Hopefully (En proceso)

Capítulo 20

Hope.

Amor, la palabra me aterraba hasta de conocí a Ethan, tenía una percepción negativa del amor, aunque se asocie con algo bueno, no siempre es así, por ejemplo, el amor por la bebida tiene a mi mamá donde está, el amor por el dinero hace de Luciano la peor persona que he conocido, así podría seguir; el primero en llegar a cambiarlo todo fue Ethan, sus cachetes redondos y sus grandes y brillantes ojos me hicieron sentir del más profundo y desinteresado amor que jamás imagine, para mi ya era suficiente y es el tipo de amor que solo podrías sentir con un hermano.

Pero ahora, cuando pienso en amor, pienso también en Ryan, me cuestiono cómo llegué a esto y a qué nos llevará, nunca he sido una chica que planea, ni metódica, por el contrario, suelo dejar que la vida fluya sin más y es precisamente ese desinterés que me ha hecho depender de fármacos antidepresivos durante tanto tiempo, no tenpia objetivos, pero bueno, a lo que voy es que me gustaría ver el futuro, me encantaría saber qué decisiones tomar para quedarme en la vida de Ryan, para que podamos estar juntos y saltar la barrera que nos impide estar tranquilos: Mi padre.

Mi corazón late con fuerza y mi estómago parece una licuadora, no puedo dejar de pensar en él, pero al mismo tiempo todo el tiempo estoy esperando que haga algo que me lastime, es a lo que estoy acostumbrada, esto mismo le hago saber a Anna, mientras conduce a New Jersey, vamos a comprar algunos libros para ella.

-No puedes vivir toda la vida con miedo de querer – Mira por el retrovisor y Pita aun carro que nos sobrepasa de manera imprudente.

Resoplo y lo pienso sé que tiene razón

-Quizá deba ir a terapia – confieso en voz alta.

- Si, eso precisamente chica – Christopher se asoma por en medio de los dos, viene en la parte de atrás escuchando atentamente - La mejor prueba de amor hacia ti misma ¿Lo has hecho antes?

-Si, es solo que... nunca funcionó -Les confieso, pero ahora comprendo el por qué, Nunca había tenido motivación para querer superarme y superar todo, pero quizá con la ayuda adecuada pueca funcionar.

Durante el viaje vamos cantando canciones de Whitney Houston a todo pulmón, desafinados pero felices, les cuento de la amiga de Ryan que llegó hoy, al principio sentí celos por la cercanía, pero sé que son amigos, él no la mira cómo me ve a mí, no quisiera pasarme de confiada, pero mi sexto sentido me dice que el sentimiento es mutuo.

- ¿Y los dejaste sola con ella? - Anna cuestiona mientras busca donde parquear – No sé si le tienes mucha confianza o realmente está loca.

- Yo creo que es ingenua – Opina Chris que me mira aterrado – ¿Pero tú lo has visto? Cualquiera con cuatro dedos de frente no desaprovecharía esa oportunidad

Excepto yo, pienso, pero no lo exteriorizo, he tenido miles de oportunidades de estar con él, pero nunca parece que estoy lista, sigo sin olvidar que estoy dañada y él no merece una mujer irreparable.

-Según como yo lo veo, la persona que te va a ser infiel, lo hará lo vigiles o no, confíes o no, no es una cuestión de confiar, es una cuestión de lealtad, y yo no puedo controlar la lealtad de nadie – Suspiro – aunque la verdad tarde siempre llega así que pase lo que pase, el destino me lo hará saber.

-Sigo sin saber si eres muy sabia o muy tonta – Se burla mi amigo y Anna se ríe

-Alma de abuelita, cuerpo de perra sexy – Suelta Anna y salimos del auto directamente al centro comercial.

El espíritu navideño ya está presente en todo lugar que pisamos, el frío y las decoraciones, la alegría de la gente es palpable, siento envidia por un momento, para mí son días normales, no hay nada de especial, me pregunto si podré convencer a Luciano de traer a Ethan unos días, doy por hecho que Ryan estará con su familia, no sé y no le doy muchas vueltas, no quiero ilusionarme.