Tied & Tangled [Suyeol][Traducción]

XX

Smuuuuuuuuuuuuuut /o/.

  ☓  

Las dos semanas de finales encerraron a Chanyeol en un capullo, no es hasta que envía su último ensayo de Bernini cuando su computadora chisporrotea hasta su muerte.

"Lo que significaba que voy a tener que pasar todas mis vacacions de invierno viviendo de un turno a otro como camarero," Chanyeol se lamenta. Está siguiendo a Suho por la florería como una sombra, tirando de la parte posterior de su camisa cuando comienza a poner demasiada atención a las calas y no lo suficiente en él.

Suho pretende estar demasiado ocupado rociando a unos botones de rododendro, cuando realmente está intentando conseguir más tiempo para ofrecer una oferta apropiada.

"Hey, qué s—" Suho se voltea para ver a Chanyeol cerniéndose a un par de pulgadas de él. Chanyeol sitúa sus manos a cada lado de la mesa detrás de Suho, acorralándolo. Todavía está puchereando, pero hay un brillo en sus ojos cuando Suho vacila, parpadeando hacia la boca del menor.

Suho rocía la cara de Chanyeol con la botella de agua.

"¿Qué te he dicho un millón de veces?" Dice rotundamente mientras Chanyeol escupe y da un paso atrás. "Estoy trabajando. No tontees."

"No hay nadie más aquí," Chanyeol se queja, usando su sudadera para secar su cara. Regresa al tema cuando Suho lo amenaza nuevamente alzando la botella. Por mucha mierda que Suho le de al niño, adora tenerlo allí. Hay algo calmante, cálido acerca de ver a Chanyeol vagando por los pasillos de piedra gris, inclinándose con curiosidad sobre las flores para empujar los pétalos con sus grandes y cuidadosos dedos. Es un poco menos cálido que cuando Chanyeol se arrastra por las plantas, siguiendo a Suho y narrando cada uno de sus movimientos como un conductor de un programa de naturaleza.

"Cómo estaba diciendo," Suho dice, "Tengo una computadora extra. Todavía ocupo la de LC&M, pero Industrias Wallace me dio una cuando recién comencé. Puedes tenerla."

Chanyeol soltó una risa hasta que se dio cuenta que Suho hablaba en serio. Su computadora rota había sido un herencia de Yura, y le había costado un montón de dinero sólo mantener la cosa funcionando todo ese tiempo hasta ahora. Pero había una cierta cantidad de orgullo dentro de ella—el pensamiento de que le den una portátil casi raya en lo rídiculo. Nada en su vida ha sido de ese modo. Así que Chanyeol endereza sus hombros y dice, "Gracias, pero puedo conseguir una propia."

Suho presiona, "Está sólo acumulando polvo. Considéralo como un préstamo, si no te sientes bien tomándola."

Chanyeol lo estudia. Incluso cuando se conocieron, había una línea que había dibujado entre ellos permitiéndose aceptar regalos de Suho y quejándose por los más grandes. Chanyeol había aprendido a detenerse de quejarse cuando salían a comer y Suho pagaba la cuenta, pero sólo porque los ojos del mayor tienen una extraña manera de disparar dagas si abre la boca para protestar.

"¿Un préstamo?"

"Un préstamo." Suho asiente. "Si vas a trabajar hasta el culo en el restaurante, no uses ese dinero para comprar una nueva computadora cuando tengo una que puedes usar gratis. Usalo mejor en la renta o en tus libros de texto del otro semestre."

Le toma un poco más convencerlo, y Suho se arriesga enganchando sus dedos en los bolsillos delanteros del pantalón de Chanyeol para distraerlo, pero Chanyeol eventualmente acepta.

"Ven a mi casa a eso de las cinco para recogerlo," dice Suho. Sólo por si acaso, le rocía agua en la cara de nuevo, disfrutando demasiado el modo en que Chanyeol se sacude para evitar el inminente chorro.