SE SOLICITA MAMÁ

capitulo 10

Elizabeth
Voy en un avión que me llevara a L.A en mi vida me había subido a un avión y en mi vida había salido de Nueva York, si se que estoy lo suficientemente grandecita para tenerle miedo a los aviones pero bueno.
Me voy con "mi hija" y eso es casi literal porque Lizzy tiene esa peculiar costumbre de llamarme "mamá" y de darme muchos abrazos y besos. Me fui pero no sin antes firmar otro contrato donde me comprometo a cuidar a la niña, por Dios como si fuera a dejar que le pasara algo, el hecho de que a mi, mi madre me haya dejado como vil trapo sucio no quiere decir que yo le voy a hacer la vida miserable a una niña que no tiene nada que ver con las mierdas que pasan en este mundo.
También no podía dejar de decirle a mi amiga que tenía un trabajo para ella y en realidad esa parte es verdad por que Joe necesitará una secretaria y creo que Fanny llena muy bien ese espacio. Aún recuerdo la plática que tuvimos, y como pego el grito en el cielo el día que le dije que Joe Jonas necesitaba una secretaria.
Le pedí que fuera a mi nuevo departamento ya que desde que me mude no tengo mucho tiempo para verla, ya que la empresa pero sobre todo la niña abarcan la mayor parte de mi tiempo, por supuesto eso no se lo iba a decir, si no todo quedaría al descubierto, pero su reacción fue genial, al igual que yo está harta del trato que le dan los Williams, mas que nada por que se creen lo mejor de este país cuando solo venden pan.

 Es todo, pero bueno mi amiga, corrió a darme su curriculum y bueno según Nick estaba bien, solo faltaba que Joe le diera el visto bueno, y la verdad tanto Fanny como yo estamos cruzando los dedos para que Joe acepte que ella sea su secretaria.
Estaba tranquilamente leyendo nuevamente mi libro favorito "Besar a un Ángel" e iba en mi parte favorita [-¡Confié en ti! -Alex hizo una mueca cuando las primeras notas de la balalaica rompieron el silencio de la noche. Era la señal para entrar en la pista. -Creía que tomabas las pastillas, pero me has engañado. Ella negó con la cabeza y se tragó la bilis que le subía por la garganta. -No voy a deshacerme del bebé. -¡Por supuesto que sí! Harás lo que yo diga. -Tú tampoco quieres. Sería algo horrible. -No tan horrible como lo que tú has hecho. ] Cuando Danielle me interrumpió y me sacó de mi mundo de papel, que al menos era más hermoso que el real.

-Elizabeth te estoy hablando!! -dijo con un tono de voz, elevado para que yo respondiera.

-Oh perdón-fue lo único que me limite a responder- ¿Qué deseas?

-hablar contigo, digo llevamos 40 minutos en este avión, tú solo dormistes a Lizzy y te dedicaste a leer, todo esta bien contigo?

-Si, solo que estaba leyendo, la verdad los vuelos me ponen un poco nerviosa, sinceramente hace que prefiera distraerme en otra cosa más que pensar que estoy demasiado lejos del piso. -y sonreí pues lo que acaba de decir era verdad, estaba muy nerviosa como para ponerme a ver por la ventana.- Y perdón si te hice sentir mal, por mi falta de respeto.

-No, no te preocupes es solo que a mi también me ponen un poco nerviosa los aviones todavía, pero bueno, sabes te diré algo, creo que tu eres totalmente diferente a Perla, se que quizá fuimos un poco groseros al principio, pero entiéndeme lo que paso con Perla Y Nick nos dejó como un poco marcados a todos, de hecho pensamos que Nick no volvería a creer en el amor, hubieras visto cómo sufrió, sin duda su hija fue su tabla de salvación.

-¿Danielle, qué pasó con Perla? Nick nunca quiere hablar de eso conmigo, pero realmente me gustaría saberlo- y era verdad una de las cláusulas de mi contrato, prohíbe preguntas sobre su vida pasada, por lo que dice Danielle, fue algo muy feo-

-Y si te cuento y se enoja conmigo, que voy a hacer yo peleada con mi propia familia.

-si me cuentas será nuestro secreto, te lo juro además no creo que la verdad le haga daño a nadie, todos tenemos traumas, pesadillas y un pasado oscuro que por desgracias no se puede borrar- y sin querer me vi transportada a la época donde tenía que trabajar de camarera y acompañante en un bar, para poder pagar la preparatoria. Sin duda fue la peor etapa de mi vida, era como el infierno, y después con Saúl viví, nada más y nada menos que en el purgatorio