Enemigos [Starco]

27. Chichones

Capítulo 27: Chichones

Marco se encontraba recostado en la ventana del automóvil, mientras Star miraba distraídamente el paisaje del bosque. Melanie se encontraba en el asiento correspondiente al del acompañante del conductor, verificando que no fuera a ocurrir alguna pelea o algo por el estilo durante el transcurso del viaje, y dejar claro algunas pautas de comportamiento.

El viaje fue silencioso, no pasaron más de 5 minutos cuando ya se encontraban frente al que sería su vivienda durante una semana. Una tortuosa semana.

Marco, Star y Melanie bajaron del auto y la mayor ayudo a los jóvenes a bajar sus maletas del baúl del automóvil para entrar a la cabaña.

Se quedaron en la entrada mientras Melanie abria la puerta y le entregaba las llaves a Marco.

-Bueno chicos un par de cosas para dejar en claro- Melanie dijo atrayendo la atención de los dos adolescentes- Primero, ustedes están vigilados todo el tiempo- Dijo señalando unas cámaras en las esquinas de la cabaña –Y segundo, en la cocina hay suficiente comida para toda la semana, no quiero peleas u otras cosas ¿Entienden?

Los dos jóvenes miraron Melanie y asintieron para examinar la cabaña un poco mejor.

-Y Marco- Dijo Melanie atrayendo la atención del moreno- Espero sepas comportarte como el joven que conozco- Y sin decir más la mayor se fue de la cabaña.

Star y Marco se quedaron mirando por la puerta como el carro que los había traído hasta ese lugar, desaparecía a través del bosque, cuando ya no lo vieron más decidieron que era tiempo de acomodarse en la cabaña.

-Auch- Dijeron los dos al tiempo cuando se estrellaron con el marco de la puerta al tratar de entrar al mismo tiempo.

-Primero las damas- Dijo Marco haciéndose a un lado y dejando que Star pasara primero.

-No necesito de tu fingida caballerosidad- Dijo la rubia al percatarse del tono sarcástico que el moreno había usado en ella.

Sin decir más ambos entraron en la cabaña y se quedaron mirándola y analizándola.

De por si la cabaña no tenía nada de abandonada o dañada, por el contrario, era de dos pisos con un balcón en el piso superior, su interior se encontrada amueblada como si de un apartamento se tratase. El primer piso consistía en una sala con televisión y un par de muebles, la cocina y un pequeño mesón y unos taburetes que hacían de un improvisado comedor; una habitación y un baño en un pasillo. El segundo piso consistía en dos habitaciones, un baño y una puerta de vidrio que daba al balcón/terraza.

-Pido el piso de arriba- Dijo Star tomando sus maletas y corriendo mientras subía las escaleras, cuando ya se encontraba arriba grito –Y por cierto, acá están prohibidos los Marcos Díaz.

-Está bien, dijo el moreno a mitad de las escaleras para no gritar tanto –Entonces todo el piso de abajo es mío y también están prohibidas las Stars Butterflys- Dijo sonriendo con victoria- Eso incluye que la sala también es mía y la cocina.

Y como si fuera arte de magia, Star apareció en las escaleras para encarar a Marco.

-No es justo- La rubia se cruzó de brazos mirando al moreno- Me voy a morir de hambre si no como durante una semana Díaz.

-Yo no fui el que empezó con esto- Dijo encogiéndose de hombros y haciendo un ademan con la mano para restarle importancia al asunto.

-Sí, pero debemos establecer unas reglas- Dijo la rubia apoyándose en el barandal de la escalera –La cocina y la sala son lugares fuera de guerra.