Adolecente (Harry y Tu)

capitulo 84

Aqui esta otro nuevo capitulo espero les gustes voten y comenten besos x.

Cuando dos personas se aman, se aman con el corazón. 
Cuando dos personas están juntas, no hay nada en el mundo que los pueda separar.
Cuando dos personas se prometen amor eterno, lo cumplirán al pie de la letra.
Por que el amor es más fuerte que todo, más fuerte que la desilusión, más fuerte que el engaño. 

Harry y yo amanecimos abrazados a la mañana siguiente. Era como si nuestros cuerpos no se quisiesen separar por nada en el mundo. 
Abrí mis ojos lentamente y me levanté de la cama. Miré a Harry por unos minutos, para después empezar a caminar al rededor de su habitación, quería conocerla un poco más. 
Tenía estantes llenos de libros, no sabía esa parte de él. Tenía otro estante con unos 4000 cd’s de diferentes artistas. Miré algunos títulos, era música buena. Caminé a la puerta de su habitación y salí, bajé las escaleras y fui hasta su sala. No había tenido la oportunidad de conocerla ya que ayer…bueno, ustedes saben. Miré cada parte de su sala, era espaciosa y tenía un color claro pero elegante, que lograba llamar la atención de cualquiera. La casa olía a perfume de hombre, olía al perfume de mí hombre. Tenía sillones grandes como para cuatro personas de color negro. Tenía un faro de techo totalmente hermoso con muchos focos de iluminación. Me dirigí hacia su cocina, sería un sueño vivir aquí. Era espaciosa, hermosa y grande. Era la casa que cualquier persona desearía tener. Quise ir hacia la parte de atrás, pero sentí como alguien me agarraba de la cintura y me aferraba más hacia él, sabía que era Harry. 

-¿Siendo vida ajena no? –dijo en mi oído- 
-No, solo husmeo –dije sonriendo- 
-¿Qué te parece mi dulce hogar? –preguntó él, virándome- 
-Es hermosa –dije agarrándolo del cuello- Y muy grande…
-Sí, quise que fuera grande. 
-¿Por qué? –pregunté- 
-Por que tendremos muchos hijos –dijo él sonriendo- 
-¿Enserio? ¿Cuántos? –pregunté poniendo mis manos en mi cintura- 
-¡Siete! –dijo-
-¿Siete? Mamá mía –dije yo graciosa, él rió- 
-¿Ya viste la parte trasera? –preguntó, negué con la cabeza- 
-Quiero verla –dije sonriendo- 
-Vamos –lo agarré de la mano y salí con él a la parte de atrás- 

Parecía el paraíso, tenía una piscina súper grande y árboles por doquier. Tenía un sin fin de clases de plantas, el césped era totalmente verde, un lugar muy naturalizado. Tenía adornos por donde vieras, enserio era una parte espectacular de la casa. 

-Esto es hermoso. –dije observándolo todo- 
-¿Adivina quién hizo el diseño de la casa? –preguntó- 
-¿Tú? –pregunté sorprendida- 
-No, Marco –dijo- 
-¿Polo? –pregunté- 
-Obvio no tontita –dijo tocando mi frente como gay- Marco Luis Ávila. 
-¿El arquitecto? –pregunté, me miró y yo sonreí- Okay, okay. 
-Creo que deberíamos entrar –dijo- 
-¿Por qué? Me quiero quedar aquí. –dije- 
-Y yo igual, pero en cualquier momento alguien viene y te ve en paños menores –dijo viéndome sonriendo- 
-Cierto…vamos –dije y entramos a la casa-

Entramos a la casa y nos dirigimos a la cocina. Yo me senté en una silla mientras Harry se paró en frente mío. Empezamos a hablar de cualquier tema, por más tonto que fuera igual nos sacaba una sonrisa del rostro. Miré el reloj de pared, ya eran las 12:05 y Melanie se estaría preguntando en dónde estaría. Me exalté un poco y cuando Harry se dio cuenta me preguntó:

-¿Qué pasa? –preguntó Harry- 
-Son las 12:05, debo volver a casa. 
-¿Pero porqué? –preguntó Harry-
-No vine a Inglaterra sola Harry, vine con mi hermana.
-¿Y? Ella entenderá que estabas conmigo.
-Tal vez sí lo entienda, pero eso no me da justificación para llegar a esta hora. 
-Está bien, está bien. ¿Quieres que te lleve? –preguntó él- 
-Me harías un gran favor. –dije subiendo las escaleras- 

Me vestí lo más rápido posible al igual que Harry. Salimos de su casa a las 12:27. Harry arrancó y en más de 45 minutos llegamos a el apartamento en donde por ahora vivía. Los dos nos bajamos del auto y subimos rápido a mi habitación en dónde las dos vivíamos. Abrí la puerta y para mí suerte Melanie no estaba. Harry me miró y yo simplemente bajé el rostro sonrojada. 

-Lo siento –dije apenada- 
-No te preocupes amor. –dijo él abrazándome- 
-Me daré una ducha –dije tomando mi rostro- 
-Está bien, te esperaré aquí –dijo sentándose en mí cama- 
-Está bien –dije entrando al baño- 

Me di una ducha larga pero que no tardó más de 25 minutos. 
Salí del baño envuelta en una toalla y ahí estaba Harry, mirando atento. Sonrió al verme toda mojada. Empecé a buscar ropa que ponerme hasta que la encontré. Iba al baño a cambiarme pero Harry me agarró de la mano, haciéndome caer sobre sus piernas. 

-¿Para dónde crees que vas? –preguntó él- 
-A cambiarme de ropa, ¿por qué? –pregunté- 
-¿Por qué te irás a cambiar de ropa si bien puedes cambiarte aquí conmigo, observándote? –preguntó él, con una ceja alzada- 
-Es que me da pena –dije avergonzada- 
-No hay porqué tener pena, no hay nada que yo no haya visto. 
-Buen punto –dije sonriendo y aún sonrojada- 

Empecé a secar mi cuerpo mientras Harry me miraba atento, por el amor de Dios no podía cambiarme tranquilamente ya que su mirada me ponía más nerviosa que nunca. Me quité la toalla totalmente y agarré un cachetero y me lo puse, era color negro con rayas horizontales de colores: azul, verde, amarillo, rojo, morado y rosado. Luego agarré mi sostén color negro con encajes de colores y me lo puse, por lo menos ya tapé lo más importante. Solía ponerme crema cada vez que me bañaba, pero con la mirada de Harry no tenía las fuerzas de hacerlo. 

-Creo que te falta algo amor –dijo Harry mirándome- 
-¿Qué cosa? –pregunté inocente- 
-Ponerte crema –dijo él- 
-Yo no me pongo crema. –dije mintiendo- 
-Tu piel es suave, pero lo que la hace tan suave es la crema. 
-Pues…es que tu mirada me pone nerviosa –dije sentándome alado de él- 
-¿Enserio? –Dijo sonriendo- Pues, hagamos esto más fácil.
-¿Cómo? –pregunté- 
-Yo te la pongo, tal vez eso no te pondrá tan nerviosa. 
-Me pondrá súper más nerviosa. 
-¿Por qué? Si dices que lo que te pone nerviosa es mí mirada. –dijo él observándome- 

Tomó la crema de fresas que tenía en mi cómoda, la sostuvo en sus manos mientras caminaba cada vez más hacia mí. Puso un poco de crema en sus manos y la frotó. Luego la fue poniendo en mis piernas. Me causaba algo de escalofríos y también un poco de cosquillas. 
Cuando terminó de poner la crema en mis piernas, la empezó a poner en mis manos. 
Al terminar cerró la crema y limpió sus manos con una toalla. 

-¿Fue tan vergonzoso? –dijo al ver mis mejillas totalmente rojas- 
-Sí, un poco. –dije- Eh…debo vestirme. –me levanté- 
-¿Adónde iremos ahora? –preguntó él- 
-No lo sé, dime tú. –dije poniéndome mi pantalón largo- 
-¿Qué tal si volvemos a mi casa? –preguntó- 
-¿Qué tal si me enseñas la ciudad? –pregunté- 
-¿Qué tal si vamos con los chicos? –preguntó- 
-¡Sí! –acepté rápidamente- Los extraño. 
-Está bien, iremos a ver a los chicos. 

