14. "Con ese clavo sólo abrirás otra herida"

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Era una mañana cálida de marzo, algunos árboles ya comenzaban a dejar sus hojas caer. Louis miró con ternura y algo de añoranza sus alrededores. La casa estaba adornada por los escasos rayos de sol que la iluminaban. Los columpios chirriaban por el escaso uso que recibían... La mañana desprendía un poco de aire fresco.

Y entonces Louis notó que algo había cambiado... Todo estaba en completo silencio...

Los arboles no danzaban las sintonías de los pájaros, el agua del pequeño estanque no chapoteaba... Algo faltaba en aquel enorme jardín. Miró de nuevo el columpio y se dio cuenta que Boo ya no estaba jugando en él como de costumbre. Sus instintos comenzaron a alterarse.

¿Dónde estaba su hijo? Un grito y unos pasitos corriendo hicieron que girara su cabeza como un poseso, pero valió la pena. Allí estaba riendo mientras era perseguido por su tío Liam. Louis no pudo evitar reprimir la sonrisa y sus ojos se iluminaron.

Pero algo estaba mal... Su pequeño Boo no tenía cara, ni cabello... Ni sonrisa... Solo era un cuerpo más allá riendo. ¿Quién era el padre? ¿Porque no podía saber de una maldita vez si tenía ojos azules o marrones? ¿O el cabello rubio o negro?

Y lo peor de todo, ¿dónde estaba Harry? ¿Harry? ¿Harry? ¿Harry? Quería una respuesta e iba a saberla pronto, cuando la valla trasera rechino indicando que alguien entraba. Deseaba con todas sus fuerzas que fuera una cabellera rizada... Estaba a punto de saberlo...

— ¿Lou?—Louis abrió sus ojos y se encontró con la mirada preocupada de Liam—Estabas haciendo ruidos raros, estaba preocupado, ven aquí.

Simplemente había sido un sueño... O Quizás una mala pesadilla...

Liam lo atrajo entre sus brazos y se tumbaron en la cama juntos mientras el castaño acariciaba la barriga de su amigo. Él no tenía la culpa de que Zayn y él hubieran roto, sería injusto echársela. El ojiazul cerró los ojos e intentó volver a dormir.

Aunque iba a ser algo difícil después de aquello.

~*~

Cuando Harry regresó a casa de Liam y tocó el timbre, Karen fue la que le abrió la puerta primero. Esa mujer era un encanto, siempre les agradecía su presencia en su casa cuidando de sus hijos. Además de que ella era la primera ilusionada con el bebé.

— Oh, hola Harry querido, Liam, Niall y Louis están arriba durmiendo. Zayn se ha marchado hace rato. Parecía un poco abatido pero no he podido hablar con él, ¿has hablado tú?

— No, recién vengo de la casa de un amigo. Muchísimas gracias Karen.— Le agradeció cortésmente—Luego nos vemos, ten un buen día.

Harry subió las escaleras y cuando entró a la habitación se encontró una imagen demasiado adorable, Louis estaba en medio abrazado por Liam y Niall. Pero a los segundos de su cara se quitó la sonrisa que se había formado. Louis descansaba su cabeza sobre el rubio.

¿Por qué le invadían siempre esos celos? Louis le había demostrado muchas veces que a quien quería era a él, ¿porque tanta inseguridad? Cuando volvió a mirar a Louis, este le miraba con ojos llorosos. Y en cuanto pudo, se zafó de los brazos de sus amigos y rápidamente salió de la cama, tirando a Liam al suelo con su acto.

— ¡Harry! Oh menos mal que volviste, pensé que había dicho algo que te había molestado y que no volverías. Lo siento mucho ¿si? Si no quieres ir al cine conmigo no pasa nada, de verdad— Harry lo atrajo hacia él y besó sus labios, después tocó su mejilla y por último lo abrazó dulcemente estirando una de sus manos como siempre para tocar la barriguita de Louis.

Accidental (Larry/Nouis)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora