Mi Tigre

Fiesta

Todo el lugar se mantenía a oscuras, siendo iluminado por la mínima aura de luz que regalaba el reflector. En medio, una silueta se deja ver, llamando la atención de todos los presentes.

-Bienvenidos todos. Como es habitual cada año nos juntamos aquí, tanto híbridos como los humanos al tanto de su existencia. Antes de comenzar la celebración tengo una importante información que darles.

El pelirrojo en el escenario toma un control que se hallaba sobre una mesa a un lado y apunta a un proyector delante de el.
Se reveló la imagen sobre la pared detrás del anfitrión, mostrando una foto proveniente de una cámara de seguridad. Dos hombres de negro apresaban a un chico, no superaba los 15.

-Estos hombres han estado rastreando y secuestrando a ya varios de los nuestros. No sabemos como logran detectarnos, pero es una obvia amenaza a la seguridad de todo híbrido. Se han mostrado casos de desaparecidos por algunas ciudades del país. Llamo a tener máxima seguridad, estamos trabajando en el tema y llegando al fondo de esto, pues no sabemos que traman. Cualquiera que desee cooperar en la investigación es bienvenido. Bien... seguido, podemos comenzar.

Las luces fueron encendidas y varios hombres con traje de mesero comenzaron a ingresar gran cantidad de comida. Canapés, brochetas, pasteles, dulces, un montón de variedad digna de un gran evento.

Se lograba escuchar música de fondo, perfecta para bailes de salón. Algunos sacaron a bailar a las damas, otros se concentraron en conversar, otros se veían en la mesa de los bocadillos, entre ellos un hambriento pelirrojo, fascinado con tantas delicias.

-Tranquilo Tai-chan... si devoras todo parecerás embarazada.- le anticipaba el pelinegro, preocupado mas por la comida que por su amigo.

-Ni que digas... Taiga tendrá un hijo mio. La comida no se compara a este chocolate.- aseguraba el moreno apuntándose con pose de diva.

-Atsushi tu también... ¿Que haremos con estos dos?.- preguntó el pelinegro que solo dejaba un ojo a la vista.

-Taiga no comas tan rápido o puedes enfermar.- se escuchó decir detrás de los chicos, al que anteriormente dio inicio a la celebración.

-Akha-tshin...-tragó para seguir hablando el pelimorado.- ¿Es verdad lo de los secuestradores?

-Lamentablemente, si. Es bastante preocupante, pero los encontraré a como de lugar.

-Yo quiero ayudar.- dijo el pelirrojo mas alto, después de comer medio mesón.

-Esta bien, gracias. Aunque puede ser peligroso.

-Si el va, yo también.- dijo el moreno, totalmente decidido.

-Gracias por su ayuda chicos.

-Te daré información de cualquier cosa sospechosa en el hospital.- habló por fin el peliverde.

-¡Yo te ayudo Shin-chan!

-Como quieras.. nanodayo.

-Bien, cualquier cosa me informas. Gracias Shintaro.

-Hmp.- refunfuñó el con ojo de halcón, haciendo un puchero.

-La pulga esta celosa~.- lo molestó el peliazul.

-Si, lo estoy. No me gusta que le llame por su nombre.

-Primero, que directo. Segundo, ya deberías estar acostumbrado; es así con todos.- dijo sorprendido y relajado Himuro.

-Primero, si soy directo, es mas que obvio, no soy un tsundere. Y segundo, no me acostumbro.

-Ya ya. Menos charla y mas acción. Vamos Tsunderima dile que lo amas, que no debe ponerse celoso porque eres solo suyo. Que se yo, di alguna cursilería.- lo molestó el ojizafiro.