Capítulo 38.

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PRIMER COMENTARIO AQUÍ

Me soltó lentamente aún con miedo.

—¡Qué te jodan, caraculo!— grité e hice la croqueta, cayendo de cara al suelo— Mierda— dije sobándome la nariz poniéndome mirando hacia el techo.

—¡Te está sangrando la nariz!— gritó Dave asustado.

—Suele pasar si te das un golpe fuerte— suspiré sobándomela—. ¿Podrías traerme algodón?— pregunté.

—¡Si, voy!— dijo nervioso. Ni que hubiese roto aguas.

Volvió segundos más tarde corriendo con un trozo de algodón, el cual me puse en el agujero de la nariz.

Dave empezó a hacer muecas raras intentando no mirarme.

—¿Te estás riendo de mí?— pregunté con la voz gangosa.

—No— dijo poniéndose serio, pero cuando me volvió a mirar, se le escapó una pequeña carcajada.

Y eso fue la gota que colmó el vaso.

—¡Qué sepas que esto es culpa tuya!— grité levantándome del suelo, encarándolo.

—¿Perdona?— dijo levantando las cejas— Yo te dije que dejaras de fumar que estabas empezando a decir cosas... Subidas de tono. Y tú seguiste poniendo poses sexys y trayéndome a tu cuarto.

—¡Tú fuiste el que me dio marihuana!— grité.

—¡Para ayudarte!— dijo con el mismo tono que yo.

—¡Y mira cómo me ayudas!— chillé señalando mi nariz. Y Dave volvió a reír— Serás hijo de tu madre— empecé a decir empujándolo. Aunque tampoco hacía mucho porque Dave era unas cien veces yo. Mientras él seguía riendo, hasta que le di una bofetada en la cara—. Que te jodan. Ahora, sal de mi cuarto— dije enfadada.

—¿Me acabas de pegar?— preguntó con una sonrisa tonta en la cara.

—¿No lo has notado? Te puedo dar más fuerte— me crucé de brazos con una ceja alzada.

—O sea, que sí me has pegado.

—¿Te fallan las neuronas o qué?

—Bien. Pues ten cuidado porque me voy a vengar de la forma más horrible que conozcas.

—Te esperaré tumbada— dije sentándome en la cama.

—Tranquila, no te va a doler el culo.

—¡Bien!— grité y él salió por la puerta, cerrándola detrás de él.

Me tumbé y dejé que mis ojos se cerraran lentamente.







Me desperté y me desperecé. De repente caí en ¿agua?

—¿Qué coño es esto?— dije al salir abriendo los ojos, viendo a Dave riéndose en el borde de la piscina.

—A la próxima vuelves a pegarme— dijo poniéndose de cuclillas para que lo oyera mejor.

—¡Serás hijo de tu madre!— grité intentando mojarlo. Salí de la piscina corriendo, riéndome.

Pero la diversión no duró mucho.

—Alaska— dijo Kevin.

—Déjame en paz— dije.

—Solo quiero que volvamos a estar juntos, como antes— me agarró de la cintura y me juntó a él.

—Suéltame.

—Venga, si sé que lo deseas— dijo apoyándome en un muro que separaba la piscina de un callejón.

—No me toques— dije intentando apartar la cabeza lo más posible de él.

—Venga, no pasará nada— dijo y me besó de una manera posesiva. Colocó su mano detrás de mi cabeza para intensificar el supuesto beso.

Digo supuesto porque yo no movía los labios.

—Bésame—dijo enfadado.

—Déjame en paz— contesté al borde de las lágrimas.

—¿Y qué vas a hacer? ¿Chillar?— dijo y me tapó la boca. Le mordí la mano y el la separó rápidamente de mí, gimiendo de dolor—Serás zorra— dijo y me pegó.

—¡Te ha dicho que la dejes grandísimo hijo de puta!— gritó alguien mientras lo tiraba al suelo.

Empezaron a pegarse puñetazos. Yo simplemente me agaché, aún apoyada en la pared, con las rodillas dobladas y empecé a llorar. Sí, sé que suena un poco tonto, pero no podía hacer otra cosa.

De repente se empezaron a oír gritos diciendo que se separasen y que lo iba a matar si seguía pegándolo.

—Alaska, ven— dijo Chris cogiéndome del brazo. Me levanté y él me cogió en brazos. Me llevó hasta la cabaña y me dejó en el sofá.

—Ni se te ocurra moverte— dijo poniendo un mechón de mi pelo detrás de la oreja. Yo asentí mientras me mordía el labio.

—¿Dónde está?— preguntó Amy a Chris. Él me señaló y se acercó a mí lo más rápido posible— Alaska, ¿estás bien?— dijo acariciándome la cara. Asentí y ella se sentó a mi lado. Me dio una manta y me tapó— Tía, me has dado un susto de muerte— siguió dándome caricias, pero esta vez en el cabello.

—Chicas, quedaos aquí, ahora enseguida vuelvo— dijo Chris yéndose por la puerta.

—¿Te ha hecho daño?— preguntó mirándome con tristeza.

Sinceramente, odiaba que me miraran así. No quería que le gente pensara que estoy mal. Ya sé que esta vez es una pequeña excepción porque estoy realmente fatal. Pero odiaba hacerme la víctima. Y la gente que se lo hacía.

—Estoy bien, Amanda. Solo intentó besarme y pues me defendí . Pero él también hizo una especie de defensa y me golpeó. Pero estoy bien, no tengo hematomas ni nada— dije secándome las lágrimas.

—Has teñido suerte de que te han encontrado— suspiró.

—¿Quién me salvó?

N/A: Holaaaaaa
Hasta aquí el capítulo de hoy. Espero que os haya gustado y siento la demora. No tenía mucha imaginación. Una chica me dio una idea, luego faltaba escribirla de una forma en la que yo espere que os guste. Muchísimas gracias por leer y comentar. Os amo a todos.
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Capítulo dedicado a: XxmagcultGirlxX
En multimedia: Chris
Besos, tita Ángela.

Viviendo en una fraternidad(VCC#1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora