Capítulo 6.

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Poitiers, 14 de marzo de 2.123. 2:04 pm.


 -Tu padre fue de mis mejores asistentes, y se esforzaba demasiado cada día -las lágrimas caían poco a poco por sus arrugadas mejillas-, y para mi fue tan duro como si hubiera perdido a un hijo. Para entonces, Dwason estaba con un éxtasis que yo no comprendía y me vendió la idea de financiar parte del proyecto Eternity como, como si de algo bueno se tratara. 

-¿Y por qué yo? -miraba mis manos y luchaba contra el nudo en la garganta que apretaba y me dejaba sin respirar, mis ojos ya escocían por las lágrimas-, ¿qué hice yo para que me hiciera esto, Lady Cattermole? 

-Mi niño... -se acercó a mi, tomándome entre sus brazos y plantando un beso en mi cabeza-, puedo asegurarte con mi vida que de haber tenido el más pequeño atisbo de que te harían lo que hicieron, yo misma hubiera denunciado cada acción cometida. 

Miré a sus ojos verdes, ya viejos y sinceros, y mi corazón terminó de caer roto de forma estruendosa, pues esos ojos tan cansados y que han visto tanto no guardaban mentira alguna para mi. No pude contenerme y las lágrimas empezaron a brotar sin previo aviso. 

Ella me soltó y sollozó al verme, limpiando con sus manos mis lágrimas. Darlene también se acercó a mi, tomó mi cabeza y me llevó a su pecho-. Tranquilo, Alejandro, sabemos todo lo que has pasado pero... ya estás a salvo. -Su voz era tan suave. 

-Cuando Miguel murió yo... pensé que podía darte esta oportunidad y que salieras de manos de esa... mujer -musitó-, y sugerí tu candidatura a Dwason como una gracia, pero nunca pude prevenir lo que sucedería después; pero ahora estás aquí -surpiró-, y esta es tu casa ahora, y prometo que ningún daño volverá a ti. 

-Aún así, debe haber un propósito con mi visita aquí, para con su amabilidad -Darlene secó mis lágrimas y se fue a donde no pude verla-, ¿como logró traerme aquí? ¿qué tiene en mente? 

-Bueno... Aún sigues siendo miembro del Proyecto Eternity, solamente que Dwason quería evitar que todos cayeran en manos de la Regencia Mundial una vez se descubrió que esta iniciativa tenía un lado ilegal. 

-¿Entonces por eso nos fueron a buscar? -agité las manos-, quiero decir, cuando escapamos, había parte del ejército local que fue a por nosotros...

-Sí, y fue mi esposo quién coordinó su rescate. -Sonrió. 

-¿Rescate? ¿Si sabe que nos dieron con todo allá afuera y que destruyeron varias unidades? 

Su rostro pareció cambiar de semblante y se endureció por completo.  Caminó unos pasos hacia la pantalla que controlaba en holograma principal y buscó entre los archivos hasta que desplegó imágenes y reportes-. Según el reporte, todos estaban a salvo. Sí, había heridos de gravedad pero todos están vivos, ¿viste que alguien murió? 

-No... no lo vi con mis propios ojos ahora que lo pienso -susurré-, me disculpo en haberle preocupado, solo que... el fuego fue intenso, y fueron por nosotros antes que los del ejército. ¿Por qué? 

-Dwason intentó secuestrarlos para moverles de sitio pero varias unidades vieron su movimiento y lo forzamos a entregarlos -sonrió con una carcajada victoriosa-, eso sucedió mientras estabas inconsciente, lo que me recuerda... -se acercó a mi con complicidad-, ¿es verdad que pateaste al bastardo en el estómago? 

-¡Abuela! -Darlene reía detrás de mi, al volverme traía un vaso con agua y me lo entregó-, jamás escuché que te dirigieras así a nadie, ¿acaso te cae tan mal? 

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