Entre Recuerdos

Malicia mundana

Donde la abuela Gabriela iban a visitarla poco, tal vez porque vivía en otro pueblo o porque a a Don Miguel el padre de Juli, era pastor protestante y tenían mil ocupaciones. Lo que si era verdad es que Juli se divertía mucho donde su abuela materna , ellos tenían televisión y ella aprovechaba para ver por largas horas, claro que había que respetar la hora de la novela que sus abuelos veían . La abuela era una mujer dicharachera con lenguaje hasta vulgar , muy estricta . Le gustaba la música, en esa casa siempre había mucho ruido , eran muchos hijos , seis varones ,tres mujeres , todos con personalidades muy peculiares , había de todo. Esa familia era un mundo completo, pudo haber existido un planeta solo para ellos.
Sus abuelos tenían una relación muy extraña , dormían en cuartos diferentes y peleaban siempre ,se trataban mal , pero con la misma intensidad se cuidaban y defendían se podía decir que extrañaban pelear. Parecías competidores de lucha libre que se tratan mal en público y en privado comparten un café. Al menos así lo percibió siempre Juli y nunca tomo en serio sus peleas.
La abuela Gabriela ,siempre vestía un delantal de bolsas grandes donde guardaba sus fósforos y cigarrillos fumaba todo el día ,casi era un requisito de vida , tener un cigarrillo encendido al lado del fogón .
Aquel lugar era muy humilde ,pero Juli siempre tuvo un lugar en un rincón de aquella cocina, la abuela siempre le tenía alguna sorpresa cocinada exclusivamente para ella .La abuela Gabriela siempre le enseño cosas de vida , odiaba la gente "agazapada " y "santulona" solía decir : De los agazapados librame Dios, que de los malos me libro yo.
Para Doña Gabriela la abuela Marita era su contra parte de la vida ,si hubiese un lado bueno y un lado malo se retrataría en ellas. La abuela Gabriela le gustaba también tomar licor en demasía , por su alcoholismo no era digna de confianza para cuidar de Juli, nunca la dejaron en su casa .
Pero hoy en día Juli piensa que no hubiese estado en mejores manos, porque aquella malicia mundana que tenía su abuela, la hacia desconfiar hasta de su propia sombra .Tal pensar hubiera librado a Juli de ser abusada de mil formas.
El abuelo Braulio sufrió mucho con el alcoholismo de su esposa pero mas con sus celos . Ella se imaginaba que el era el galán de mas de una vecina y aseguraba que era amante de mas de una de las casadas del barrio.
Para Juli su abuelo era el hombre mas fiel y perfecto del mundo, aunque su abuela decía no hay hombre fiel en el mundo , y si hay uno sería mujer fea.
En esa casa existían gatos perros y gallinas que vivían con ellos dentro de la misma casa . Y todos los vecinos entraban y salían , como si aquella casa fuera un lugar público la abuela daba de comer algo a quien llegara nadie se podía ir sin comer. Pero a Juli su abuela le preparaba unos plátanos en miel con canela cada vez que llegaba al principio era algo libre y normal pero al final de sus días, aquellos pedazos de plátano eran entregados en secreto en un rincón , como si fuera droga o un acto criminal . Juli se los comía escondia