Capitulo 19

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Dia 16  Final

Un simple once de junio de un año que ni se recordaba. Abby abrió los ojos. Tenía un vendaje en la cabeza. Algunos mechones de pelo se escapaban de allí, correteando por su hombro. Tenía ganas de vomitar. Miró a su alrededor. Sus padres dormidos en una silla. Oía las voces de sus hermanos, fuera. Se cruzó con la mirada de Niall. Que estaba quieto. Inmóvil. Delante de ella. Se acercó y se sentó en la cama. Nunca había visto el rostro de Niall tan pálido. Nunca lo había visto tan mal, nunca lo había visto tan triste. Por sus ojos rojos sabía que había estado llorando. Él le cogió la mano, temblorosa.

- ¿Cuánto hace que estoy aquí? – susurró Abby.

- Desde ayer por la mañana. Te encontré desmayada, en el lavabo…

- Vaya… -sonrió. – Siempre eres tú el que me lleva al hospital.

Niall empezó a llorar. Quería abrazarla, quería decirle, nena, quédate conmigo, no te vayas. Quería sonsacarle de nuevo lo bonito que era verla sonreír. Quería… quería tanto a Abby. Ella tiró de él, haciendo que la abrazara. Él sabía que no podía abusar, que no estaba bien, que era frágil, más en esos momentos.

- ¿Por qué lloras, pequeño? – le susurró Abby, despacio. Él la miró a los ojos.

Apoyó su frente contra la de Abby, mientras sus lagrimas aún no saciaban. Y no tenían intención de hacerlo. – Tendrías que estar feliz, de que estoy aquí viva.

- Lo sé. – Niall hizo una mueca de dolor, intentando no llorar más. El labio inferior le temblaba. – Pero…

- ¿Pero…? – Abby lo estriñó más contra ella. Quería sentirlo, quería sentirse. Quería gritar estoy viva. Pero algo sucedía. - ¿Qué pasa Niall?

- Que… - él tragó saliva

- ¿Dijo algo el doctor? – le acarició la mejilla. Él asintió. - ¿Qué dijo el doctor, Niall?

  -Joder, esto es difícil… - agachó la mirada, hacia sus labios. Los besó, suave, delicadamente. – Abby…

- Dímelo… - suplicó ella. – dímelo, nada puede estar peor…

- Si, si lo está… - más lagrimas rebozaron por sus parpados. – el doctor dijo que si vives es gracias a la conexión que tienes con la máquina…

Abby se quedó perpleja.

- La operación no salió bien… - dijo él, sollozando, con voz ahogada.

Abby sonrió. Aun que las lagrimas también inundaron sus ojos.

- Hey… - dijo alzando el rostro de Niall. – No pasa nada, se veía venir… - suspiró. –Niall, hazme un favor.

El negó con la cabeza.

- Si pasa, Abby… eres mi completa vida… no puedes irte.

- Niall, escúchame… - le pidió Abby, entrelazando los dedos de su mano con los de él. – Vas a levantarte, vas a dejar de llorar. Vas a desenchufarme de la máquina, y lo último que voy a ver antes de morir, va a ser a ti, sonriéndome.

Niall quedó aún más perplejo. No podía ser que ella, ella... su amor, su vida, su todo... le estuviera pidiendo que la... no. Niall negó con la cabeza de nuevo.

- Por favor… - le pidió. Sus lágrimas resbalaron, enmarcaron su hermosa cara sin maquillar. Era preciosa.

- No me puedes pedir que te mate. – susurró Niall, con la garganta, que le ardía. – Debe haber otra jodida solución… tu no… tú no puedes…

- Niall, asúmelo… - le pidió Abby, pidiéndole con la mano que volviera. Él volvió a sentarse a su lado y le acarició un costado de la cara. – Estoy muerta, esto ya no durará mucho más… acabalo tu.

- No, no puedes pedirme eso… - susurró. – Abby, por favor… - sus pequeños ojos color celeste se inundaron de nuevo, más lagrimas cayeron por su barbilla, ya no intentaba esconderse, las facciones en su cara se marcaban, ella podía sentir todo el dolor que tenía Niall encima.

