5. Limpiando salones

275 26 7
                                    

Cuando el colegio acabó llegó la profesora a decir que tendriamos que limpiar todos los salones del piso. ¿Pero que...? Son más de diez salones en un piso, pensé mientras esperaba a Amelia, quien había ido por la escoba y recogedor, en nuestro salón. Todos salieron. Ban se disculpó y despues de compartir un par de palabras se fue. Helen era el último, igual que siempre. Salió del salón pero aún así se quedó parado junto al marco de la puerta. Compartimos miradas y nuevamente volvió a desviar la suya. Suspiró.

- Hoy te quedas, ¿cierto?- preguntó.

- Sí.

- ¿Entonces no te espero?- es cierto, desde que nos volvimos amigos me ha estado acompañando a casa. Antes de que pudiera decir algo Amelia llegó.

- Lo siento, pero esta vez yo me quedó con ella- dijo pasando su brazo por mi hombro.

- De acuerdo. Adios- y con eso se fue.

Después de que se fuera nos pusimos manos a la obra. En total eran trece salones, asi que decidimos que cada una limpiaria seis y entre las dos el nuestro. Realmente agradecía que los salones no estuvieran sucios del todo pues así acabamos aún mas rápido. Mientras limpiaba se me ocurrió escuchar música con mis audifonos. De repente me puse a taratear las letras de mis canciones favoritas. Era normal de mí el tararear canciones, sin importar donde me encontrara. Incluso en clase lo hacía y eso llamó la atención de Helen un millón de veces. A veces no decía nada y seguía escuchandome, lo cuál me daba vergüenza. En menos de una hora ya habíamos acabado cada quien su parte. Ahora sólo faltaba nuestro salón.

- Bien- dijo Amelia mientras se recogía el cabello-, ¿como nos repartimos el trabajo?

- Bueno, pensaba en que una limpiara la parte de en frente y la otra la de atrás.

- Bien, yo pido en frente- ella empezó a limpiar. Entonces una idea llegó a mi mente. Tomé el bote de basura y lo volteé -. ¡¿Pero qué haces?!- chilló - Me odias, ¿cierto?- me puse de rodillas y comencé a buscar entre la basura- Enserio, ¿qué haces?

- Busco los dibujos rotos de Helen. Pienso pegarlos y regresarselos, no imaginas cuanto se esforzaba haciendolos.

- Enserio estás enamorada. Bueno, yo me pongo a limpiar mientras que tú haces desorden.

Fui encontrando los trozos de dibujo y separandolos dependiendo de la imagen que mostraban al juntarlos. Me alegraba ser buena con rompecabezas pues esto era algo similar. De mi bolso saque hojas de mi cuaderno y mi pegamento. Con mucho cuidado fui pegando las piezas. En total habían sido cinco dibujos rotos: uno de un paisaje de flores, otro de un chico que era desconocido para mí, un gato jugando con estambre, el lobo, y...

- Enserio que se esforzó - dijo Amelia parada junto a mí. Se inclinó y tomó uno de los dibujos-. Pero este me gusta más.

- Hey- me levanté y traté de quitarle el dibujo pero tengo que aclarar que no era muy ágil.

- Y yo que pensaba que eras la única enamorada- se burló. Yo infle las mejillas y seguí intentando quitarle el dibujo.

- D-Debe haber una explicación para esto.

- Yo me sé esa explicación. Le gustas- volteó el dibujo para mostrar mi rostro.

¿Era ese el dibujo que no quería mostrarme? ¿Por qué me dibujo desde un principio? Todo era confusión en mi cabeza. ¿Siente algo por mí? No. ¿Por qué sentiría algo por mí? No era el tipo de chica con la que quieran salir los chicos. Pero Helen no era cómo los otros chicos, él era diferente.

- Y mira que te dibujo tal cual- seguía diciendo Amelia-. No estoy de broma, el chico siente algo por ti.

- N-No es cierto.

- ¿Quieres apostar? Si yo tengo razón me compras un helado y si tú tienes razón yo te compro uno. Tendrás que empezar ha ahorrar para comprar mi banana split.

~~•~~•~~•~~•~~•~~

Amelia y yo estabamos en mi casa. Mamá preguntó por la tardanza pero antes de que pudiera contestar Amelia dijo: "la vieja nos tiene odio". Sin decir más habíamos subido a mi habitación y prendimos el portatil. Entramos a mi cuenta de Facebook ya que Amelia quería husmear. Después de unos minutos apareció un mensaje de Helen.

- Anda, no puede vivir sin ti- dijo Amelia.

- S-Solo abre el mensaje.

Helen: Hola :)

Amelia se apoderó del portátil y escribió.

_____: Hola guapo (͡° ͜ʖ ͡°)
_____: ¡Amelia escribió eso! ¡No le hagas caso!

- No es gracioso- dije al ver como Amelia se moría de risa. Le quité el portátil para ser yo la que escribiera. Ella sólo se sentó junto a mí esperando la respuesta.

Helen: ¿Estás bien?

_____: . No te preocupes.

Helen: Me he preocupado.
Helen: Tonta.
Helen: No debiste intervenir.

- Ah... se preocupó por ti. Le gustas.

- C-Callate.

_____: Lo siento. Pero no saliste herido. Bueno, no mucho.

Helen: Siempre le ves el lado bueno a las cosas.

_____: Es mejor así.

Helen: :)

Mi Pintor Sangriento (Bloody Painter)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora