Capítulo 16

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Corrimos y prácticamente nos estrellamos contra la puerta, algo que no había notado de la puerta desde lejos es que tiene una pequeña ventanilla de cristal por donde solo poniéndome de puntillas podía ver a través de ellas, Clarisse y Rose se estaban colocando de pie aturdidas cuando una luz azul se encendió en el pequeño pasillo donde estaban y un gas verde empezó a emerger de las paredes.

Empecé a golpear la puerta con rabia y solo podía gritar. Sentí una presencia detrás de nosotros y al voltearme vi a la criatura riendo, estuvo allí unos segundos y luego corrió a otra habitación, me volví de nuevo a la puerta y grite lo más fuerte que pude mientras golpeaba la puerta, ramas, enredaderas y lianas aparecían pero nada rompía estas bisagras. Los chicos me tomaron de los hombros con fuerza y me enviaron para atrás haciéndome caer sentada.

Los observe desde el piso, dijeron algo entre ellos y luego ambos hicieron una esfera y recitaron al mismo tiempo – Interitum – Ese hechizo se supone es para destruir un muro pero funciono muy bien con la puerta la cual se hizo añicos. Las chicas estaban del otro lado arrodilladas en el suelo protegida por lo que parecía ser una cúpula de color amarillo brillante, debió ser obra de Rose ¿Ella podría hacer eso? Supongo que fue ella por el característico color amarillo escarchado pero la cúpula parece algo más algo que haría Cristopher.

Me puse de pie rápidamente y todos corrimos hacia la habitación cerrada, sin pensarlo enredaderas aparecieron y las bisagras se rompieron. Esta era otra habitación, pero esta si estaba limpia y ordenada además de que solo había una cama y un escritorio, la puerta que conectaba con la sala estaba abierta – mal augurio – En la sala, la criatura estaba recogiendo los pedazos rotos del candado, al vernos gruño y se lanzó sobre nosotros. Corrimos todos en diferentes direcciones para confundirlo.

-Denme el medallón – Grito intentando atraparnos, ya no sabía a donde correr, además me estaba cansando.

Me había olvidado por completo del medallón, mire a los chicos como preguntando ¿Quién lo tiene? La última persona que lo tuvo fue Austin, quien lo puso en el congelador al abrirlo, el me miro y confundido apunto a mi pecho, al bajar la vista observe que guindaba de mi cuello, también note que la criatura me miraba, esta respiraba agitadamente y su nariz aleteaba como la de un toro.

-Dame esa cosa – Rugió al momento que lanzaba sus gigantes manos contra mí.

Proferí un grito de horror a momento que una liana aparecía y se le ataba al cuello pero la criatura la tomo y de un golpe me lanzó contra la pared, quede un poco aturdida, todo era borroso y creo que tuve un momento en el que todo fue oscuridad pero al abrir los ojos me encontré con Rose y Cristopher que me estaban ayudando a ponerme de pie mientras Clarisse y Austin luchaban contra la cosa esa, me sentía ligera, como si me hubieran quitado un peso de los hombros, nosotros tres salimos de la casa y segundos después nos siguieron Clarisse y Austin. Con las pocas fuerzas que me quedaban hice que unas lianas aparecieran sobre la puerta y las trence.

Para subir por el acantilado necesite un poco de ayuda porque tenía algunos colapsos momentáneos donde todo se volvía borroso y me sentía muy desorientada. Cuando llegamos a la cima note que era lo que me hacía sentir ligera, el peso que me había quitado era el medallón el cual ya no colgaba de mi cuello.

-Debemos correr – Dijo Austin – Deben estar por cerrar las puertas de la escuela.

Como pude corrí con todas mis fuerzas y aun así no fue suficiente para llevarles el paso a los chicos. Cuando faltaba poco vimos cómo empezaban a cerrar la puerta pero Rose en un segundo ya estaba allí deteniéndolos, cuando todos pasamos tuvimos que sostenerla para que no se desmayara, estábamos muy cansados y no quería ni imaginarme nuestro aspecto.

Streethigh: El medallón maldito.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora