Adolecente (Harry y Tu)

capitulo 27

Estábamos ahí cuando de repente sentí como mi celular vibraba y escuché mi tono. 

-Que canción más estúpida –dijo Roberto riendo- 

-Es One Direction, imbécil. 

-Solo bromeaba, me vuelvo gay por esos muchachos –lo miré mal- No tanto. 

Contesté.

-¿Halo? –pregunté- 

-¿Dónde estas? ¿Y porqué te vi salir de tu colegio con ese maricón de Roberto? –era Harry- 

-¡Harry! Te prohíbo que le digas maricón a mi mejor amigo. 

-¡Y yo te prohíbo que salgas con alguien que no sea yo!

-¡Es mi mejor amigo por el amor de Dios! 

-¡Y yo soy tu novio! ¿Qué crees que es mejor? 

-Harry…estoy muy estresada como para empezar una pelea, no tengo ganas de pelear y mucho menos contigo. 

-Pero sí tienes ganas de follar con ese maricón con pene de 10 centímetros cierto. 

-¡Mierda, respeta imbécil! ¿Sabes qué? Piensa lo que quieras, me vales verga –colgué enojada- 

-¿Qué sucedió? –preguntó Roberto- 

-El imbécil de Harry. 

-¿Qué dijo? 

-Que porque salía con un maricón como tu 

-¿Me dijo maricón? 

-Y no solo eso, también dijo que tenías pene de 10 centímetros. 

-¿Qué, enserio? ¿Cómo sabe? –lo miré con los ojos de platos- No te creas, el mío mide la mitad de este bolígrafo –dijo, no evité sonreír- 

-Iré arriba a cambiarme, en todo sentido de la palabra. ¿Te quedas aquí? –el asintió y yo subí-

Minutos después bajé, estaba con una pijama así:http://www.polyvore.com/so_lonely/set?id=65709272.

Bajé las escaleras abrazando mi dulce peluche, Roberto al verme así no evitó sonreí. 

-Que dulce te vez amiga eh –dijo sonriendo- 

-No te burles, es mi osito Teddy –dije-

-No me burlo, dije que lucías dulce, no ridícula. 

-Gracias. ¿Pedimos pizza? 

-Esta bien, de pollo.

-¡Me encanta el pollo! Y más si está arriba de la pizza –exclamé graciosa, el rió-

El tomó el teléfono de mi casa y marcó el número de la pizza, minutos después salió de la cocina. 

-Vendrá en 30 minutos –asentí- ¿Qué película veremos?

-Estaba pensando en ver…¡Barbie y el castillo de diamantes!

-¡Amo esa película! –dijo y yo sonreí- Mentira la odio…enserio la odio.

-Igual así la veremos porque yo quiero –agarré su brazo y lo llevé al sofá-

Nos sentamos y le puse play a la película, la pizza había llegado y Roberto se levantó para atender y pagar, al cerrar la puerta llegó con una pizza gigantesca, no tanto y la puso en una mesa que se encontraba delante de nosotros, empezamos a comer mientras veíamos la película, me reía por cada incoherencia que Roberto decía. Era realmente gracioso ver a tu mejor amigo hacerse pasar por las muñecas, muy gracioso de verdad. 

Al terminar de ver la película nos fijamos en la hora, apenas eras las 11:00 de la mañana y yo ya estaba en pijama. 

-¿Quieres salir? –preguntó el de repente- 

-¿Adónde crees que quiero ir en estos momentos querido amigo? –el sonrió por bajo- Ya sabes la respuesta. 

-¿Qué haremos entonces? ¿Ver otra película? –sonreír- No, no veremos otra de Barbie. 

-No mientas, no digas que no te gustó. Estaba muy linda la película. 

-¿Y ahora cual más tienes? La princesa y la plebeya –sonreí- Oh no. 

-Oh sí. 

Puse la película nuevamente, le di play y empezamos a ver otra película, nuevamente.