Hopefully (En proceso)

Capítulo 12

HOPE:

Salimos del restaurante ante la atenta mirada de los comensales, no me atrevo a voltear para mirar a mi papá y recuerdo que no le dije que dejé la carrera de derecho para siempre, pero no es momento para devolverme a decirle, no quiero morir esta noche.

Ryan no me suelta la mano y me lleva hasta su auto, abre la puerta y me siento, me ayuda a abrochar el cinturón como si fuese una niña pequeña pero no le digo nada, ya se ve alterado y no lo quiero indisponer más, rodea el auto y sube, lo enciende y se pone en marcha.

Durante un buen rato se queda callado y entonces me animo a romper el silencio.

- ¿Si sabes lo que acabas de hacer? – Lo miro, aunque él a mí no, está concentrado en la carretera

- ¿Qué, poner en su lugar a la basura que llamas papá? – el sarcasmo en su voz es evidente, por un momento me mira arqueando una ceja, está encabronado desde que llegó a la casa y todavía no entiendo por qué

-Él no es cualquier persona Ryan, te puede arruinar la vida

-Yo no estoy inválido Hope, me puedo defender

-Lo sé, pero no le conoces.

-Ni él a mí, prefiero que se meta conmigo que por lo menos puedo darle la pelea, no contigo, ¡Si es que te dobla en tamaño!

-No quiero que te metas en problemas por mi culpa – aprovecho que tomamos un semáforo en rojo y agarro su mano para que me mire, lo hace y nos vemos fijamente unos segundos.

-No quiero que te pasa nada por mi culpa, no vale la pena- Confieso

-Hope, por el amor de Dios deja de hablar así, ¡Claro que lo vales! ¡Vales todo, si me va a matar por defenderte que lo haga! – Aprieta mi mano, pero sin lastimarme – No puedo estar tranquilo sabiendo que él va por la vida haciéndote daño, pequeña – Suelta nuestras manos y me toca la mejilla de una manera delicada, me consiente con dedo pulgar, yo cierro mis ojos y un suspiro se escapa de mis labios – Si tu novio no hace nada, yo si te voy a cuidar- Me suelta y arranca de nuevo

Lo miro como si se acabara de escapar de un manicomio

- ¿Novio? – Cuestiono levantando una ceja

- El rarito con el que te estabas abrazando en la tarde- Su cara de indignación me hace soltar una carcajada

- ¿Celoso Morelli? – Pregunto divertida, aunque no pueden ser celos, no siente nada por mí ¿O sí? Él no responde.

No se dirige a nuestro edificio, más bien estaciona en pleno Manhattan, cerca de un mirador muy famoso de la ciudad, el top of the rock, esta vez no me toma de la mano, solo me pide que lo siga y eso hago.

Compramos nuestros tickets, no hay demasiada gente y eso me alegra, llegamos hasta piso número setenta, honestamente a pesar de haber vivido aquí toda mi vida, no me había interesado por venir y no lo entiendo, la vista en maravillosa, mágica, parece un cuadro de ficción, me acerco despacio y sé que los dos estamos enamorados de lo que estamos viendo, alcanzo a ver la oscuridad del central park por la hora en la que estamos, de día debe ser aún más encantador, también se divisan un montón de edificios con luces que hacen que la ciudad que nunca duerme brille y sea mágica y caótica, el empire state con su enorme punta representativa se ve imponente.

Por un momento me armo de valentía y me acerco a Ryan, que se ha adelantado unos pasos y está admirando su alrededor, siento la necesidad de dejar clara su inquietud.

-No es mi novio, creo que él y Anna tienen algo- El alivio se refleja en su cara por un momento

- Da igual – Sube los hombros como restándole importancia y ahora me siento ridícula.