– te amo tanto… tanto…-Abby se inclinó y besó sus labios. Por última vez. Para siempre.- Niall… - le apretó la mano. – si alguien tiene que hacerlo, ese eres tu… ayúdame…

- No. – Niall se negó a hacerlo. – si tu mueres yo también.

Abby empezó a llorar, intentando no hacer escándalo para no despertar a sus padres.

Niall se apartó las lagrimas con el pulgar. Alzó la cabeza de Abby por la barbilla y la miró, serio.

- Solo arrancaré esos cables si dejas que me vaya contigo.

- Nunca desearía tu muerte. – admitió Abby. – no puedo darte el sí.

- Abby, por favor… - Niall agachó la vista, pero pronto volvió a mirarla. – quiero estar junto a ti para siempre. No puedes irte sin mí…

Ella apretó los labios, intentando no romper a llorar por enésima vez. Lo abrazó fuerte. Niall suspiró. Seguidamente inspiró el usual olor de Abby. No a perfumes, no a champú.

Simplemente a ella… a su amor, a su princesa, a su niña. Se separó lentamente y fue a buscar algo de su bandolera. Abby apoyó la cabeza en la pared. Sabía lo que él buscaba. Lo esperó sentada en la cama. Pronto él volvió con ella. Dejó a un lado la jeringuilla cargada de una dosis excesiva de insulina.

- Niall…

- Shht… - la miró, arremangándose una de las mangas. – sí, estoy seguro.

Abby miró hacia arriba, como si buscar algo. Como si esperara un milagro. ¿Enserio él estaba haciendo eso por ella?

- No puedes morir por mí.

- Tonta… - él la miró y sonrió. – sabes que si te marcharas sola… yo ya no tendría motivos para vivir.

Cogió la jeringuilla y la clavó en su brazo. Apretando. Inyectando hasta la última gota del medicamento. Torturándose… abriéndose paso hacia la muerte… Pronto toda aquella insulina haría que la sangre parara de circular por sus venas, sin llegar así a su corazón.

Niall apartó los cables de alarma del cuerpo de Abby. Si los médicos sentían el compás anormal del cardiograma, aquella habitación sería como una diana. Los dejó a un lado y se sentó en una silla, al lado de Abby. Apoyó su cabeza en el vientre de ella. Con una mano agarraba la de Abby. Y con la otra, los cables que permitían que ella siguiera con vida.

- En cuanto sienta que la sangre ya no corre por mis venas… - susurró con dificultad. – tiraré de los cables.

Abby asintió. Si hablaba, se iba a poner a llorar. Niall estaba envuelto en una capa de sudor. Le costaba respirar. Ella sintió como apretaba su mano. Dirigió la otra hacia el rostro de Niall y acarició su cara, tirando algunos mechones hacia atrás.

- Niall… esto es una locura… - dijo Abby entre sollozos. – no deberías…

- Ya está. – él la miró, sonrió, a pesar de todo. – El amor es locura, mi vida.

Ella ladeó la cabeza.

- Sonríeme. – le pidió él. – quiero ver por última vez la sonrisa más preciosa del mundo.

Ella le hizo caso, a pesar de lo mojada que estaba su mirada, sus mejillas, su barbilla.

- La volverás a ver dentro de nada. – le explicó ella. – allí arriba… disfrutaremos del reencuentro. – Niall asintió, complaciente de sus palabras optimistas.

Sintió como la presión de la mano de él aflojaba. Ella se estiró, acompañó la otra mano de Niall, que cogía los cables y tiró de ellos. Desconectándose. Niall la miró.

- Te amo. – susurraron los dos al unísono.

Y una última sonrisa. Y una última mirada. Y las respiraciones que se agotaban, el aire que no llegaba a los pulmones, la circulación irregular, la escasez de sangre en las venas. Y los dos corazones… que a la vez, dejaron de latir.

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⏰ Última actualización: Jan 13, 2018 ⏰

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16 Dias terminada - Niall Horan (Adaptada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora