Izzy issues -Fanfic de HP-

Capítulo 10: call me miss-behaving.

Capítulo 10: call me miss-behaving.

El jueves después de la cena y de insistir varias veces a Coleen y a Sebastian que no me acompañaran al salón de prefectos, me dirigí allí para cumplir con mi castigo. Cuando me faltaban pocos pasos para llegar a la entrada del salón, Nadine Signoret salió del salón, evidentemente muy enojada. Ella no me hablo, ni siquiera me miró. Me quedé mirándola alejarse cuando algo de lo más extraño paso.

-¡Nadine! Detente, por favor, escucha. -quede petrificada. ¿Qué demonios hace Louise Lowell, qué apenas le dirige la palabra a su hermano por ser menor y estar en quinto año, gritándole a Nadine Signoret, la hermanita de su enemiga mortal, que se detuviera? Y eso sin contar que le pidió por favor.

Louise se detuvo en el instante en que me vio. Se calló, también. Luego de mirarme por lo que pareció una eternidad, miró por encima de mi hombro, y como la curiosa que soy, tuve que voltear para ver a una desesperada Nadine de brazos cruzados. Estaba esperado por Louise.

-Isabelle...yo... -balbuceó. La Louise que conozco nunca balbucea. Retomó la compostura y en segundos volvió a ser la Louise de siempre, mirándote como si fuera mejor que tú. -Wood, puedes entrar. Ya está aquí quien te vigilará durante tu castigo. Me tengo que ir ya, buenas noches.

Yo no supe que decir, no sé si porque de verdad no sabía que decir o porque no salía ni un sonido de mi boca. Louise se alejó, Nadine, que aún la esperaba, caminó junto a ella hasta que las perdí de vista. Quizás estoy dramatizando mucho la situación y quizás Louise sólo necesitaba hablar con ella por asuntos de prefectos. Nadine era prefecta, igual que Louise.

Al entrar al salón observé una desordenada mesa, donde supongo los prefectos hacen sus reuniones por que había alrededor de veinte sillas. Estaba mirando la oficina hasta que un documento en la mesa llamó mi atención, decía así:

"La partida del grupo seleccionado se efectuará el 31 de Octubre del vigente año, donde por medio de carruajes mágicos, los alumnos de nuestra institución serán trasladados al Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería..."

-¿Qué crees que estás haciendo? -dijo una voz detrás de mi, haciéndome saltar del asombro.

-Yo-yo, um... nada. -giré para ver a uno de los chicos más lindos que he visto en mi vida (suspiros) -Um, hola Quentin Abbadie. Yo soy castigo, digo, uh...

-Se quién eres, Isabelle. -dijo luego de soltar una risa. -Eres muy popular últimamente. -me sonrojé. Oh por dios, Quentin Abbadie sabe mi nombre. Estoy en una habitación sola con Quentin Abbadie. Estoy hablando con Quentin Abbadie. Bueno, al menos él está hablando. Creo que debo decir algo, pero qué.

-Supongo que sabes la razón de mi castigo, ¿entonces? -Eres una idiota, estas castigada porque le disparaste a su novia. Dios, que alguien me calle.

-Sí, si lo sé. -dijo con una sonrisa. Una palabra: hoyuelos. -Noqueaste a Noelle, creo que todo el colegio lo sabe. Buen tiro, por cierto.

-Yo... gracias. -dije mirándolo entre sorprendida y confundida. Él se acercó a la mesa, estaba recogiendo los documentos que había en ella.

-¿Por qué esa mirada? -dijo cuándo alzó la vista.

-Yo- ¿no estás molesto porque noqueé a tu novia? Es que parece encantarte la idea. -me miró divertido, pero no dijo nada hasta un momento después, y lo que dijo fue:

-Creo que tu Isabelle debe comenzar, Castigo. -okey, sonreí porque es muy lindo, porque algo que no me agrada es que se burlen de mis errores (son muchos) (Coleen escribió un libro con ellos), y aparte de eso su chiste fue (muy) malo.

