❥prólogo

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Maya se encontraba en el living sentada a lo indio en el sillón, viendo atentamente el porno lésbico que tanto le encanta. Le encanta con toda su alma ver porno lésbico, tiene 17 años y es bastante hormonal, desde los 14 años ve porno; fue gracias a su primera novia, la cual le presentó una página bastante reconocida en la industria porno, durante los tres años que lleva viendo, la han descubierto tantas personas que no siente vergüenza si alguien desconocido la ve.

Las amigas de su hermana mayor Chelsea se encontraban en su casa, casualmente las conoce a todas ya que muchas han estado desde pequeñas con su hermana. Así que si alguna de ellas la ve, no sería gran cosa. Se encontraba tan concentrada viendo su computadora que no se dio cuenta que alguien entró en el living. Hasta que escuchó un pequeño grito. Maya no le tomó importancia, su mamá había reaccionado igual. Paró el vídeo y se giró para mirar al dueño o dueña de susodicho grito.

—¿Estas —la desconocida tragó saliva, se notaba bastante nerviosa— viendo porno?

—Sí querida —sonrió— estoy viendo porno.

—¿Tus papás —se detuvo durante un segundo y prosiguió— no se molestan?

A decir verdad la chica era bastante atractiva y nerviosa se veía más preciosa. La inspeccionó de pies a cabeza, esa chica era arte.

—No linda —volvió a sonreír poniendo incómoda a la linda chica que tenía en frente—. Si me disculpas, tengo que terminar el vídeo que está bastante bueno

—Oh sí —susurró la preciosa chica—. No te preocupes —salió corriendo probablemente al cuarto de su hermana Chelsea.

Debe ser una nueva amiga ya que nunca la había visto, primera vez en la casa de los Martinez y la pobre quedó traumada. Maya sonrió inconscientemente y volvió a ver el vídeo.

  ❥  Maya en multimedia 

Las chicas también ven porno.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora