Me quiero aquí
dónde la felicidad era cotidiana
dónde el amor era fidedigno
cuándo las palabras no eran patrañas.
Me quiero aquí,
aquí dónde no estoy,
estoy aquí sentado pero no soy yo,
estoy aquí escribiendo pero no es mi mente ni mi razón.
Me necesito de vuelta
me necesito para amar,
para querer, para perdonar y proseguir
me necesito con desespero.
Me fui al lugar dónde provienen los demonios, dónde los ángeles fallecen, dónde Dios se fue, y no creo que regrese, me fui al fondo de mi subconsciente.
«Despierta» —me digo en voz baja a diario— dormido me hallo, aún cuando el Sol esté a todo su esplendor posado en mi rostro.
Pero «duerme, tranquilo» —escucho del vuelta— es mi voz, puedo reconocerla, es el otro sujeto con mi rostro, con mis manos, con mis pies, pero ese sujeto con exacta semejanza no soy yo.
El laberinto es intrincado
he encontrado cosas allí
he encontrado muerte y vida
tristeza y felicidad
encontré al otro sujeto
que se parece a mí
ahora falta encontrarme
el verdadero yo
no al no impostor que a todos engañó.
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Bajo La Piel ©
PoesíaRecopilación de poemas varios, hechos en los momentos más duros de mi vida. Y aquí tenemos «Bajo la piel», el primer libro que escribí, con una recopilación de versos y líneas pérdidas en servilletas mientras cursaba primaria, y parte del bachiller...
