Harry Potter Imaginas

(S) Remus Lupin III - Hombre o Monstruo

Semana Sad
Imagina VII

Remus rompió el beso con dificultad ya que lo sostenía tas cerca que no era nada fácil estar muy lejos uno del otro, posó una mano en el estante y sonrió.

- Deberíamos de volver.- Susurró

- Deberíamos.- Murmuraste de nuevo en sus labios, le mordiste el labio inferior juguetonamente y él te tomó por la cintura presionándote más contra su cuerpo, pocos minutos luego intentó alejarse de nuevo.

- Hablo en serio T/N.- Murmuraba cerca de tu rostro.- Es demasiado tarde.

Le acariciaste su rostro y su pelo.- ¿Estás cansado no es así?, Mañana es luna llena..

Remus desvío la mirada.- Un poco.

- Lo siento.- Dijiste abrazándolo fuertemente.- Me haces falta durante esos días.

Remus sonrió débilmente y te acaricio la mejilla con dulzura.- Te amo.

Bajaste la mirada apenada y le susurraste.- Sólo ten cuidado.

Remus asintió, los dos salieron de la biblioteca de la mano y caminaron juntos hacia el salón común de Gryffindor.

El atardecer cubría fantásticamente cada rincón del gran castillo, la mayoría de los estudiantes caminaban hacia el gran comedor otros directos a su habitación, pero cuatro figuras que distinguías tomaban uno que otro atajo y salían a las afueras del castillo, caminaste con tranquilidad, pensabas en la salud de Remus con cada paso que dabas, aunque muy profundo creías que estaba en buenas manos.

Seguías a las demás figuras dirigiéndote al gran comedor, pero por el rabillo del ojo notaste que una se separaba de su grupo y trataba de evitar que fuera notado, esa misma figura tomaba otro rumbo, pero su cara expresaba secreto, travesura o deseo de algo.

Severus Snape se escabullía entre las sombras como un murciélago, su expresión encendió en ti alerta y decidiste seguirlo también, sin que te notara. Hace ya varios días Severus y Sirius habían discuto muy fuertemente, haciendo que los humos entre los moderadores y el pobre chico aumentará, las palabras que habían compartido no eran para nada bonitas, y misterio era lo único que la mirada de Snape dejaba atrás.

Severus caminaba rápido, sigiloso, e incluso pudo llegar a las afueras del castillo sin ser notado, ¿Qué era lo que escondía? Te preguntabas empujando tu suéter más a tu cuerpo por el repentino frío de la noche. Caminaron hasta el Sauce Boxeador, justo antes de que Severus se acercara al árbol, se alzó un gran aullido. Severus tomó una distancia al sauce y lanzó una piedra directo a un nudo de las raíces un pasadizo y el entró sin dudarlo.

Te abalanzaste a entrar antes de que el árbol volviera a mover sus ramas, tomaste distancia, sentías tierra bajo tus zapatos, piso irregular y olor a moho, caminaste un poco más y sentiste piso estable, madera, veías como ahora se encontraban en una casa vieja y tenebrosa, otro Aulló sonó dentro del lugar.

Reaccionaste de inmediato, Remus se encontraba allí en su forma de lobo, y corriste rápidamente a detener a Snape.

- ¡Severus! - Gritaste nerviosa subiendo las escaleras, a espaldas del muchacho.- No debemos estar aquí, Vámonos.

Severus te miró con asco.- Supuse que también estrías en este lío T/N, ¿Cuál es el plan, que huya al escuchar un aullido? Insulsos.

Tomaste su brazo con fuerza, verdaderamente creías que tu corazón saldría de tu cuerpo.- No, Severus hablo en serio, Vámonos.