Me puse mi camisa que decía “Nunca es tarde para comer” color blanca con letras negras. Me puse un abrigo y salí con Harry en dirección a donde estarían los chicos. 
Cuando llegamos a una casa, que al parecer era la de Niall nos bajamos de el auto y nos agarramos de las manos. Caminamos hasta la entrada y Harry tocó el timbre, minutos después nos abrió Niall.

-¿_____________(TN)? –preguntó casi gritando- 
-¡Niall! –me le lancé encima, abrazándolo- 
-¡Te extrañé demasiado! –gritó él- 
-Y yo. –dije sonriendo- ¿Dónde están los demás? –dije entrando a la hermosa casa- 
-Están en la parte trasera de la casa –dijo Niall- 
-Iré, ¿vamos? –dije agarrando a Harry de la mano- 

Cuando llegamos a la parte trasera de la casa no podía creer lo que estaba viendo. Eran los otros 3 chicos que yo tanto extrañaba. Ellos cuando me vieron pegaron un grito y se le lanzaron encima, abrazándome felizmente.

-No puedo creer que estés aquí. Harry nos había dicho que habías regresado, pero no creímos que vendrías. –dijo Zayn- 
-Pues estoy aquí –dije sonriendo de oreja a oreja- 
-Y adivino, tú y Harry la pasaron bien anoche –dijo Louis tocando mi hombro- 
-Pues –dije- 
-Louis –dijo Harry sonriendo- 
-¿Qué? ¿Otro récord marcado? –preguntó gracioso, yo lo empujé levemente mientras él sonreía- 
-¿Qué haremos hoy? –preguntó Liam- 
-Pues divertirnos –dijo Zayn sonriendo y abrazándome

Los seis nos sentamos en el porche de la casa el cual era súper espacioso, empezamos a conversar sobre cualquier cosa en común. Me dieron ganas de ir al baño así que me levanté y seguí la dirección que Niall me había dado. 

-_______________(TN) cumple la otra semana –dijo Harry- 
-¡Cierto! ¿Qué le haremos? –preguntó Niall- 
-Una fiesta sorpresa. –dijo Liam- 
-¿Cómo será? –preguntó Louis- 
-Súper increíble, me vienen ideas –dijo Zayn- 
-Pero ella no lo puede saber –dijo Harry- 
-¿Qué parte de “fiesta sorpresa” no entiendes? –dijo Louis mirándolo, Harry lo golpeó levemente- 
-Eleanor y Perrie nos podrían ayudar a que ella no esté aquel día –dijo Zayn- 
-Sí, Eleanor y Perrie la podrían llevar de compras o cosas así –dijo Liam- 
-Sí, pero ella no las ha conocido aún. –dijo Harry- 
-Tarde o temprano las tiene que conocer. –dijo Niall- 
-Pues es mejor que sea temprano porque nos quedan 7 días para preparar todo. –dijo Liam- 
-¿Siete días para qué? –pregunté llegando del baño, me senté alado de Harry- 
-Siete días para el estreno de una súper película que dará en el cine. –dijo Louis- 
-¿Enserio? ¿Cómo se llama? –pregunté-
-Wonderland –dijo Niall- 
-¿De qué se trata? –pregunté- 
-Pues de una chica que conoce a un caballo y el caballo la lleva a “Wonderland” –dijo Zayn- 
-¿Enserio? Parece tonta. –dije- 
-Sí, es tonta –dijo Harry nervioso- 
-Hablemos de otra cosa, ¿no? –dijo Louis, todos dijeron “SÍ” 
-¿Dónde comeremos esta tarde? –preguntó Niall- 
-Comeremos afuera, en un restaurante que conozco. –dijo Liam- 
-¿Cómo se llama? –pregunté- 
-Nando’s –dijo Liam- 
-¿Quién no conoce Nando’s? –preguntó Louis- 
-_________________(TN) –dijo Zayn- 
-Sí sabía de su existencia, solo que nunca he comido. ¿Y ese milagro que Niall no ha comentado? –pregunté sonriendo- 
-Es que me he enamorado más de Liam y su hermosa respuesta –dijo Niall mirando a Liam , Liam lo empujó y él sonrió- 

Nos quedamos un rato más hablando de cualquier tema en especial. Cuando ya era la hora de comer todos salimos de la casa de Niall en dirección a Nando’s. 
Al llegar pedimos la comida y cuando nos la dieron comimos. 
Fue el mejor día de mí vida.