Cap.61:
"Cuando menos te lo esperas"
-Un poco más cerca, por favor - Dijo la chica morena que estaba frente a ellos, debía ser la fotógrafa.
Jane le dedicó otra mirada a Justin y él esbozó una sonrisa. Era la quinta foto que le tomaban y su cara ya empezaba a sentirse entumecida de tanto fingir una sonrisa. ¿Cuántas más necesitarían? Es decir, ya les habían tomado muchísimas fotos ¿Qué no era un desperdicio tomar más?¿Dónde las iban a publicar? Debían ser unos obsesionados con el tema para querer más ¿No? Lo único que le preocupaba era saber que esas fotos probablemente harían su rostro mucho más conocido para la gente y bueno, no es que la llenara de alegría caminar por los alrededores, en un día cualquiera y ver su cara por ahí o peor aún, escuchar comentarios sobre ella y sus piernas cortas, no, definitivamente no era lo que la llenaba de felicidad, pero ¿Qué más daba? Le hizo caso a la fotógrafa y se acercó más a Justin. En un abrir y cerrar de ojos, la sexta foto estuvo lista. Y no solo la foto lo estuvo, también la hora de la entrevista.
Jane no podía criticar a la mujer de unos 28 años con piernas largas (bien formadas) y cabello marrón que estaba frente a ellos, sentada en el otro sillón, pero si podía catalogar la personalidad que parecía tener y esta era ¿Amargada? Si, amargada, fruncía el entrecejo muy seguido curvando sus cejas en señal de irritación y gritaba a sus camarógrafos a cada instante, literalmente. A eso se le llamaba tener mal genio. Ella conocía perfectamente lo que era el mal genio ya que vivía con el rey de este en persona, pero bueno, ese no era el caso, el caso es que quien les haría la entrevista era una mujer amarga y eso no era para nada prometedor. Podría salir con cualquier mala intención o presionarla indirectamente para obligarla a responder algo de una manera inapropiada, no quería ni pensarlo, el solo hacerlo la ponía nerviosa. Pero tenía buen físico, lindo cabello y nariz fileña ¿Por qué se mostraba con esa actitud entonces? Sin duda, el mundo era muy extraño, igual que el hecho de que ese día ella estaba actuando como la esposa perfecta. La mujer, llamada Mary los miró y se cruzó de piernas relajando el rostro mientras Justin sostuvo la mano de Jane. Oh, perfecto. Más amor falso. No sabía cuánto tiempo más podría soportar esto.
-Tengo entendido que - Empezó Mary - comenzaron a vivir juntos antes de casarse ¿A qué se debió esto? - Justin le sonrió a la mujer y le apretó un poco la mano a Jane. Esta pregunta no era tan difícil.
-Muchas veces el amor es tanto que no se puede estar sin esa persona - La castaña abrió los ojos sorprendida y lo miró fijamente. Se le había olvidado lo buen mentiroso que él podía ser– eso me paso con Jane, la quiero, y no podía estar alejado de ella. – La periodista esbozó una sonrisa, la primera desde que estaba frente a ellos, y miró a Jane.
-¿Y tú qué opinas, Jane? – mierda, no. ¿Por qué a ella?
-Eh, bueno - se tomó un tiempo, luego habló- Pienso que encontrar a esa persona especial a quien puedas amar no es fácil ¿Sabes? Y me alegro que a mi vida, haya llegado Justin, lo quiero también - Fue Justin ahora quien soltó un suspiro y trago gordo. Pero no era nada, no lo era ¿verdad?
-¡Vaya! – Exclamó la mujer – Parece ser que el amor les brota por los poros, eso es lindo en una pareja de recién casados, pero ¿Cómo hacen para mantener el estrés de que tú seas famoso, Justin? - el rubio se aclaró un poco la garganta.-Bueno, ella comprende lo difícil que es mi carrera y eso ayuda mucho. – Jane lo miró y luego a Mary, quien ahora no parecía una mujer amargada, ahora parecía una mujer que esperaba obtener algo productivo de sus respuestas. Se veía ansiosa.
-Si.. - retomó Mary – debe ser bueno, especialmente para un actor de tu nivel que tu esposa pueda comprenderte – Justin asintió.
-Créame que lo es. – Jane no pensaba del mismo modo, pero bueno.