24. ¿Qué es lo que hueles?

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-Creo que Hugo está sospechando -me soltó luego del largo silencio.

-¿Sospechando? ¿De Scorpius?

Rose escondió uno de sus rizos detrás de su oreja y volvió rápidamente a poner esa mano bajo la gran pila de libros que llevaba apretados contra su pecho. Había costumbres que no se perdían nunca.

-Claro que no. O sea... casi. Se dio cuenta de que estoy en una relación, bueno, no exactamente.

-Que estás enamorada -la corregí. Me atreví a verla de reojo para espiar su reacción y ella no hizo más que agachar su cabeza: no lo iba a negar porque sabía que tenía razon-. ¿Y cómo lo hizo?

-Me vio mal y, como al parecer es un experto en corazones rotos -bufó por la fama de su hermano-, se dio cuenta rápidamente.

Resoplé. No es como si fuera muy difícil, Rose y Scorpius eran demasiado obvios sin proponérselo. Me sorprendía, en realidad, que Hugo no lo hubiera notado antes.

Doblamos a la esquina de uno de los pasillos y sacudí mi cabello. Estaba rezando porque antes de llegar a las mazmorras ocurriera algún tipo de explosión, accidente o lo que sea que nos impidiera asistir a la clase Pociones. Aún no me sentía preparado de soportar las preguntas de Flint. Quería faltar sin que luego me castigaran, pero eso no iba a ser posible con tal profesor que sería capaz de hasta hacerme un análisis en la enfermería para desmentir cualquier excusa que quisiera poner.

Así que allí estaba, llegando al infierno y humillación total. Pero antes, debía hacerle un favor a Scorpius.

-¿Por qué no quisiste volver con él?

Paré en seco y me enfrenté a ella. Rose ahogó su sorpresa con un suspiro y bajo rápidamente la mirada hacia el piso. Estaba mal, en serio, lo sabía porque estaba apagada y últimamente me esquivaba.

-Lo hice porque no quiero que se sienta comprometido a estar conmigo. Quiero que se abra un poco y que...

-¿Que qué?

-Que deje de estar obsesionado.

-¿Obsesionado? ¿Crees que él está obsesionado con la relación?

No lo entendía. Scorpius no era un tipo pesado, amaba a Rose y pasaba mucho tiempo con ella pero no como si se desesperara, era como un novio normal y nunca me había parecido que a mi prima le molestara.

-No. Creo que él está obsesionado conmigo -la miré con el ceño fruncido, pensando lo peor, y rápidamente trató de corregirse-. No seas idiota, no es una obsesión mala. Me refiero a que...

Se mordió el labio. Estaba indecisa de decírmelo o no, así como aquella vez en que no sabía si contarme o no que estaba coladísima por mi mejor amigo.

Acaso... ¿se había enamorado de alguien más?

-¿Estás sintiendo algo por otro? ¿Joseph?

Últimamente pasaba muchísimo tiempo con Krum, el que él le gustara no sería algo muy raro, después de todo ligaba con ella desde tercer año. Si era algo como eso, no sé si podría decírselo a Scorpius, estaría tan destruido que sentiría lástima por él y hasta tendría que darle el permiso de odiar a mi prima.

Sólo así se cumpliría el deseo de mi tío Ron, que Rose y Scorpius no se hablen... aunque no sé si para el era mejor un Malfoy o un Krum.

-¡Claro que no! -exclamó escandalizada-. Él ya no gusta de mí, Albus, somos amigos, está enamorado de otra persona y estoy siendo su Celestina.

Se lo creí. No tenía razones para mentirme.

-¿Y de quién estás enamorada entonces?

Rose rodó los ojos.

Albus Potter y la maldición de los Potter || #PNovelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora