Date!

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–...NIISAAAAN!– una voz retumbó en los oídos de Karamatsu despertándolo de súbito, quien solo en esos escasos segundos notaba como un auto pasaba a una escasa distancia de donde se encontraba detenido momentos atrás.

Los murmullos de las personas y la preocupación de otras no se hicieron esperar, los cuales no podían dar crédito a lo recién acontecido, nadie se había fijado en que momento aquel joven de chaqueta negra estuvo al lado de ellos esperando por el cambio de luz, pero todos se fijaron en cuanto sintieron un gran grito y el sonoro bocinazo que plantó aquel auto que a pesar de todo en ningún momento dio índice de detenerse. Todas las miradas se encontraban ahora en estos momentos en los dos jóvenes que se encontraban en el piso, el chico de chaqueta de cuero de expresión perpleja quien estuvo cerca de una colisión y su "salvador", un chico que parecía ser su hermano gemelo o un similar pero quien vestía de camisa ya no tan blanca debido a la caída por el fuerte tirón que dio al otro.

–ERES UN IDIOTA!– un nuevo grito volvió a salir de los labios del menor, quien seguía sujetando aunque de manera temblorosa fuertemente la chaqueta de su hermano mayor. –EN QUE RAYOS ESTABAS PENSANDO?!, es...estuviste a punto de que te pasara algo, MALDITO KUSOMATSU!–

Ante el primer grito que planto su hermanito, el chico volteó su mirada encontrándose con un muy agitado y desconsolado Todomatsu. –yo lo...–

–Tonto!, idiota!, maldito DOLORMATSU! – estas eran las únicas palabras que más se lograban entender entre todo lo que le gritaba su pequeño hermanito.

Luego de unos segundos, una vez las personas ya hubiesen empezado su marcha ignorando o solo dando un rápido vistazo al pequeño "espectáculo" que se encontraba en el lugar, los hermanos más tranquilos decidieron levantarse del piso. El segundo Matsuno extendiéndole una mano al pequeño de rosa espero pacientemente ante la mirada que éste le ofrecía, para ayudarle a levantarse del suelo una vez aceptado su ayuda.

–Karamatsu-niisan, se puede saber que estabas haciendo?– una vez ya más tranquilos la caminata junto a un pequeño interrogatorio empezó –y no me pongas esa cara de sorpresa, que quien está más que sorprendido soy yo!, he... por tu culpa tuve que dejar tirada a mi cita!–

–eh?, ah... i'm sorry, solo caminaba y no me di cuenta– comentaba mientras mantenía la mirada hacia el frente, definitivamente no quería que su hermanito se viera involucrado en el desorden que su propia cabeza le estaba causando. –ah, pero... puedes volver with your pretty date– comentaba volteándose a mirarlo junto a una confiada sonrisa, esperando intentar cambiar la conversación.

–bueno...– por su parte fue ahora Totty quien desvió la mirada con un leve sonrojo en cara, quien luego de un leve suspiro apretó su agarre al brazo de su hermano. Por su parte Karamatsu al sentir aquello sintió sus mejillas arden por unos momentos, no sabía si era por la cercanía de su hermanito quien a regañadientes o que pasara nuevamente un "despiste" como recién, le reclamo que estarían bien de ese modo, o porque le resultase "adorable" la escena en que su pequeño Totty se negara a soltarle y aceptara por voluntad propia a caminar a su lado, de todas formas la situación en que se encontraba en estos momentos le agradaba. –como dije por culpa de que un IDIOTA estuviera a punto de sufrir un accidente, tuve que dejar abandonada a mi cita, así que...– junto a una pequeña y dulce pero diabólica sonrisa Todomatsu volteo a ver al mayor –Karamatsu-niisan tendrá que compensármelo!–

–cla... claro my...–

–así que prepárate niisan, porque sé muy bien lo que quiero!– una vez visto la cara de derrota de su hermano prosiguió avanzando –entonces vamos a un lugar donde preparan esta comida que comente la otra vez y...–

Memories Never DieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora