Insulin by Mink (NamGi)

11. ¿Acaso estás ansioso?

NamJoon debía estar bromeando, el corazón de YoonGi comenzó a latir incluso más deprisa al sentir su dedo hacer contacto con la desnuda piel de sus muslos. Aunque estaba asustándolo un poco con esa loca idea suya, YoonGi tuvo el impulso de pedirle que lo tocara.

- Espera... - dijo con su mente nublada y sintió un escalofrío nada agradable recorrerlo de pies a cabeza cuando el menor no se detuvo. ¿Qué rayos estaba pensando?

NamJoon acarició sus muslos y YoonGi aun en su contrariada situación, volvió a estremecerse con el contacto... estaba loco si creía que iba a dejar que siguiera adelante con aquello, pero eso no evitaba hacerlo pensar que esas manos curiosas en su piel eran de su adorable dongsaeng, que luego de tanto esperar algo que parecía imposible, por fin estaba sucediendo. Quiso tomar a NamJoon y hacerle ver que podía llevarlo hasta el cielo si así lo deseaba... ¿entonces, por qué era él quién estaba justo bajo el cuerpo del chico?

- Todo está bien, hyung... dijiste que debía estar tranquilo, lo mismo va para ti... - su voz sonó ronca y YoonGi tragó grueso.

- Sí, ¡pero me refería a ti!

- Hyung, ¿te has visto siquiera en un espejo? - dijo y YoonGi volteó a mirarlo con el ceño fruncido dispuesto a gritarle que no viniera con cuentos de loco, pero no pudo evitar sentir algo de vergüenza al ver cómo su dongsaeng lo miraba pervertidamente de pies a cabeza y se concentraba en su parte baja. YoonGi se sonrojó, estaba terriblemente húmedo y Nam sólo lo había medio tocado. ¡Rayos! ¡No era un mocoso, no podía comportarse como uno!

- Por supuesto, soy la cosa más caliente de este planet... - respondió bromeando y estaba por reírse cuando el menor lo tocó de nuevo, agarrándole la polla con algo de cautela.

Echó su cabeza hacia atrás instintivamente y se llevó una mano a su boca. ¿Cómo podía alguien hacerlo sentir tan bien con sólo eso? Decenas de personas lo habían tocado antes, no era un crío y aun así se comportaba como uno cuando se trataba del menor. YoonGi mordió su labio inferior, volviéndose loco con todo lo que NamJoon le hacía, lo sintió masturbarlo y luego sintió su otra mano recorrerle el abdomen con lentitud desde su entrepierna hasta su pecho.

No pudo evitar mover sus caderas un poco, ansiando más contacto de su parte y cerró los ojos, negándose a ver a su dongsaeng haciéndole aquello, de otro modo se correría vergonzosamente rápido de nuevo, tan rápido que no podría siquiera disfrutar el hecho de que Nam estaba en realidad tocándolo y que no estaba soñando todo aquello.

YoonGi gruñó cuando Nam aceleró sus movimientos y ese calor por toda su parte baja le advirtió que estaba cerca... volteó a ver a NamJoon y este lo miraba atentamente, sintió sus mejillas calentarse y la imagen ante sus ojos hizo que su abdomen se tensara. Deseaba tanto a Nam, que cualquier cosa que él hiciera lo hacía sentir cientos de escalofríos por todo su cuerpo.

Todo, absolutamente todo lo que YoonGi sentía en ese momento, parecía ser un sueño y no era sólo por la atracción física que tenía hacia Nam y tampoco era porque el chico tuviera esa experiencia con sus manos que estaban volviéndolo loco... YoonGi simplemente no podía creerlo.

-No, hyung... - Nam dejó de tocarlo de repente y en su lugar, apretó la base de su miembro con algo de presión - no quiero que te vengas todavía.

YoonGi quiso maldecirlo o en realidad lo hizo, no estaba del todo seguro. Su cabeza era un desastre y su cuerpo entero pedía a gritos que lo dejara liberarse. Quiso golpear a Nam, cuando vio esa sonrisa sádica en su rostro y quiso separarse inmediatamente de él cuando lo vio llevarse un par de dedos a su boca.

- Nam... - dijo roncamente, con sus mejillas sonrojadas y su vista nublados - sabes que no voy a hacerlo. - y si la situación fuera otra, ver al chico lamiendo sus dedos de esa forma tan sugerente sólo lo habría hecho perder el control, pero no era nada alentador saber por qué lo estaba haciendo.