CAPITULO 2 (La casualidad no existe, solo lo inevitable) † †

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Eran las seis de la mañana cuando mi madre me despertó con mucha motivación para irme a la escuela. Me levante desayune, me bañe y lave mis dientes; durante ese proceso no dejaba de pensar en todos los años que pase estudiando en casa. Wolf es afortunado siempre fue a la escuela, siempre tenía amigos...

     -Es que él es un chico normal. –Exclame. – ¿Por qué no puedo ser como él? –Dije mientras me cepillaba el cabello.

Ingrese a la escuela a la mitad del segundo año y como era de esperarse el "Primer día de escuela" me perdí; no sabía en qué salón debería de entrar, me sentía irritable (Claro, típico de mi). Tendría que ir de salón en salón preguntando cual era el salón segundo seis ya que ninguna puerta tenía un indicador en donde dijese que salón era.

     -"Disculpa, ¿Estas perdida?". –Escuche a solo unos cuantos centímetros atrás de mí; voltee y estaba una chica sonriéndome con un enorme moño rosado en el cabello.

     -De hecho sí. –Conteste. –No sé si podrías ayudarme a encontrar el salón segundo seis.

     -Por supuesto que sí, sígueme. –Contesto con la misma sonrisa con la que la me pregunto si estaba perdida. Me guio hacia mi perteneciente salón de clases le agradecí y enseguida se retiró de diciendo un "hasta pronto" con una sonrisa deslumbrante, que ocasionaba una tranquilidad inmediata como diciendo un "todo estará bien" con solo una sonrisa.

Entre al salón y el profesor que estaba dando la clase de historia universal me regaño por haber entrado quince minutos después de la hora indicada; me disculpe y me presente ante toda la clase obligatoriamente como si tuviera la edad de una niña de primaria.

     -"Mi nombre es Brooke Thornell y espero llevarme bien con todos ustedes".

Escuche como susurraban los unos con los otros pero no era de impresionarse, (Al menos era lo menos que esperaba) ya que si alguien lleva una blusa puesta diciendo "I will drink your blood", ¿Quién no murmuraría?

     -Listo señorita Thornell, tome asiento en aquel lugar vacío. –Dijo el profesor al señalarme aquel lugar que tenia vista hacia l ventana. Historia universal, cálculo avanzado, filosofía, biología humana; ¿Todas estas materias tendré que ver el día de hoy? (suspire) Este será un día muy largo y pesado.

Al terminar la clase salí al baño para refrescarme un poco, no pensé que historia universal fuera tan aburrida; mama no lo hacía ver así. Me mire en el espejo y note que atrás de mí estaba una persona con una túnica negra sonriendo.

     -"Es él". –Dije. Voltee rápidamente y ya no estaba detrás de mí; no puedo negar que me desilusione, porque después de 3 años no lo había vuelto a ver.

     -"Seguramente es mi imaginación". –Me dije una y otra vez mientras caminaba hacia el salón de clases; si hubiera sido el me hubiera dejado una rosa azul como la última vez.

Entre al salón confundida por lo que había pasado, al sentarme una persona desconocida para mí me quito el asiento y por lógica me caí, todos se empezaron a reír sin en cambio yo no le veía la gracia.

     -¿Es en serio? –Murmure.

     -¿Estás bien? –Me pregunto un chico extendiéndome la mano sonriéndome sexymente.

     -Sí, gracias. –Conteste evadiendo la mirada.

     -Descuida algunas personas de aquí hacen bromas demasiado pesadas. –Me respondió con sonrisa. Enfadada arrime mi silla y tome asiento. Sentía una respiración a solo unos centímetros de mi hombro me estaba empezando a enfadar, así que voltee.

Nada más dulce que tu sangreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora