Don't you remember?|| Claudio Bravo

8

                  

Me dolía mucho la cabeza, era un dolor de los mil demonios, hace mucho que no sentía un dolor tan fuerte, no desde que recién desperté del coma. Mi cabeza punzaba y sentía un martilleo horrible. ¡qué alguien parara este dolor por favor! ¡Ayuda!

                Abrí mis ojos lentamente me encontré con dos pares de ojos devolviéndome la mirada, una mirada azul y otra castaña. Mi hermano y Claudio. Ambos me miraban de manera atenta. Era raro verlos a los dos ahí juntos después de lo que pasó entre ellos...

—¿Estás bien? —preguntaron al unísono. Se miraron al darse cuenta que habían hablado al mismo tiempo y se miraron feo. Luego volvieron a dirigir sus miradas a mí.

—Me duele la cabeza— dije con una mueca.

—Iré a buscar a la enfermera— dijo mi hermano. Y salió de la habitación en busca de la enfermera.

                Claudio estaba ahí mirándome de manera atenta, esto era muy extraño, incómodo ¿Qué le digo? No sabía qué decir, esta la primera vez, siempre sabía qué decir... pero ahora no. Era una cosa muy extraña, yo había estado con él, él había sido mi novio y yo no lo recordaba... No recordaba cómo lo conocí, cómo me enamoré de él. Quizás lo amaba y no lo recuerdo, no recuerdo qué tan profundos eran mis sentimientos por él. Ahora lo veo ahí al frente y no siento nada... O bueno sí lo hago, cuando me encontré con él al parecer mi cuerpo lo recordaba, mi corazón se volvió loco, pero ese es el único indicio de que alguna vez tuve algo con él, no hay ningún recuerdo... Y ahora solo siento enojo con él... Si éramos novios ¿por qué me engañó?

—Eli...perdona no debí habértelo dicho así, yo no quería que te pasara esto— dijo mirándome con una carita de pena— yo... me asusté mucho al verte desplomada, fue como revivir el pasado...

—No tienes que pedirme perdón Claudio... yo, gracias por decirme la verdad... Me han ocultado tantas cosas por años, que es genial encontrar a alguien que sea honesto, porque la verdad siempre es lo primordial aunque duela...— le di una media sonrisa. La verdad era demasiado importante para mí, aunque fuera muy dolorosa, uno siempre merecía saber la verdad. Además de que es algo realmente importante en mi profesión... — ahora solo quiero entender qué pasó, qué pasó con nosotros Claudio... Te paras ahí diciéndome que yo era tu novia, pero yo no recuerdo absolutamente nada...

—Elisa yo te lo explicaré todo, te contaré todo lo que pasó entre nosotros, pero de manera lenta, no quiero que te vuelva a pasar esto...

—Solo quiero saber una cosa por ahora Claudio... ¿Tú... tú me amabas? — él asintió—¿Entonces por qué me engañaste? —él hizo una mueca. Lo miré expectante, necesitaba saberlo, era algo importante para mí, a pesar de no recordar nada. Odiaba las mentiras y los engaños.

—Yo... Elisa, yo te juro que te amaba, eras mi polola, mi chica, solo tuve un momento de debilidad...—enarqué una ceja. ¿Esa era la respuesta a su engaño? ¿Un momento de debilidad?

—¿Un momento de debilidad? Claudio por favor...

—Ya mira Elisa, la cagué fui un estúpido, cometí un error, un error del que me arrepiento hasta el día de hoy... sino fuera porque yo te engañé tú no...— se quedó callado. Fruncí el ceño. Odio la intriga.

—¿Yo no qué? — él evitó mi mirada—Claudio dime...

—Elisa no creo que sea buena idea...

—Responde por favor. —él suspiró.

—Tú sabías que me metí con la Carla... Yo sé que nunca me vas a perdonar esto... Pero por favor te lo pido yo no quería que todo esto pasara... Yo no quería que tú tuvieras ese accidente... Todo es mi culpa —en su rostro se podía ver el arrepentimiento y la culpa que sentía. Pero no entendía por qué se echaba la culpa de mi accidente