El castigo consistió en ordenar en los estantes algunos documentos de castigos cumplidos a lo largo de este año escolar.Coleen Smith, se escapó al campo de Quidditch mientras su clase de Adivinación. (Qué raro). Isabelle Wood, fuera de la cama después de la hora de dormir establecida. Sebastian Lowell, fuera de la cama después de la hora de dormir establecida, alega haber acompañado a la señorita Wood la cual "tenía mucha hambre". (Oops).

Este castigo me gusta. Es divertido leer la razón de los castigos de otras personas, sobre todo los de Coleen. Coleen Smith, agredió verbalmente a la señorita Noelle Signoret diciendo "¿Moda? Si Coco estuviera viva, se moriría de nuevo al verte, asquerosa Signoret." Coleen tiene una pequeña obsesión con diseñadores de moda muggles, tiende a hacer insultos que sólo los muggles e hijos de muggles entienden, pero no por ello dejan de ser menos graciosos para Seb y para mí. Tuvimos que ver todo tipo de desfiles con Coleen el verano antepasado.

Louisa Lowell, fuera de clases por lo que alega haber estado en una sesión de tutoría, dicha sesión no fue comprobada. (Qué demonios). Okey, la cosa es así. Louise es la prefecta perfecta, no se mete en problemas, no falta a clases y no está fuera de la cama después del toque de queda. ¿Qué razón tendría para cometer una falta tan 'grave' para ella, como escaparse de clases? ¿Qué le pasa a Louise? Estoy preocupada, digo, me odia y todo pero esto está muy raro. Gritándole a Nadine Signoret, escapándose de clases, peleando con su madre. Esa no es actitud digna de una prefecta perfecta.

-¿Divirtiéndote? -dijo después de un largo rato Quentin, él estaba organizando los horarios de prefectos y la próxima reunión de Premios Anuales.

-Um... Abbadie, ¿sabes quién es Louise Lowell? -debe saber algo de ella ¿no? Está en su año después de todo.

-Lou....isa? -Ajá. El premio anual le tiene un apodo a "Lou". Atrapado.

-Sí, la chica que dejó la habitación hace como una hora.

-Ya, claro que sé. ¿Por qué la pregunta? -dijo alzando la vista de la mesa.

-Yo... la has visto-quiero decir, ¿has hablado alguna vez con ella?

-...Supongo, -dijo Quentin después de un momento- es la prefecta de séptimo de tu casa y yo el premio anual, así que supongo que tenemos que hablar alguna vez?

-Me refiero a, ¿son amigos o algo así?

-...Algo así, supongo. -respondió alzando las cejas.

-Bueno, ¿la has notado algo extraña últimamente? -le pregunté.

-Yo, um, no. No sé porque lo dices. -es bueno tratando de sonar convencible.

-Por... esto. -me dirigí a la mesa donde se encontraba, llevando conmigo la hoja de castigo de Louise. Abrió los ojos, sorprendido.

-Esto ha de ser un error. ¿De dónde lo sacaste? -dijo tomándolo.

-De la pila de allá -señalé donde estaban las demás hojas- ¿qué haces? -le pregunté cuando dobló el pergamino y lo coloco en uno de los bolsillos de su túnica.

-Hablaré con la directora sobre esto. Um, tú... ya puedes irte. Se acabó el castigo, buenas noches.

-Uh... -no supe que más decir mientras me echaba por la puerta del salón- Adiós, supongo.

-Buenas noches, Isabelle. -me sonrió antes de cerrar la puerta.

Que día tan raro. Desde las referencias de moda de Coleen, hasta los gritos de 'por favor' de Louise a Nadine y el nerviosismo de Quentin Abbadie. Eso de que uno nunca llega a conocer a nadie lo suficiente, puede que sea verdad. Cada quien tiene sus secretos, supongo y ¿Quién soy yo para saber los de cada uno? Quizás no se ni siquiera los míos.

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