Un consejo

2K 60 12
                                    

Cap.65:

"Un consejo"

Jane no pudo apartar sus ojos de Alan ni un solo momento desde su revelación, estos seguían brillando con aquel brillo que irradiaba confusión, temor, duda. De ninguna manera, era imposible, no, ella simplemente. ¿Cómo iba a entrelazar las señales? ¿Cómo podía pensar, aunque fuera por un momento, que ella sería esa mujer casada de la que él tanto le habló? Jamás se lo vio venir, era absurdo el solo pensarlo ¿Por qué una chica tan joven, no muy bonita y algo torpe como ella le gustaría? Además, él no había tenido el tiempo suficiente con ella como para atraerle, entonces ¿En qué momento pasó? ¿Realmente no estaba bromeando? Tampoco tenía forma de saber la vida que llevaba con Justin como para afirmar que era infeliz, así que ¿Qué? ¿Por qué mientras hablaba de su mujer casada, él decía que ella no era feliz al lado de su marido? ¿Acaso él sabía algo? No, no había manera.

Pero, esto... estaba muy sorprendida para pensar, Alan, él le había echado un balde de agua fría con esa revelación.

-Yo... esto, Alan, tu ¿Cómo podría ser verdad?

-Estas en el derecho de dudar en si creerme o no, Jane – le dijo, sereno, como siempre - así que no te preocupes, que realmente ahora no estoy esperando una respuesta de tu parte, esto solo cuenta como parte de mi regalo de cumpleaños ¿Vale?

-Alan..

-Solo quería que lo supieras. - La interrumpió. Pero aunque él se lo dijera así, tan tranquilo, como si nada pasara, para ella era muy complicado de tratar, lo miró fijamente pero no pudo hablar- ¿Nos vamos? – Le dijo él.

Ella asintió. Quizás habían sido muchas cosas para un solo día. El silencio camino a casa fue aterrador. Mas para dos personas que solían hablar mucho, Alan estaba conduciendo y ella miraba por la ventana. Estaba demasiado callada, pero no sabía que decir tampoco para iniciar una conversación y no es que fuera sencillo. Se quedó callada por unos minutos más intentando aclararse, y luego lo decidió, aunque le era difícil comprenderlo e incluso llegar a creerlo, decidió que las palabras de Alan, no, no le desagradaban mucho.

-Escucha, Alan - Murmuró en tono suave, el pelinegro giro su cabeza para verla y le sonrió, luego volvió a mirar al frente.

-Escucho, Jane.

-La verdad es que... - Alan esperó a que dijera algo, pero no dijo nada – Mira, cuando te sientas solo, o quieras comer acompañado o estés enfermo o simplemente quieras hablar con alguien, solo llamame ¿Vale? Quizás no seré lo que esperas, pero seré tu amiga, una de verdad – el ojos negros le dedicó otra mirada pensando en lo hermosa que se veía cuando estaba nerviosa o cuando las cosas la tomaban desprevenida y dejó escapar un poco de aire cuando ella agregó- ¿Sabes? si no estuviera casada yo creo que tu... podrías gustarme.

Alan se descubrió a si mismo riéndose como estúpido a la mención de las palabras de la castaña y solo se preguntaba "¿Y si hubiera llegado antes?" "¿Seria todo diferente? " Él jamás imagino que ese día, cuando la conoció en el hotel de Rusia, ella se volvería en una persona tan importante para él, es decir ¿Cómo imaginar que terminaría enamorado de esos ojos cafés? Y Jane ¿Cómo asimilar las palabras de Alan? Soltó un suspiro al cristal y dejó de pensar en eso. Minutos después llegaron a casa en donde Justin se encontraba despierto, ansioso y molesto. De esto último, hasta el tope.

Se percató de su llegada porque escucho el auto fuera de la casa lo que le hizo revolver el estómago aún más, solo significaba una cosa, él la había traído. ¿! Que no pudo pagarle un taxi!? ¿Y qué horas eran? Las 9 y media de la noche, Ja, debería ser un pecado que una mujer casada llegara a esa hora con otro hombre a su casa. Se asomó por la ventana y se mordió el labio, luego vio bajar a Jane y corrió rápido a tirarse en el sillón para parecer dormido cuando ella entrara ya que tampoco es que le fascinara la idea de que ella pensara que había estado despierto y esperándola, porque no era así. Claramente, solo estaba preocupado, si, mierda, tampoco había comido. Jane entró con cuidado a la casa y lo vio dormido en el sillón, se acercó extrañada osea ¿Justin, él que siempre le decía a ella que buscara su cama cuando se quedaba dormida en el escritorio, dormido en el sillón? Wao, definitivamente un acontecimiento gigante, Cuando estaba a menos de tres pasos él, Justin pareció moverse y despertó.

Amor Por Accidente (Justin Bieber) 《Terminada》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora