mundos abiertos.

El amor que se comparte.

Ya era de noche después de ese momento que paso hace unas cuantas horas habían hecho efecto ya estaba volviendome loco no podía parar de pensar en ella sobre en que se podía lograr si estaba bien besarla o solamente fue un impulso, es una farsa que estoy viviendo ahorita o solo el destino que me esta llamando para ayudarlo a crear mi futuro quizá solo era yo con mis propias locuras o quiza sera que ella me había sometido en un mundo de pensamientos irracionales de amor, me daba vueltas la mente veía las nubes como volaban como los pájaros cantaban y esperaba la muerte que me vendría, la melancolía y tristeza de guerra que habrá mañana o quizás hoy dentro de unas horas nadie sabe y yo peor....

Decidí acercarme un poco mas a Minako me fui a su cuarto sorprendentemente estaba cerrado con un letrero que gritaba ''Estoy perdida no entren porfavor'' podria ser que nadie lo había visto o solamente le hicieron caso pero yo no pude aguantarme entre abrí la puerta silenciosamente y entre de puntillas para que no fuera que me escucharan o me vean, al entrar ahí estaba ella con la espalada en dirección hacia la puerta para que no la vean y admirando el cielo en la noche, las estrellas y la la luna bellas ambas me acerque y le puse la mano en el hombro.

Hola-dije con una voz que parecía que temblaba, estaba helado por dentro.

Vio para atrás y se me lanzo y me tiro a la cama y me empezo a besar yo sorprendido me quede rígido, paralizado por la sorpresa pero por instinto segui el beso, paro y se sentó encima de mi.

Te amo- me dijo.

Yo igual porque estas sola- le pregunte.

Estaba pensando y gracias por venir- me dijo sonrojada.

Eh bueno solo me preocupabas.

Me podes dejar hacerte algo- dijo mirando para abajo, como que si estuviera apenada de algo.

Claro....- cuando salieron esa palabra de mi boca, me empezo a besar y a quitarme mi camisa, regreso a besarme en los labios para este momento ya no tenía camisa, ni ella empece a desnudarla y a acariciar su cuerpo, me sentía sucio pero sentia que debia hacerlo entonces le baje su pantalón, una noche mala para haber usado pantalón en vez de falda, igual ella....pasaron unos cuantos minutos ahora ambos estábamos en ropas menores, ella sonrojada dijo una ves mas-Te amo- y respondí- yo igual- se quitó el brasier, me tragaba mi saliva estaba aterrado de lo que haré de si seria padre si debería hacerlo pero ella se termino de quitar el blumer para es tiempo se puso de rodillas y me quito mi calzon y empezo a chupar mi escondida gloria la parte mas privada de un hombre me parecía tan delicioso en ese momento como estas en el cielo estar rodeado con angeles, estar en un mar de elixir acariciando mi cuerpo, pasaron unos minutos y se levanto y me acostó en la cama, yo claro la acariciaba y no  oponia a sus movimientos, se sentó en mi pene y empezó a subir y bajar sentía la como sus nalgas chocaban con mis piernas, simplemente esplendido, la empece a mover y jugar con sus pechos solo por el hecho de darle mas placer, por lo menos eso pensaba,ella gemia y gemia cada ves más fuerte gritaba mi nombre mientras yo el suyo empece a ver a la ventana admirando las estrellas veía nuestras sombras como se movían, ya cuando mis propios deseos carnales empezaron a gritar para ser concedidos la cogí  y la empecé a penetrar con todas mis fuerzas tratando de hacerla gemir cada ves mas veía su rostro me acerque a besarla y así estuvimos cambiando de posiciones un rato hasta que otra ves se sento en mi yo acostado boca arriba y ella en mi pene y me dijo- Quiero ser tu esposa hacelo dentro de mi- la agarre de la cintura y la subía y bajaba hasta que no aguantaba mas y me corrí y dije- Te amo esposa- ella me respondio- Yo igual esposo- y se acostó encima de mi su cabeza posaba en mi pecho, ambos estábamos sudados, sonrojados, cansados y se quito de mi pene y se volvió a acostar encima de mi solo para dormir y nos dormimos juntos......

Ya era de madrugada se veía gris todo el mundo había neblina la admiraba desnuda y pensé - mi esposa es hermosa- y me acerque y la bese y la desperté.

Amor, esposa, Minako ya es hora alístate- la movía gentilmente.

Se levanto y me vio y sonrio.

Buenos dias esposo- se levanto y se empezó a cambiar.

Ayer fue...algo...- me quede en silencio.

Fue que- exclamo.

Fue....precioso- dije sonriendo.

Sonrió y nos terminamos de cambiar siempre platicando sobre fantasías y tonteras.

Ya es hora, estas lista- le pregunte.

Si- me respondio.
Prometeme algo vale.

Que- me pregunto.

No vayas a morir- le dije.

Te lo prometo, igual tu vale- sonrió.
Te lo prometo vamos.....