Las chicas también ven porno.

❥Epílogo

- Rápido niñas, no podemos llegar tarde -canturreó haciendo reír a sus niñas.

- Mamá, es que el desayuno de Mami está muy rico -se justificó Bea entre risitas.

- Es cierto, mamá -concordó Noora con una sonrisa.

Maya rió, eran tan lindas sus hijas. Noora de 6 años, pelo negro y ojos azules. Bea 5 años, pelo rubio y ojos verdes. Adoptamos a Noora cuando tenía un año y a Bea cuando tenía apenas unos meses de nacida.

Ambas ahora estaban vestidas y maquilladas como lindas muñecas al estilo de Dollhouse. Incluso les habían teñido el cabello igual que Melanie.

- ¿Terminaron, princesas? -preguntó Brooke entrando a la cocina. Las dos niñas asintieron- Cepillen sus dientes, las quiero aquí en 5 minutos.

Volvieron a asentir y salieron corriendo escaleras arriba.

- Te ves muy guapa -alagó la pelinegra abrazando a su esposa.

- Muchas gracias -se sonrojó, era una costumbre que la rubia siempre se sonroje por las palabras de la ojiazul- Tú también mi amor.

Se besaron, los besos que le daba Brooke siempre serán su perdición.

- Estamos listas -habló Noora tomada de la mano de Bea.

-Vamos, vamos -apuró su esposa, simplemente rió.

Subieron al auto, asegurando el cinturón en la silla para niños y partieron camino a Lollapalooza. Cantaban canciones de niños a todo volumen.

(...)

Maya cargó a Bea y Brooke cargó a Noora. Las niñas estaban emocionadas verían a la tía Melanie cantando.

Y sí, es cantante al igual que Troye pero el andaba en su tour. Estamos muy orgullosos de ellos, además somos los fans número uno.

Se sentaron en el pasto, no tan cerca del escenario y esperaron que saliera Melanie, la cual le tocaba en el quinto lugar. Ya iban en el tercer lugar.

Las niñas jugaban con unos globos que habían comprado en la entrada. Reían y ponían caras graciosas haciendo reír a sus mamás.

- No puedo creer las cosas que han pasado en cinco años -confesó Maya mirando a sus hijas jugar.

- Yo menos -suspiró la rubia y reposó su cabeza en el hombro de Maya.

- Estoy tan feliz con la vida que forme junto a ti y las niñas -el azul se encontró con el verde, sonrieron- Gracias por todo, bella dama.

Las dos rieron por el apodo pasaban los años y siempre se acordaban la primera vez que Maya llamó con el apodo a Brooke.

- Gracias a ti, mi amor -besaron cortamente sus labios y siguieron viendo a sus niñas jugar.

- Niñas -habló fuerte Brooke, ambas la miraron- Vayamos a comprar helados.

- ¡Sí! -gritaron las niñas a unísono.

Brooke se levantó y le tendió su mano a la ojiazul, caminaron de la mano viendo a sus niñas correr un poco más adelante de ellas.

Compraron un helado y volvieron a sentarse donde estaban, rieron al ver a Noora manchar la nariz de Bea con su helado de fresa.

(...)

- D o l l h o u s e,  i see things that nobody else  -cantaron todos en el Lollapalooza.

- ¡Muchas gracias! ¡Los amo a todos! -gritó Melanie y se fue detrás del escenario.

- ¡Tambien te amamos tía! -chillaban las niñas mientras se despedían con sus manitos.

Las mujeres rieron y también se despidieron incluso cuando Melanie no las veía.

Recibió un mensaje de su hermana que decía que podían ir al backstage y ella las esperaría.

- ¡Vamos a ver a la tía Melanie! -habló Maya mientras se levantaba y agarraba una mochila que llevaba.

Caminaron mientras las niñas iban emocionadas ya que hace unos meses no veían a su tía.

Llegaron al backstage y Melanie estaba mirando su celular.

- ¡Tía Melanie! -gritaron las niñas,  corrieron a abrazarla.

Maya sacó su celular y les sacó una foto. Después también corrió a abrazarla porque era su hermana mayor y estaba con el pecho inflado de orgullo.

Brooke también se unió al abrazo segundos después, su mejor amiga era una cantante muy reconocida en el mundo.

- Las extrañe tanto -murmuró Melanie abrazando a todas.

- Nosotras también te extrañamos -dijo Maya.

(...)

- ¡Muchas gracias por estar aquí! -agradeció Maya con una copa en sus manos, miró a cada uno de los adolescentes en el lugar, sonriendo- Ya son 4 años desde que la institución Martinez fue fundada y todo esto también creció gracias a ustedes. Ustedes cumplieron mi sueño el cual era aportar con un granito de arena en el mundo. En serio que estoy muy agradecida, cumplí mi sueño y los conocí a todos ustedes -Todos sonrieron- Personas que no merecen sufrir, y merecen mucho amor. Cuando empecé con mi sueño, veía como algo lejano el hecho de ser algún día una de las instituciones de ayuda más reconocidos. Gracias a todos ustedes, los quiero y estoy orgullosa de ustedes, por haber luchado contra el mundo.

El lugar se llenó de aplausos, veía a todos y se sentía feliz. Que su institución ya cumpliera 4 años, la ponía sentimental porque luchó mucho para llegar a donde estaba ahora.

Bajó de la pequeña tarima, los adolescentes y niños que ella acudía se acercaron todos a abrazarla.

Ellos eran su familia, incluso cuando algunos no hablaban mucho, esos pequeños, significaban mucho para ella.

Después de platicar con algunos empleados se despidió, se escabulló entre todas y vio a su familia, se acercó a pasos rápidos y recibió a sus niñas en sus brazos. Se mantuvo agachada a la altura de sus hijas.

- Estoy muy orgullosa de ti mi amor -Brooke desordenó su cabello, ella rió por el gesto.

- Nosotras también mamá -hablaron al unísono las niñas, aveces parecían gemelas y eso la asustaba un poco.

- Te hicimos un dibujo -esta vez habló Bea con su voz aniñada.

Le encanto y no lo decía por que eran sus hijas. En realidad el dibujo era muy bonito.

- Me encanto niñas, muchas gracias -las abrazó fuerte y ellas también se aferraron a ella.

- También quiero un abrazo -alegó Brooke cruzada de brazos.

Se levantó y la abrazó por la cintura, puso su cuello y aspiró el rico perfume que seguía manteniendo la rubia.

- También estoy orgullosa de ti -susurró- Eres una abogada muy prestigiosa.

- Aw que lindas -la voz de Troye se hizo presente.

Se liberó del abrazo con su esposa y saltó prácticamente a abrazarlo.

- ¡Maldito, pensé que no vendrías!.

- No digas malas palabras mamá -regañó Noora con los brazos cruzados al igual que la pequeña Bea.

- Lo siento amores, nunca más -las miró y les guiñó un ojo.

- Iremos a comer algo con las niñas -habló Brooke y la pelinegra asintió.

- El orgullo que tengo por ti, es más grande que el espacio en los dientes de Melanie -carcajearon juntos.

- Estúpido -le pegó un golpe en la nuca Melanie y después Blake. Aunque ambos rieron por el comentario de Miles.

Fueron a donde estaba su esposa y se reunieron todos juntos, además había venido sus primos y familiares. Exceptuando a sus padres que andaban de vacaciones.

Y en ese momento, se dio cuenta que amaba la vida. Amaba la vida que tenía junto a toda la gente que estaba reunida en la institución. Los amaba a cada uno.

Fin.