Tú eres mi destino (Shawn Mendes y tú)

Capítulo 8

Narra ______:

Me desperté en medio de la noche, estaba tan cansada que me había dormido al tocar mi cama. Pensé en lo que me había pasado en el día cuando me acordé de la película y me asusté. Me tape hasta los ojos. Intenté en pensar en algo bueno pero no podía.

- ¡Maldito Cameron! - grité contra mi almohada

Vi la hora, eran las 5 de la madrugada, había pasado 1 hora desde que me desperté. Me levanté de mi cama y me fui a la pieza de Sam.

Entré sin tocar y ahí estaba durmiendo, se veía tan ridículo pero igual lo amo.

Me senté en su cama y empecé a acariciarle el cabello.

Sam se removió en su cama y abrió los ojos.

- ¿Que pasó?

- No puedo dormir, tengo miedo

- ¿De qué?

- Vi una película de terror, ¿puedo dormir contigo?

Sam asintió y me hizo un espacio en su cama.

Me acomodé y lo abracé.

- Eres el mejor hermano del mundo

- Y tú la mejor hermanita

- Te quiero tonto

- Y yo a ti estúpida

Reí suave y luego de eso me dormí de nuevo.

(...)

Sentí que me movían. Abrí mis ojos. Era Sam.

- Despierta ______

Me removí en la cama y luego me incorporé.

- Pensé que harías algo distinto para despertarme como tirarme agua, saltar arriba mío

- Venía con un vaso de agua pero mamá no me lo permitió

- Que bueno

- Mamá está de buen humor e hizo un desayuno muy rico, adivina

- ¿Huevos con tocino?

- No

- ¿Cereal con leche?

- No, menos

- ¿¡Hot cakes!?

- ¡Sí!

- Ok, ahora dúchate y bajas a desayunar

Le hice caso, salí de su habitación y me fui a la mía, me adentré en el baño, me despojé de mi ropa y me metí en la ducha.

Me tardé 10 minutos, salí, me sequé, me eché mis cremas y mi perfume. Salí de mi baño, tomé mi ropa y empecé a vestirme. No me maquillé ya que no me gusta mucho y no quiero llamar mucho la atención en la escuela.

Bajé y ahí estaban mis deliciosos hot cakes.

- Buenos días familia

- Buenos días - respondieron mis padres

- Que emoción es su primer día de escuela - dijo mi mamá - espero que hagan nuevos amigos

- Mahogany está en esa escuela al igual que todos los chicos

- ¡Que bueno! - exclamó

(...)

Terminé mi desayuno y subí a mi habitación a cepillarme mis dientes.

Bajé y Sam estaba esperándome.

- Al fin - dijo Sam mirando hacia el techo

- Ya vámonos