse, dejen los vientres en sus asientos, por favor y regresen a casa con cuidado —habló Elizabeth, sentándose en una silla que ahí había, mirando a todos los chicos retirarse. 

—Nos vemos luego, chicos —se despidió Louis, llevándose a Harry consigo. No quería que Nick se robara a su chico. ¡Ja! Suyo.

—¿Te llevo a casa? —preguntó Liam, sonriendole al morocho. Zayn asintió, mordiendo su labio. Ambos chicos caminaron al estacionamiento y subieron a la camioneta. —Linda sudadera —murmuró el castaño luego de unos minutos de silencio.

—Cuando lleguemos te la devuelvo —murmuró Zayn, sonrojado. 

—No es necesario, en realidad, te queda mejor a ti. Te ves lindo —admitió Liam, también sonrojado. ¿De dónde había salido eso?

Al llegar, ambos estuvieron en silencio, no sabiendo qué decir a continuación.

—¿Quieres quedarte? —preguntó Zayn, bajito. —Digo, es muy noche y puede ser peligroso si te vas ahora... —se apresuró a decir. Liam asintió con rapidez, incapaz de alejarse del morocho ahora. 

Ambos chicos bajaron del auto, internándose a la casa luego. Zayn lo guió a su cuarto y, luego de dejar al bebé bien acomodado en una silla y que ambos chicos se despojaran de sus pantalones, se acostaron. 

Ambos estaban de frente, dedicándose a observarse. Liam no pudo evitar el levantar su mano y pasar sus dedos con suavidad sobre su piel amoratada. —¿Dónde está él? —preguntó.

—Salió de viaje. No volverá hasta dentro de unas semanas —susurró Zayn, incapaz de alejar la mirada de los bellos ojos del castaño. 

—¿Sueno mal si te digo que me alegro de escuchar eso? —Zayn sonrió de lado y negó.

—Está bien, yo también me alegro. Significa menos golpes por un tiempo.

Liam sintió un nudo en la garganta, forzándolo a tragar varias veces saliva acumulada. Sin pensárselo dos veces, el castaño se inclinó, juntando sus labios con el morocho. Zayn, aturdido, correspondió el beso. 

Al separarse, los ojos de ambos estaban puestos en los labios del otro. —Eres un marica, Payne —murmuró Zayn, antes de volver a besarle.

Y puede que hayan pasado gran parte de la noche de esa manera. 



Parental Proyect (L.S-Z.P)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora