¿Estamos lejos de casa?

VEINTE

- Hola Matilde – se acerca un médico por detrás de mi cama – venía a ver qué tal se encuentran tus heridas en la cabeza y también para ver si todo anda bien por allí – dijo señalando mis piernas y mi torso. Me sonríe – Estoy seguro que tus fracturas están evolucionando muy bien. No pongas esa cara de susto. En dos meses y medio, como mucho, andarás saltando en una pata.

-¿Fracturas doctor?

-Sí, Matilde. Tienes fracturadas dos costillas y el fémur de la pierna derecha donde hemos tenido que hacer un trabajo de reconstrucción ósea – me mira a los ojos – tu fémur estaba fragmentado en doce partes.

-Pero... ¿Por qué... Por qué... nadie me lo dijo? - vi acercarse a Harry como todas las tantas veces cuando pasaba el médico por la cama 167; la mía. Se acerca con esa sonrisa que cada vez que la veo (me ocurre más seguido, aclaro) me derrite, me entra calor y las mejillas se me ponen bordó. Me saluda con su dulce y tierno good morning, Matilde; pero no le doy importancia. Voy directamente al grano – Eres un traidor, Harry – grito con todas mis fuerzas – no me lo has dicho. ¡¿Por qué?! – Las lágrimas comienzan a saltarme y ahora susurro - ¿Por qué, Harry? – Me mira extrañado por mi reacción pero a pesar de eso se arrodilla junto a mí y susurra unos cuantos Shhh – no me has dicho que tengo los huesos quebrados en millones de partes, Harry.

-Matilde, tranquilízate. Si lo oculté fue por una buena razón – se inclina hacia mi rostro. Tenemos las narices casi juntas. – Hablé con los médicos, no tomé la decisión solamente yo. Pensamos que iba a ser menos chocante después de enterarte lo del coma que era demasiado. – me rodea la cara con sus manos callosas y no logro escuchar nada más; solo respondo a su mirada desolada y de perdón.

***

Si.. es martes y no me aguanté hasta que sea mañana para compartirles otro de mis capítulos... A mis pocos lectores les digo que los quiero.. (: