Accidental (Larry/Nouis)

6. "Ignorarte no es tan fácil como aparento"

Dos largas semanas habían pasado desde aquel incidente en casa de Louis. En un principio las cosas habían estado tensas entre el trío de amigos, pero el ojiazul había decidido ignorar el tema y tratar a Zayn como si nada. El morocho se había disculpado cientos de veces con él, diciéndole que no pensaba todo eso, Louis había suspirado y se había encogido de hombros como si con él no fuera la cosa, aunque todavía le dolía pensar en ello.

Niall y Zayn lo había solucionado varios días después de la pelea gracias a Liam y a su manía de que ahora todos ellos se juntaran como amigos. Para Louis era incómodo, así que optó por la manera más sencilla, ignorar al rubio. Niall estaba molesto, notaba cómo Louis había pasado de hacer el amor con él a ni siquiera dedicarle una mirada. Lo único que le molestaba más que que le tratara mal era su clara e intencionada indiferencia.

Deseaba que al menos le dedicara una pequeña mirada de odio que a nada, la indiferencia puede ser una de los mayores enemigos del hombre. Pero el rubio no se iba a rendir e iba a sacar una forma de que Louis volviera a interesarse por él.

Lo que Niall no entendía es por qué lo ignoraba cuando a Zayn lo había perdonado. Todo había sido confuso, pero Liam le explicó que Louis era una persona muy complicada y que los comentarios feos los tomaba como palabras sin sentido que simplemente lo dañaban.

Las palabras feas solo dolían si uno quería que así lo hicieran. Louis esa noche había aprendido una nueva lección y es que todo el mundo puede causarte daño, hasta uno de tus mejores amigos. No puedes huir del dolor por más que quieras.

Te persigue, te observa y cuando estas más débil, cuando estas más vulnerable te encuentras, ataca de la peor forma posible y da el golpe maestro para acabar de una sola vez contigo sin darte la oportunidad de pedir ayuda tan siquiera. Te hace hundirte con él y es difícil levantar la cabeza una vez después de la caída.

Zayn le había hecho darse cuenta de que él podía levantar la cabeza cuando querría porque no dependía de nadie. Sólo dolía si quería, y estaba dispuesto a que nunca más nada lo volviera a hacer. Aunque era imposible.

En cualquier momento por mucho que evites el dolor, te pillara. Pero Louis iba a estar preparado, después de tantos golpes se mentalizaba para saber que debía ser fuerte y aguantar uno más.

Así que simplemente había perdonado a su amigo, como si nada hubiera pasado y había seguido con su vida. Ignorando al rubio y divirtiéndose con Zayn y Liam. En su mente rondaban las palabras de Harry una y otra vez: hazte valorar. Y eso iba a hacer a partir de ese momento.

— ¡Loouuuu! —Gritó una voz ronca a sus espaldas a lo lejos. Se volvió y esperó a que el hombre del que procedía la voz se pusiera a su lado para poder hablar. Justo pensando en él, justo apareciendo, ¿eran casualidades o el destino que se empeñaba en juntarlos?

—Hey Harry, ¿qué tal? —Preguntó Louis sonriendo mientras se estiraba a besar la mejilla del rizado. Harry y él ahora eran grandes amigos, desde aquel incidente en la fiesta.

Louis se sentía a gusto con él y Harry parecía una persona que realmente se preocupaba por todo lo que ocurría, así que como nunca tuvo nadie con quien confesarse y contarle sus problemas, aparte de Liam, Harry había sido el indicado. Era comprensivo y divertido.

Y siempre tenía buenos consejos. Además de que era increíble en la cama, por supuesto.

—Bien, me preguntaba si querías ir a ver una película esta tarde—Dijo Harry tímidamente mientras se sonrojaba entero, había estado esperando para proponérselo—He pensando que los vengadores quizás te gustaría. ¡Puedo comprar palomitas si quieres! O quizás nata y le estrenamos en mi cama.