Diecinueve

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Recuerdo el 19 de noviembre de 2014, empecé a conocerte. Tú estabas triste y tenias que quedarte a estudiar, y yo sin ni siquiera conocerte, me quedé contigo hasta las tres. Recuerdo ir enamorándome de ti sin notarlo, sin ni siquiera saberlo. Recuerdo como solo tú tuviste la capacidad de reconstruir mi corazón roto y como solo los momentos vividos contigo no se borran de mi mente jamás. Recuerdo la primera vez que nos vimos, tú celoso porque iba con mi mejor amigo, y yo celosa de no poder estar allí contigo. Recuerdo como si fuese ayer el abrazo que te di la primera vez que quedamos, me acuerdo de tus abrazos como si los reviviese a cada segundo. Recuerdo como intentabas darme besos y yo muerta de vergüenza me escondía en mi bufanda, como me gustaría recibir esos besos ahora. Recuerdo como si sucediese ahora mismo, en este preciso instante, cuando nos picábamos y te dije "no seas tonto, si sabes que te amo". Hasta entonces nunca había sentido que debía decir un te amo, pero en ese momento fue como si algo se activase y mi mente supiese que yo no volvería a amar así. Recuerdo que aún tenias braquets abajo, que odiabas tu forma de hablar, lo mucho que te picabas cuando te despeinaba y que yo solo lo hacía para luego ir corriendo a abrazarte y peinarte, si, peinarte, pero solo por tenerte a dos centímetros de mí. Y es que pase lo que pase y el tiempo que pase, jamás olvidaré los lugares en los que estuvimos juntos, los lugares en los que nos besamos y en los que poco faltó para robarnos besos. Jamás olvidaré tu olor, tus abrazos ni tus te amo que decías sintiéndolos. Jamás te olvidaré, y es que si alguien ha conseguido hacerme feliz, sin duda, ese has sido tú.

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