Insulin by Mink (NamGi)

2. ¿Cómo pudo haber dicho eso?

Rémi había insistido en que tenía ganas de ver a YoonGi puesto que le quedaba muy poco tiempo en Corea y quería aprovecharlo al máximo, pero ese día la cafetería había estado demasiado concurrida y YoonGi no había podido descansar ni un momento, por lo que estaba exhausto.

La liberación del material aún no tenía fecha pero YoonGi no quería que pasaran más de 15 o 22 días, por lo que iba al estudio y se quedaba incluso hasta las 4 de la mañana... pero ese día se sentía demasiado cansado incluso como para ir a trabajar un poco en el álbum.

-¿Aló? – dijo mientras salía del trabajo – no, NamJoon, estoy muy cansado. Literal no pude ni sentarme a almorzar y solo quiero llegar a casa y descansar.

-Hyung, pero es viernes, tenemos que divertirnos ahora o seremos unos viejos amargados que no tendrán recuerdos qué rememorar.

-1. Deja de hacerte el profundo con esto porque sé que solo quieres que te acompañe por si te pasas de tragos. 2. Estoy realmente cansado, solo quiero un masaje en las piernas y dormir como un bebé, joder, por ratos se me entumen y todo.

-¡Hyung! – dijo el menor, al parecer quejándose – tenemos cuatro días desde que no tomamos ni hacemos nada.

-Y no vas a morirte, te lo garantizo. Ve tú, yo no puedo, estoy cansado, incluso tuve que quitarme de encima un par de viejas pervertidas que solo querían "probar la carne", ¡eso me dijeron!

-¿Y si te doy un masaje y luego me acompañas? De hecho estoy en la casa y ya saliste del trabajo, por lo que debes estar por llegar, ¿no?... ¿te parece? – YoonGi dejó de caminar y suspiro pensando en la oferta. No había pensado que Nam iba a ofrecerse, es más, ni siquiera pensó que iba a tomarlo en serio... pero una propuesta así... de NamJoon... Su corazón se emocionó y se halló sonriendo a la nada.

-Está bien, pero tienes que masajearme como yo te diga y cuánto tiempo diga.

-Ahhh, tampoco abuses...

-Bueno, si no quieres entonces puedo....

-¡No! – contestó al otro lado de la línea – joder, eres un manipulador. Mueve rápido tu trasero, no quiero irme demasiado tarde.

-Son las 8...

-Exacto, la noche no va a esperarnos.

YoonGi caminó el trayecto restante sintiéndose tontamente nervioso. Sabía que Nam solo lo hacía para ir a tomar licor, no había ninguna segunda intención en eso pero el rubio no dejaba de pensar que tendría a su dongsaeng tocándolo como él le pidiera... aunque fuesen solo las piernas y aunque fuese solo un masaje inocente.

El incesante martilleo en su corazón, se acrecentaba a medida que subía las gradas hasta el tercer piso y al mismo tiempo se repetía que era un iluso por emocionarse por algo tan simple como eso, que no debía esperar nada de lo que estaba comenzando a imaginarse y que debía poner su empeño en hacerle frente a NamJoon.

Después de todo, sabía qué iban a ir a hacer después del masaje... vería como su adorado dongsaeng escogía a cualquier otra persona y lo dejaba por fuera, sabría que Nam estaría acariciando una piel que no era la suya y que estaría besando una persona que nunca iba a ser YoonGi... y eso... eso dolía pero el mayor era muy simple para algunas cosas y le bastaba con tener a Nam así de cerca.

Eso ya se estaba saliendo de control, a veces la pena lo embargaba y no hallaba nada más que hacer que salir a tomar y emborracharse. Sí, había sido así todas las semanas desde que había llegado a la capital... pero ahora se hallaba incluso entresemana con una resaca que casi no podía soportar... al igual que ver a Nam, eso se estaba volviendo cada vez más difícil.