SIENTO (Gay) [Terminada]

Capitulo 22: Aliviado corazón.

Damian 

Una hora más... 

Un día más...  

Un mareo más.

Así estoy ahora. Totalmente mareado.

Mi estómago ruge... Sabrina casi me hace tragar a la fuerza ayer la comida. Y cómo estoy atado se aprovecha. Ella rompe su orgullo para darme de comer a pesar que yo no se lo pido. Yo tengo más orgullo que ella y no se lo pediré nunca aunque me muera... pero ella no quiere eso, prefiere romper su orgullo a que yo muera de hambre.

A mi me da igual. Ya no me importa si me muero o no. Estoy harto de este maldito sótano. Estoy harto de ella. Estoy harto de todo... solo quiero una cosa incluso más que mi libertad...a Mateo. A pesar de todos los problemas que tuvimos y las peleas, no puedo dejar de quererlo a mi lado. Necesito tenerlo conmigo. Necesito abrazarlo, besarlo y hasta hacerle el amor. Lo necesito. Solo él puede calmar y darle sentido nuevamente a mi vida. 

El ruido de una puerta abrirse y cerrarse, y tacones pisar escalones me hacen dar cuenta quien esta entrando nuevamente. Yo tengo los ojos cerrados pero estoy consciente. 

–¿Damian? –oí su voz odiosa intentar sonar dulce– Amor... tienes que comer.

Lentamente abrí los ojos. Mi vista era un poco borrosa– No quiero...

El rugido de mi estómago se podía oír perfectamente. Lo que hizo que ella me mirara con indignación– Tienes que comer Damian ¡Estás muriéndote de hambre! 

–¿Quieres que coma...? –le pregunté suavemente. Ella asintió–...déjame salir de este sótano. 

Ella negó con la cabeza con cansancio– Ya te dije que no ¿Para que? ¿Para que intentes irte nuevamente y vuelvas con el imbécil de Mateo? ¡No y no! –gruño molesta. 

La ira volvió a despertarse de mi– No hables así de él.

–Olvídate de él...–ordenó.

–Yo nunca lo olvidaré. Porque pienso en él todo el maldito tiempo  –le dije provocando.

Sus ojos destellaron enojo– ¿Porque me haces esto? ¿Porque tienes que restregarme tu amor por Mateo? 

–¡Tu te lo buscaste! –exclame con la poca fuerza de voz que salía de mi garganta.

–¡No es cierto! –contradijo– ¡Tu arruinaste todo al no parar de decirme lo mucho que lo amas!

–¡Se suponía que eras mi amiga!

–¡No es cierto! ¡Yo nunca quise ser tu amiga, yo quería ser tu amor! –sus ojos comenzaban a humedecerse sorprendiéndome– Yo quería que me amaras como tu mujer no como tu amiga…¡Pero no! ¡Tu tuviste esa estúpida idea! 

–¿De qué idea hablas? –cuestione confuso.

–¿Ya olvidaste lo que me contaste en la Universidad hace unos meses? –preguntó ella secándose una lágrima que cayó por su mejilla– Tu me contaste una sorpresa que tenías para Mateo, algo que harías en las vacaciones... ¿Lo olvidaste?

Yo me quede sorprendido. Recuerdo de lo que ella hablaba. Yo hace unos meses pensé en hacerle una sorpresa a Mateo durante las vacaciones que comienzan en dos semanas... y se lo conté a Sabrina, ya que la creía mi mejor amiga. Pero no me imaginaba que ese fuera el desencadenante, la razón por lo que ella planeó todo esto y decidió separarme de Mateo después de vernos juntos durante siete años.

–Era eso...por eso hiciste esto…–murmure comprendiendo su actitud después de siete años de fingir ser mi amiga. Por ese motivo que yo le conté ella enloqueció y planeo esto.