-"Tomé asiento señorita Sagisawa"-"gracia directora"
-"lamento tener que llamarle en estos momentos, pero lo que hizo Natsuki fue muy grave"
Un día llamaron a Youko de la escuela diciendo que su sobrina había tenido una pelea dentro del colegio.
No era la primera vez que lo hacían ya que en repetidas ocasiones había sucedido, pero está vez parecía diferente, le había roto la nariz a un niño y al otro dejado inconsciente.
-"¿por qué haces las cosas más difíciles Natsuki?"
Las palabras que ella dijo aquella vez no eran un regaño, eran más un lamento. Por primera vez me daba cuenta de las cosas. Me había encerrado tanto en mi propia desgracia personal que había olvidado los sentimiento de las personas que me querían.
Sí, yo estaba sufriendo, pero también lo hacia Youko, Tomoe, papá y mamá, tampoco éramos los únicos que lo hacían... habían cientos de persona que lo hacían por diferentes motivos. Yo no era la única.
Ver las lágrimas de Youko caer con tanta rapidez me hizo entender que yo quería ser diferente, quería merecer el amor de mis padres y sobre todo quería que Youko, estuviera orgullosa de mí.
Así que deje de meterme en problemas, trabajar más en la escuela, deje de estar vagando por las calles y mejor me quedaba con Youko en el hospital haciéndole compañía o me iba a casa esperando su regreso.
...
-"¿Segura que está viva?"
-"sí Natsuki, muy viva, está tan viva como tú y como yo, es más... goza de mejor salud que el vagabundo que está fuera del hospital" - puntualiza Youko ya cansada de mis preguntas
-"entonces ¿por qué no se ha despertado?" - Lo primero que hice cuando saqué del camino a Shizuru, fue llamar a Youko
-"sólo es un simple desmayo, debió de asustarse" - ella se encargó de todo lo demás
-"¿segura que está bien?"
-"si... sólo unos cuántos raspones... " -un gran suspiro salio de mis pulmones - "... voy a ver si localizo a sus familiares"
Y sí, ser persona violenta e impulsiva no es lo que quiero, no quiero actuar por instinto como un animal sólo porque tenga miedo y frustración.
Y sí, descarge mi irá en otros que no lo merecían y eso estuvo muy mal y lo lamento, porque en vez de hacerme más fácil la vida me la complicaba y se la complicaba a otros... por eso quiero cambiar, ser alguien mejor, quiero ser mejor para alguien.
...
No, no, no, no y simplemente no. De ninguna manera. Eso no lo quiero y no lo necesitó. Es más, eso ¡NO está sucediendo!
Sí, he leído y visto infinidad de películas donde describen éste hormigueo que estoy sintiendo, y desde ahora pongo las cosas en claro... ¡Eso no me está pasando a mí! y ¡ni siquiera es una película!
Lo que siento no es cómo en esas película, en las que uno de sus personajes siente una explosión en el interior al tocar a su persona especial.
Para empezar no me está tocando conscientemente sólo es porque estamos sentadas a la par en el taxi.
Porque para los que empezarón a formular esas teorías en mi cabeza (porque definitivamente fue otra persona que se adueño de mi cuerpo al ser salvada por ella), no tomaron en cuenta algunos puntos que son muy importantes para está ecuación.
En primera, es Natsuki Kuga, y ella definitivamente no es nadie especial. Si, lo reconozco ella sería una chica... 'sexi' no es la palabra más adecuada pero es la única que se me viene a la mente, para algunos, pero para mí no lo es.
Y en esté punto encontramos también el segundo... ¡ella es una chica! No es que lo critiqué. Yo respeto a los que tienen ciertas diferencias a las personas que somos normales, pero yo no soy así.
Aclarado éste tema, no nos olvidemos que es Natsuki, y aunque esté siendo amable ahora conmigo, ella es mala, es el monstruo con tendencias psicoticas de Fuuka. Y yo siempre he odiado al personaje malo de la película.
Y el que me éste observando desde hace algunos minutos no significa que me guste que lo haga.
-"¿segura que no te sientes mal?"
Y el que parezca que se preocupa por mí no significa que me emocioné.
-"me encuentro en perfectas condiciones... ¿por qué lo preguntas?"
-"es que desde hace rato estas haciendo caras extrañas"
-"¿caras extrañas?"
-"sí... y siendo honesta dan un poco de miedo"
-"bueno... Pues... ¡métete en tus asuntos!"
Definitivamente ella no me gusta. Ni siquiera me ha dicho cosas bonitas, no es que las quiera escuchar de todas maneras.
-"tranquila"
-"¡Estoy tranquila!"
¿Por qué me dice tranquila, cuando obviamente estoy muy tranquila?
-"okey"
Ella mejor se dedica a observar por su ventana y da un gran suspiro, cosa que me recuerda.
-"últimadamente todo estó es tu culpa"
-"¿disculpa?"
-"sí, como lo oyes..."
-"¿y que se supone que es mi culpa?"
-"¡que casi me atropellara un carro!"
-"¡¿y yo que demonios tengo que ver?!"
-"porque si me hubieras dicho que querías a cambió de que me ayudara con la tarea de Yamada-Sensei, no me hubiera estado preocupando de eso por días..."
Ella abre la boca queriendo refutar mi acusación, pero no la dejó.
-"... Y de no estar tan preocupada pensando en el posible daño que infringiras en mi persona... ¡Yo me hubiera dado cuenta del maldito auto! ¡así que síiiii! ¡es tú culpa!"
Bien, ya lo saqué, ya me libere y ahora me importa un cacahuate lo que haga.
-"¡¿que se supone que yo querría de ti?! Era obvio que sólo quería que entregaras el maldito trabajo"
-"¿Qué?"
-"por Dios... No eres tan importante Shizuru"
-"yo no dije que..."
-"¿sabes que? Definitivamente sí te vez muy bien cómo para regresar sola a tú casa" - dice molesta - "señor... a mí déjeme en esté semáforo" - el taxi se detiene y ella baja, no sin antes decirme - "y tú pagas el taxi"
La veo alejarse con demasiada rapidez, dejándome con la palabra en la boca y el silencio reina por un rato hasta que...
-"señorita... Creo que su amiga... en verdad intentaba ser amable"
Fulmino con la mirada a don metiche logrando que guardé silencio.
Sí, definitivamente ella no me gusta. Casi ni me dolió que me dejara a solas cuando ella se ofreció a llevarme a casa. Ven la vida es fácil.
...
Canción. No One Ever Gave Us The Right - Marble Sounds
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Slipping Away. (ShizNat)
FanfictionNunca reconoces cuando será el día más importante de tu vida, no hasta que está sucediendo, no hasta que estás justo en el momento. El día que te rompen el corazón; el día que conoces a tu alma gemela; el día que te das cuenta que no hay suficiente...