Enemigos [Starco]

9. Barbie

Capítulo 9: Barbie

28 marzo 2016

Era lunes, y una parte del cuerpo de Star pedía a gritos no levantarse de la comodidad de su cama, pero la otra parte, esa parte que te dice "Tu mamá viene en camino" La obligo a levantarse perezosamente y alistarse para ir a la escuela.

Ese día había optado por ponerse una blusa blanca y una falda rosada pastel que le llegaba hasta las rodillas y unos botines marrones, el calor estaba haciéndose más notorio, quedando atrás el blanco invierno y dando paso a un clima más agradable.

Bajo por las escaleras y desayuno con su madre, guardo una botella de agua en su bolso y unas galletas oreo, las cuales, tal vez comería antes de la práctica de porristas que tendría por la tarde.

El camino a la escuela fue tranquilo, en la radio pasaban El taxi, una canción la cual la chica no pudo evitar bailar un poco, podría ser fastidiosa, pero no le quitaba ese toque pegadizo que hacía que nadie se pudiera resistir a bailarla.

Dejo su auto rojo en el estacionamiento y se encamino a su casillero en busca de sus libros para la clase que tenía, química, saco un cuaderno y volvió a bloquear el casillero.

[***]

-Como estamos iniciando semestre, vamos a organizar nuevos grupos de trabajo- Comento el aburrido maestro Orlando mientras bebía un poco de su tinto mañanero.

Star busco rápidamente con su mirada a Tomas, y sonrió al ver que el hacía lo mismo, cuando sus miradas se conectaron, el chico le lanzo un guiño a Star y esta sonrió en entendimiento.

-Disculpe maestro, había mucho tráfico- El profesor Orlando le dio una mirada de reproche a Marco y le pidió que se ubicara en su puesto, el cual estaba junto con Katy, su novia, 3 asientos detrás de Star.

-Pero como no todo en la vida viene color de rosa- La rasposa voz del profesor y una sonrisa diabólica cruzo por su rostro –Yo seré quien elija los grupos de trabajo- Comento ganándose un "Agh" sincronizado de parte de toda la clase.

–Si lastima chicos- Comento imitando en burla, el tono de cansancio de sus alumnos- Y para que vean que soy generoso, los dejare solo hasta que termine el año escolar, es decir 3 meses.

Leves murmullos se empezaron a oír por todo el recinto, los cuales se propagaron en altas quejas de los alumnos sobre las injusticias que su maestro de química les hacía pasar.

-Así que voy a empezar a leer los nombres, y por el orden que los llame se van ubicando en las mesas de laboratorio- Comento sacando la lista donde tenía los nombres de los alumnos y empezando a leerla en voz alta – Kimberly con Alexa, James y Patrick...- Y así recitaba los nombres y las caras de disgusto o emoción se reflejaba en los rostros de sus alumnos. –Tomas y Star, una sonrisa triunfante apareció en los rostros de los dos jóvenes los cuales se ubicaron en la mesa 11 de 15, casi en medio del aula.

El maestro miro por encima de la clase y frunció el ceño justo cuando sus ojos pasaron sobre Star y Tomas.

-Ustedes dos- Comento señalando a los mencionados anteriormente -¿Cómo quedaron juntos?- Al parecer algo pasaba por la mente del maestro, porque se había quedado mirándolos fijamente mientras pasaba su vista por el salón y de nuevo a los dos compañeros. –Vamos a hacer unos cambios- Otra vez, esa sonrisa maliciosa se dibujó en el rostro del Señor Orlando –Señorita Butterfly, ¿Podría cambiar de puesto con el joven Louis?-

Los ojos de Star viajaron por todo el salón, en busca del susodicho y lo encontró, en la mesa 29, una de las de atrás, junto con Marco. Su semblante cambio a uno más serio, agarro sus cosas y camino con pasos firmes a través del salón, seguida por las miradas de sus compañeros, los cuales murmuraban cosas tipo "se armó la pelea" ó "estos dos no pasan de hoy" y el comentario que más saco de sus casillas a Star "algo por lo que al fin vale la pena venir a clase", se ubicó al lado del moreno y lanzo sus cosas abruptamente sobre su pupitre.