Capítulo 34.

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El beso me tomó por sorpresa, pero fue de lo mejor que me había pasado en mucho tiempo. Harry se separó lentamente de mi, y sonrió.

-¿Así?- le preguntó a Jake pasando una de sus manos por mi cintura apegando más a él. 

-Sí.- dijo Jake sonriendo, dando pequeños saltitos en el sofá.

-Bien, entonces, a cenar.- dijo Harry haciendo un movimiento con la cabeza hacia la cocina, y caminando aún sin soltarme, haciéndome caminar con él.

Serví los waffles, y me senté a cenar con Harry y Jake. Nadie dijo nada, pero no hubo silencios incómodos. Harry me miraba, y sonreía, yo le devolvía la sonrisa. 

Terminamos de cenar, y subimos, para dormir. Llevé a Jake a su habitación, y Harry se volvió a quedar con el hasta que se durmiera.

-Estaba cansado, se durmió rápido.- dijo Harry entrando a la habitación, yo ya estaba en pijama, recostada viendo televisión. Se sentó en la cama, y se quitó la ropa, quedando en ropa interior, para después recostarse a mi lado. –Jake me pidió un favor.- dijo mirándome.

-¿Qué te pidió?- dije mirándolo con curiosidad. 

-Que cada vez que nos saludemos o despidamos, nos besemos.- dijo acomodándose en la cama. –Me parece lindo que quiera que hagamos eso.- dijo sonriendo.

-A mi también.- dije devolviendo la sonrisa, el amplió la suya, y se acercó un poco a mi.

-Buenas noches,___.- dijo 

-Buenas noches.- dije sonriendo, mientras apagaba la televisión. besando mi mejilla.

Me recosté, dándole la espalda. Me quedé dormida de inmediato. A las 3:30 aproximadamente, escuché pasitos hacia la habitación. Encendí la lámpara de noche, y vi a Jake caminando hacia la habitación.

-¿Qué paso, bebé?- le pegunté en un susurro.

-No puedo dormir.- dijo abrazando un pequeño peluche que Harry le había regalado.

-Ven aquí.- dije haciéndole una seña, para que se recostara en la cama con Harry y conmigo. Jake caminó hacia la cama, y se subió, gateó para llegar al centro y cubrirse con las sábanas. Me dio la espalda, y lo abracé.

-Buenas noches, Jake.- 

-Descansa mami.- dijo apretando más su peluche.

Desperté tarde, era sábado, Jake no tenía clases hoy. Me estiré en la cama, y me vi cuenta de que Jake no seguía dormido junto a mi. Me senté en la cama, y vi en la alfombra a Jake y a Harry, jugando, usando unos gorros grises, que eran de Harry, a Jake obviamente le quedaba grande. 

-Hola.- dije sonriendo, mirándolos a ambos, era divertido ver eso, era como ver a Harry, y un pequeño Harry junto a él. 

-Hola mama.- dijo Jake sonriendo.

Tenía que tomarles una foto. Me puse de pie, abrí un cajón en la mesa de noche, y saqué la cámara de Harry. Harry me miró confundido, y después vio a Jake que usaba el mismo gorro que el, y comprendió porqué quería la foto. Cargó a Jake, y lo sentó en su regazo, para la foto. Era la primera foto que les tomé juntos.

Vendida.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora