Capitulo 4

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Laila apretó los labios ni bien observó a Liana y Galo salir del ascensor. El chico presentaba una cara de disgusto por estar allí mientras que su compañera alternaba su mirada entre los presentes con un aire de superioridad.


—Parece que su plan ya no va a funcionar ahora que los descubrimos —Ella sonrió de lado.

—De eso nada —Bruce tomó a Liana del brazo— Ustedes vienen con nosotros, pulguita.


Galo frunció el ceño y tomo a Liana desde el otro brazo para separarla del fortachón.

No lo conocía, pero tampoco le interesaba. Conocía a los de su tipo y eso le bastaba para saber que era una mala persona; después de todo, él mismo se veía reflejado en Bruce.


—No la toques.

—No me toques.


Liana miró a Galo de reojo y apretó sus finos labios. Odiaba que alguien ponga sus manos sobre su cuerpo, era una de las cosas que más detestaba en el mundo y no estaba dispuesta a dejar que cualquier mamarracho la toqueteara... Aunque se permitió disfrutar un poco de la sensación que corría por su brazo, allí donde las manos de Galo se posicionaban.


—No nos interesa su jueguito de no tocar a nadie —Paul rodó los ojos y caminó hacia el centro de la ronda que se había formado— Sean y Fanny están por volver, ¿Podemos apurarnos?

—Tenemos que escondernos antes de qu...


Antes de que Laila termine de hablar, se escuchó un ruido que venía de una de las habitaciones con las que contaba el tercer piso. Los cinco chicos se quedaron en silencio, creyendo que el ruido era producto de su imaginación, pero les bastó solo con verse los rostros unos con otros para saber que todos lo habían escuchado.


—Bueno... creo que ahí tienen su primer misión como el club de los cinco*, vayan y vean —Liana movió sus dedos, señalando la puerta donde se produjo el ruido.

—No somos el club de los cinco —Paul la miró de reojo— Voy a abrir la puerta.

—Puede ser un fantasma —Bromeó Bruce.

—Los fantasmas no existen —Galo le dio una mirada gélida.

—Es cuestión de perspectiva —Interfirió Laila, que hasta el momento había permanecido en silencio, esperando por sus amigos.



Sean y Fanny corrían lo más rápido que sus piernas podían. Sean maldecía a Paul y Bruce por meterlo en aquél lío y al mismo tiempo, se maldecía a sí mismo por arrastrar a la chica con él.

Fanny, por otro lado, no estaba acostumbrada a hacer demasiado ejercicio y su pequeño cuerpo comenzó a pasarle factura.


—Creo que lo perdimos —Dijo entre jadeos— Deberíamos volver con los chicos.


Sean la miró de reojo, pero asintió.

Rápidamente, dobló por una esquina que los llevó a las escaleras. Subieron cada escalón con dificultad debido a que les faltaba el aire y al llegar al tercer piso, encontraron a sus compañeros de crimen, como Fanny los llamaba, en medio de una discusión con dos chicos que ella nunca había visto.


—¡¿Qué están esperando?! ¡Corran!


Los cinco dejaron de hablar al mismo tiempo que se voltearon a ver a los recién llegados. Sean respiraba con dificultad mientras apoyaba sus manos en sus rodillas intentado estabilizarse, Fanny por otro lado estaba hecha un desastre: su cabello estaba alborotado y la cola de caballo que se había hecho antes de comenzar todo no era más que una mata de cabello rubio alborotado, sus mejillas estaban rojas y sus manos temblaban por la adrenalina.

De repente, el ruido volvió a escucharse, esta vez más fuerte.


—¿Qué es eso? —Preguntó Fanny de inmediato.

—Un fantasma.

—No es gracioso, Bruce.


Sean los observó comenzar a discutir nuevamente y, hastiado, caminó hasta la puerta, abriéndola.

De nuevo, el grupo quedó en silencio viendo a Sean ayudar a Maia a salir del pequeño cuarto.


N/A:

Buenas, buenasss.

Feliz año nuevo genteee, ojala este 2019 nos encuentre con más misterios, mucho amor, drama, el final de Adicción y alguna nueva historia.

Gracias por leer ♥

Cam

Adicción [REESCRIBIENDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora