Sentimientos perdidos

7

Aun pienso tan cobarde soy tanto huyó de mis miedos, miedo a cometer una tontería lose somos compañeros en clase y apuesto que Patrick ni siquiera a de saber de mi existencia yo se que siempre e sido ese cero a la izquierda. Quizá no había notado mi presencia en la librería y yo hasta huí como una vil cobarde, gracias a eso María perdió su bolso, tuvimos que corres 16 cuadras con un calor terrible. Pero bueno hoy ya es otro día con mucha hambre.
Es hora de almorzar espero María ya haya llegado y tenga mi almuerzo listo. Baje en pijama lentamente y con toda la flojera del mundo en mi las escaleras, mis piernas me dolían de tanto correr.

-Hola.-digo toda media dormida e intentando mantener mis ojos abiertos.
-¿Que tal cariño ?.-dice una extraña voz muy familiar que venía desde la cocina.

¿Cariño?,¿qué pasa aquí? , ¿de que me perdí? María nunca me dice cariño y esa efectivamente no era la voz de María. Entre a la cocina y apenas lo creía realidad esa hermosa cabellera negra y esos preciosos ojos café marrón que ya hacía días que no veía en la mañana y meses en la cocina están presentes. Por un momento pensé que era un sueño y si lo es que mejor me despierten ahora no quiero despertar y afrontar la realidad desilusionada.

-¡¿Mamá?!.- di un pequeño grito.
-hola querida Nia , lava tus manos ya está el desayuno hecho.

Apenas lo podía creerlo mi madre después de meses había vuelto a cocinar para mí.

-Wow mama gracias, y bueno ¿que haces aquí tan tarde?.
-hoy tengo una junta de prensa hasta las once así que le dije a María que llegar un poco mas tarde.

Oh por cierto mi querida María prometí no decirle a mamá de nuestra pequeña aventura de ayer.

-¿Y qué tal cómo estuvo su día de compras ayer?-.
-Emm.. Pues.... No encontré ningún libro de mi agrado volveré la próxima semana.
-Genial linda, yo te tengo una noticia en dos semanas presentaré mi nueva línea de ropa y lo mejor de todo es que será aquí el la ciudad y quiero que tu modeles el atuendo estrella.-dice muy entusiasta mi madre esperando que yo responda pero que acaso se volvió loca creo que quiere que yo acabe con su carrera de diseñadora.

-Pues .....
Dudo en toda su totalidad que yo sea buena para esto creo que hasta en la posibilidad de que un gato hable y que un perro vuelo a que yo camine en una pasarela.

-Piénsalo querida todas las modelos que trabajan para mi quieren ese puesto modelar mi atuendo estrella y tu tendrás ese privilegio.

Oh vaya lo que dice mi madre si es enserio.

-Aaaayyyy mamá pues.. Es que no lo se.- digo más dudosa, mas a fuerzas que de ganas pero no puedo dejarla en al incógnita.

-Piénsalo linda espero tu respuesta en menos de una semana.

De pronto se oye el monstruo que la consume el mi mas grande enemigo su celular ese que siempre sueña y no le da tiempo ni de respirar.

-Oh cariño tengo que irme ahora pero María llegará en cualquier momento no te preocupes.

Como era de esperarse de hecho ya se estaba tardando en soñar. Pero pues ya que.

-Ah Okey mami.- digo mientras me da un beso en la mejilla y sale casi corriendo de casa.

Jamás se escuchaba tanta soledad en mi casa ni el jardinero, ni la ama de llaves y mucho menos María estaban en casa solo yo. muy extraño ya que la mayoría de ellos llegaba a las 8:00 a.m. creo que Maria no fue la única que se dio el privilegio de llegar tarde.

Pero ese silencio duro muy poco "RING-RING" alguien comenzó a tocar el timbre de la puerta como niño pequeño.

-Abre la puerta.- se escuchaba desde con una voz urgida. Así que abrí la puerta lentamente sin fijarme antes quien era.