Mi Mundo Al Revés

Que haria sin él.

Eso era exactamente lo que me hacía falta, un abrazo que me hiciera olvidar todo por unos segundos, que me transportará y me tranquilizara. Hacía tiempo no me daban un abrazo de estos, desde que, bueno, terminé con mi ex. Él era el único que me hacía sentir estas cosas que mencioné, él era el que siempre lograba calmarme, nadie más podía... Hasta hoy.

Francisco me soltó.

-¿Estas bien Giuli? Me dijo secandome las lágrimas

-Ahora lo estoy.

Fran me sonrió.

-Ahora si, anda al baño y lavate la cara hermosura. Es por allá me dijo señalando de la salida del cuarto a la izquierda.

Caminé hacia allí.
Entre al baño y cerré la puerta.
Me mire en el espejo, el rímel se me había corrido todo. Rayos, que hago ahora pensé.
Corté un pedazo de papel higiénico lo mojé en agua tibia y empecé a tratar de sacarme todo el maquillaje que se me había corrido. Estuve varios minutos tratando pero era imposible no me sacaba todo. Diablos, si tan sólo tuviera mi crema.
Fran al ver que demoraba mucho me golpeó la puerta del baño.

-Giuli ¿estas bien?

-Si, vení pasa, ayudame

No me quedó de otra que pedirle ayuda, no quería que me viera así pero sola no podía, es decir, es obvio que yo se más de estas cosas pero con agua era imposible sacarlo totalmente.
Fran abrió la puerta y me miró.

-Uh, ¿te pasó un tornado por la cara? Se río.

Lo miré seria.

-¿Quieres que te traiga una de esas cremas para quitar el maquillaje? Me dijo riéndose.

-¿Tenes?

-Si, bueno, mi abuela. Dijo. Aguanta acá que ya te traigo.

Fran tardó algunos minutos pero al final me trajo la crema.

-Acá esta, demoré porque no la encontraba

-Esta bien, no pasa nada

-Te ayudo veni, corta papel me dijo

Corté nuevamente un pedazo de papel higiénico y se lo di, él mojó el papel en la crema, quise agarrar el papel pero él no me dejó.

-No hermosura dejame a mi, cerra los ojos

Pude sentir el frío de la crema en el contorno de mis ojos, primero en uno, después en el otro.
Cuando pude notar que ya había terminado de pasar el papel quise abrir los ojos pero Francisco no me dejó.

-Noo gritó Fran

Me reí.
Agarró una toalla la mojó con agua tibia y me saco la crema que me había quedado, con la otra punta me seco los ojos y cuando terminó me dio un beso en la frente.
Abrí los ojos y lo vi ahí, en frente mío, sintiendo su respiración muy cerca. Me puse nerviosa.

-Gracias le dije con una sonrisa de oreja a oreja.

-No hay de que, hermosura...