Norman terminó de comer así que salió a tomar aire fresco. El sol estaba por ocultarse, y a el le encantaba ver eso.
Así que Norman yacía sentado sobre una barra de concreto mirando el cielo, quizá simplemente le gustan los colores fusionarse, o probablemente le relajaba el ambiente.
-Hola - dijo Gabriel mientras se sentaba a su lado. Norman lo miro y volvió su mirada al cielo.
-Hola. - esbozo Norman con tranquilidad.
-Conozco un lugar dónde se aprecia mejor.
Norman se giró confuso. Frunció el ceño puesto que no entiendo a que se refería.
-El anochecer. Se ve mejor en la cima de la pradera.
-¿En serio? No lo sabía.
-¿Quieres ir? - Gabriel se levantó y le tendió la mano.
-Y-Yo, no lo se. Debo ayudar a mi tía hacer la cena y... - sus palabras fueron interrumpidas por la voz de Betty a sus espaldas.
-Ve querido, yo me encargo de la cena. - Norman se giro y la aprecio con su típica sonrisa.
-¿Segura? Puedo ayudar y luego...
-Tonterías - dijo Betty con un movimiento de mano -. Ve y diviértete.
Norman volteó ver el rostro de Gabriel y este levanto los hombros.
-Sólo si tu quieres. - esbozo el castaño.
-Esta bien. No tardaré. - dijo Norman mirando a su tía.
-Solo divierte - Betty enredó a Norman en un abrazo y este se lo correspondió -, te quiero.
-Yo también te quiero tía. - Norman le beso la mejilla y se giro con Gabriel.
-Nos vemos Betty. - dijo Gabriel mostrando la palma de su mano hacia Betty.
-Cuida de él. - le susurro a Gabriel. Y el solo le asintió como respuesta.
En unos minutos llegaron a la pradera. Debido al anochecer esta estaba un poco oscuro, mas bien mantenía un color naranjo sobre la naturaleza; los árboles, el pasto verdoso y las flores hermosas. Norman se abrazo a si mismo mientras caminaba hacia una roca enorme, conforme caminaba pisaba sin remedio alguno las flores. Cada una mantenía colores vibrantes que eran opacados por la tenue iluminación que proporcionaba el hermoso clima.
Norman llego cerca de la roca y con un pequeño salto logro subir a ella. Abrazo sus piernas y fijo su mirada arriba.
-¿Te gusta? - pregunto Gabriel mientras subía a la grande roca.
-Me encanta. - Norman miraba cada segundo que el sol se escondía entre las montañas.
Y ambos presenciaron el anochecer hasta que la luna apareció sobre ellos, las estrellas comenzaron a presentarse en el cielo haciéndolo ver hermoso. Norman soltó un pequeño esbozo y tapo su boca con su mano. Se estiro y miro a Gabriel.
-¿Quieres volver a la hacienda? - le pregunto a Gabriel. Este mantenía la mirada perdida hacia las montañas.
-Norman... - esbozo -. Te quiero. - susurró.
-¿Qué? - Norman lo miro. Y Gabriel también lo hizo, le tomó la mano a Norman y este se puso nervioso.
-Me gustas Norman. Me gustas mucho...
Ambos se miraron a los ojos con la poca iluminación que les proporcionaba la luna. Los ojos de Gabriel mantenían un destello. Y los ojos de Norman mostraban una mirada nerviosa. Su mano comenzó a sudar, la miro y observó la mano de Gabriel sobre ella. Con los nervios a flote no se había percatado que Gabriel le tomo la mano. Instantáneamente sus mejillas se colorearon en un color rojizo. Abrió la boca para responder pero no emitía nada.
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Mi Vaquero Ideal [Gay] *correcciones gramaticales/ortográficas*
RomanceEn esta historia, narra la vida de Norman un joven de corazón puro, dónde trabaja en una hacienda. *Esta historia es homosexual. (boyxboy) *Todos los derechos reservados* #300 en romance 21/11/2016 #273 en romance 03/12/2016 #81 en romance 14/12/20...