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(♖)


Chanyeol tenía alrededor de una hora caminando hacia la nada. Sólo esperaba despejarse lo suficiente para poder volver a casa.

Se quedó parado debajo de un árbol, viendo todo tipo de personas caminando a su alrededor. Niños, parejas, familias. Suspiró mirando el cielo.

Gris como su cabello.

Había una ligera ventisca que lo relajaba más de lo que debería.
Cerró los ojos y sonrió. Éste tipo de clima le recordaba a su madre.

Siguió caminando hasta llegar al borde de una calle. Caminó hasta que llegó a la mitad de ésta y abrió los brazos sintiendo el viento rozar a sus costados. Comenzó a relajarse entrecerrando los ojos, cuando un sonido lo sacó de su comodidad.

Un gran camión a sólo unos cuantos metros de impactar su costado, tocando el claxon en modo de advertencia.

Chanyeol ladeó una sonrisa dispuesto a tomar el golpe.

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(...)

⠀⠀

—Me alegra que hayas venido Hyeri.

—Tranquila Jing, no tenía planeado faltar a ésto.— sonrió.

Ambas chicas entraron a la casa, donde la música se escuchaba hasta la esquina.
Caminaron hasta la barra, donde sus amigos se encontraban.

—¿Por qué no vino Chanyeol?— preguntó Kyungsoo, uno de sus amigos.

—Tuvo un pequeño incidente.

—¿Estará bien?

—¿Por qué de repente te preocupas tanto Jing?— interrumpió el chico antes mencionado, con su novia en brazos. Gaeun.

—Bueno, tal vez, sólo tal vez...

—Oh Jing, no me digas que Chanyeol te atrae.— Gaeun rió un poco.

—Talvez, sí.— tomó un mechón de su cabello pelirrojo teñido entre sus dedos y comenzó a enredarlo entre ellos.

Hyeri luchó con todas sus fuerzas para no gritarle a la estúpida de Jingsoo. Chanyeol era su guardián.

Sólo suyo.

—Hey Hyeri,— Gaeun llamó —hay un chico de aquél lado...— señaló una esquina del lugar. —Que te ha estado mirando toda la noche, ¿Por qué no vas a charlar con él?

⠀⠀⠀

(...)
⠀⠀⠀

—Jimin, no puedo.— una borracha Hyeri se negaba a besar al mayor.

Tenía media hora aproximadamente, evitando besar al chico, lo cual era bastante tentador porque era realmente guapo, pero no podía permitirse a si misma besar a alguien. Aún y cuando estuviera borracha, se encontraba en un escaso diez porciento consciente.

La fiesta seguía, ya que había personas aún bailando, tomando y conversando, hasta que un portazo desconcertó a todos. Un Chanyeol muy molesto, se abrió paso entre la gente. Pasó por todas las mesas hasta que una chica le detuvo el recorrido.

—¿Dónde estabas Chan?— si, definitivamente una Jingsoo borracha.

—Disculpa, debo buscar a alguien.

—Ven cariño.— Jing ignoró al mayor y lo tomó de la mano. —Vamos a una de esas habitaciónes.—sonrió tontamente jalando del mayor.

—Oye, estás borracha.— la miró con extrañeza —Аdemás, ni siquiera te conozco.

Salió del agarre de la chica y comenzó a buscar a su pequeña. Hyeri. ¿Por qué no le había hecho caso de quedarse en casa? Se estarían ahorrando ambos muchos problemas.

—¡Chanyeol!— escuchó su nombre y al voltear, alguien estampó sus labios con los de él. No podía decir con certeza quien era.

Pero de algo estaba seguro. No eran los labios de Hyeri.

ESPECTRO ⚊ PARK CHANYEOLDonde viven las historias. Descúbrelo ahora