Grados Inesperados.

Capítulo XIX

-Se ve diferente tu departamento a la última vez que vine-, decía Enosh mientras entraba al departamento de Xander-, se ve muy bien, me gusta.

-Tiene mucho tiempo que no venías, y gracias-, Xander se dirigía a la cocina y Enosh solo lo seguía-, ¿quieres tomar algo?

-No, así estoy bien-, dijo y Xander solo rió negando con la cabeza.

-Pasan los años y no cambias Enosh-, dijo Xander, y sacó un pastel de chocolate-, siempre sueles decir que todo está bien, cuando por dentro mueres por algo-, lo miró y este solo se excusó con un levantamiento de hombros.

-Quizá solo siga haciéndolo, porque eres de las pocas personas que conoce mi forma de ser y hasta de pensar-, dijo sonriendo.

-Entonces, ¿siempre esperas a que tome acciones por ti?-, Xander entrecerró los ojos.

-No precisamente, solo me limito a decir cosas que ya sé que sabes, y que vendrás haciéndolas por la misma razón.

-Siempre tan astuto-, dijo Xander, depositando una rebanada en el plato de Enosh-, ¿de fresa o fresa con frambuesa?-, Enosh solo lo miró y Xander rió-, ¿cómo te ha ido con tus trámites?

-Bien, de hecho ya los terminé, pero decidí quedarme más de la semana por Joe, aún no me deja ir.

-Pensé que aún no los terminabas-, Xander alzó la voz, para poder ser audible por el sonido del batido.

-El día que te encontré en el supermercado me dijeron que me los daría al día siguiente. Desde entonces, me la he pasado en casa con Joe.

-¿Qué hacen todas las tardes?-, dijo y le dio su batido de fresas con frambuesas.

-Vemos películas, y platicamos, sabes que a ella nunca le para la boca-, dijo y los dos rieron.

-Me alegro por ustedes, que estén pasando más tiempo juntos.

-Desde que le expliqué todo, acerca de porque nunca le dije que era gay, ella comenzó a acercarse más a mí.

-Por cierto, ¿y Phanny?-, Enosh se sonrojó por escuchar su nombre.

-Ella está bien, creo que ya se casó.

-¿En serio? -, dijo Xander sorprendido.

-Sí, con el novio que tuvo antes de mí.

-Entonces, ¿ella también te utilizaba?

-Algo así, cuando terminamos, ella también me dijo que andaba conmigo para distraerse en algo, y olvidar a su ex-, Xander rió por la forma en la que lo contaba Enosh.

-Que bueno, al menos no te sentiste tan mal por ella-, Enosh rió fuerte.

-La verdad, jamás me había sentido tan bien, por ser utilizado-, dijo y su ánimo pasó a ser serio-, y ¿cómo vas con Alan?

-Pues, hace casi dos semanas terminamos, pero por lo visto, él está bien, y yo estoy bien. Así que no tengo de qué preocuparme.

-Te engañas-, Enosh negó con la cabeza.

-No tendría por qué.

-Siempre haz tratado de aparentar estar bien, porque no te gusta que se den cuenta que tienes debilidades Xander, pero la vida no es así, eres humano, y si no tuvieras debilidades no lo serías, no tienes porque sentir vergüenza en admitir que te duele que no hable, o que no esté contigo-, Enosh lo miró y sus ojos parecían tristes-, ¿lo amas?

-Sí, lo hago-, dijo Xander con cierto sonrojo en sus mejillas.

-¿Sabes? Yo sabía que no tendría oportunidad de estar contigo ya, Alan pareció ser más astutos que todos, es buen chico, y me alegro que estés con él. Quizá lo mejor fue que no estuviéramos juntos, yo no tenía una estabilidad emocional aceptable, y probablemente te afectaría a ti-, se paró de su asiento y se acercó a Xander-, pero quiero que sepas algo, y quiero que lo recuerdes por toda tu vida, cuando veas una foto mía, cuando escuches mi nombre, o por algún recuerdo vago, quiero que pienses que siempre, siempre Xander, te amaré, eres y serás el amor de mi vida.