Capítulo 10. [Editado]

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Estábamos escuchando música a todo volumen como los Harries que éramos, hasta que la rubia comenzó a golpear la puerta.

-¡Nick, Lucy! ¡Nick! ¡Nick!- bufé y apagué la música para abrir -Gabs se ha caído de la escalera. Tenemos que llevarla al hospital, pero ya.

-¿Qué vamos a decir? ¿"Hola, soy Nick y estoy muerto. Pero espero puedan atenderla"?

-Sólo hay que llevarla. Pide un taxi.

-¿Y yo como que porqué?- me quejé, pero ya había comenzado a teclear el 911.

†††

-Tres días -dijo la rubia con fastidio en el rostro -Tres malditos días y aún no hay noticias de Gabrielle.

-Calmate, estará bien. Deja de ser tan paranoica -le dije con un bufido.

-Vamos a verla.

-¿Y cómo piensas hacerlo, genio?

-Poseyendo a alguien, genio.

†††

-¿Nick Harries?- preguntó la enfermera. Pues si, al final habíamos poseído a unos chicos -Gabrielle se recuperara pronto. Piso 8 #143

-Iré a verla, gracias.

Subí al ascensor y presione él numero 8, busqué su habitación y entre. Me salí del cuerpo y salude a Gabs.

-¡Heeeey! Abuela, ¿cómo estás?

-No entiendo porqué debo estar aquí si me siento de maravilla.

-Oh, vamos, Gabs. Coopera un poco, la próxima pide ayuda.

Sonrió sarcásticamente -Claro, como soy vieja debo dejar que me hagan todo sentada en el sofá. ¿Cómo va todo con tu hermana? ¿Y... tu novia?

-Ja-ja. Mi hermana por allá... y no sé de cuál de mis novias hablas.

Rodó los ojos- No hagan desastre en mi casa. Y cuida a tu hermana, cabrón... porque si algo le pasa, desearás no haber venido a Canadá.

Bese su mejilla y salí de la habitación, baje por las escaleras de incendio, valgame que bajar del ascensor y no verse...

Encontré a Pearl, pero no estaba mi hermana, a lo cual la buscamos. Estaba detrás de las máquinas expendedoras robando los chocolates.

†††

Cuando llegamos a casa, hice café y me senté a contarles lo que había platicado con la abuela.

-[...] "tu hermana y tu novia"- les repetí -Gabs si que está medio loca.

-Deja a la abuela en paz- se quejó Pearl riendo.

-No sí, la que pide que la deje en paz, pero le llama "abuela"- río mi hermana y lanzó un bostezo -Nick, ¿Me arropas?

-Claro, cariño- sonreí y la cargué como a un bebé. Lily a pesar de tener 8 años, casi nueve era tan liviana como una pluma, así que el camino a su habitación fue fácil.

Le puse la pijama y la metí entre los edredones. Apoyó su cabeza contra la almohada de unicornio y me pidió que me acercase, a lo cual obedecí y me senté junto a ella. Desde el punto de vista de cualquiera, se diría que soy su padre, y para ella lo era.

-No quiero que nada le pase a Gabs, es mi abuela -murmuró con ojos tristes. Acaricié su cabello y le besé la frente.

-Cariño, no te preocupes por eso. Ella estará bien. Lo prometo -la tranquilicé y prendí su lámpara -por mi corre que estemos bien.

Le sonreí y me acerqué al balcón para cerrar las cortinas y asegurarme que Lucy dormiría bien.

Se movió en la cama y miró a la pared, pero no se durmió -Te amo, Patrick.

Sonreí y apagué la luz para cerrar la puerta con pasador. Suspiré y bajé a la cocina por un vaso de leche que tomé enseguida y serví otro, pero antes de poder llevarlo a mis labios oí un carraspeo.

-No eres el único que vive aquí -Me di vuelta y observé a Pearl apoyada en la puerta.

-Tú detestas la leche. Mi hermana no puede tomarla. Y Gabs prefiere el café, así que lamento decírtelo -le sonreí con malicia- pero la leche es mía.

Tomé el galón y me dirigí a la sala, escuchando como bufaba.

-Eres un imbécil -murmuró, pero logré escucharla.

Reí -¡Y no me da vergüenza!- Le grité saliendo al patio delantero, que tenía una mesa en la cual me senté a descansar y cerré los ojos. Mi tranquilidad duró poco, pues sentí que algo me golpeaba la frente y cuando miré abajo, vi un guijarro en mis piernas, después sentí otro en mi nuca. Me levanté y miré en dirección al bosque, donde percibí un brillo rojo carmesí, como sangre. Perro al mirar mejor me di cuenta que sólo era Logan.

Saludó y se acercó a mí -Josh quiere verte.

-¿Te dijo para qué?- cuestioné.

-No-. Repuso frunciendo el ceño- y creo es importante.

Caminamos por la espesura del bosque, hasta la cabaña, que estaba en completo silencio y orden, lo cual me pareció raro, pues siempre había fiesta ahí. Entramos y vimos a Josh con el rubio misterioso (no sabía su nombre).

-Bueno... -comenzó éste -Mira, Nick. Hace dos años que Gabrielle recibe tratamiento...

Josh lo miró -Y desde tiempo, en el hospital se dieron cuenta que ella tiene cáncer.

-¿Qué estás diciendo?

El rubio suspiró -Mira. Mi padre, es el "encargado" de cuidarla. Y al aplicarle el examen, se dio cuenta de esto, hace año y medio, y por lo que sé, a Gabrielle le quedan dos semanas de vida.

-¿Me estás jodiendo, cierto? Gabs no puede morir. Ella está perfecta.

-Nick... sólo son simples fachadas. Gabrielle está enferma y otro golpe así la matará.

«Bien, Nick...» «Jsjsjasj» «Quiero que caigas al suelo y te lamentes» «Quiero verte llorar» «Quiero que grites» «No te has librado de nosotros...» «Y no lo harás nunca»

Como si me hubiesen pateado, caí al suelo y comencé a llorar mientras escuchaba las risas en mi cabeza, risas que no me importaban en lo mínimo, pero que igual dolían. Sobretodo cuando había caído ante ellas. Era débil, y las voces lo sabían, así que aprovechaban, pero eran ellas las que me volvían débil. Grité y me lamenté, como ellas pedían. Pues tenían el control sobre mí.

«Amo esto» «Llora, llora... lamenta todo, incluso si no tiene que ver con Gabrielle» «Jsjdsjdjajss» «Llora, grita, lamentate, odiate, danos placer...» «Jsjssjsjss sí...» «Eso, Nick...»

Suspence Espectre {Editando}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora