—Nos caímos, Jacinto.
—Ya lo veo, niño Guy.
—Al perrito se le torció una patita. Ya se la compuse.
—¿Y tú?
—Acércate. No se lo digas a nadie. Yo no tengo nada. Mevendé sólo para consolarlo.Jajaja, este capítulo me alegro el día.
Que ocurrencias tiene Guy, en serio, me parece muy lindo y divertido.
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Canek
Short StoryEn estos días dejamos atrás las arenas de la época y nos internamos en el umbral y los linderos fronterizos de un nuevo horizonte, y bajo este arco se presiente un cargamento de hallazgos y desafíos que nos hace tocar las fuentes interiores del aso...